Me gustas, pero no cómo un capricho, me gustas para quedarme un largo tiempo en tu vida, todo lo que tenga que durar, abrazarte, aún cuándo me sienta incomoda, cómo para estar ahí cuando lo necesites, correr directo a ti cuándo llames.
Me gustas, no del tipo en que lo dices cuando ves cualquier cosa alrededor que llame tu atención, me gustas de verdad, en el que me arriesgaría ha ir por ello.
Me gustas, de la manera en que quiero verte sonreír siempre, en el modo en que no importa cómo te veas, siempre va a ser algo inigualable para mi.
Me gustas, pero yo no te gusto a ti.
