longing

5 1 0
                                    

El cambio es constante, los momentos efímeros. Todo es temporal, nada dura para siempre.

Un día, o segundo, te encuentras bien; con algo de felicidad sosegando la desesperación en tu interior. En calma, con sentimientos parsimoniosos fluyendo en tu entorno. Pero, por favor, no te acostumbres. El cambio es constante, los momentos efímeros. Todo es temporal, nada dura para siempre.

En un instante crees tener tu vida resuelta, que lo que te atormentaba antes ya no puede destruirte más... y sonríes. Sonríes porque de verdad estás feliz, pero el bienestar es precario, y más problemas llegan como una lluvia ácida en primavera. Acostúmbrate. El cambio es constante, los momentos efímeros. Todo es temporal, nada dura para siempre.

Luego yases en tu cama; tu cama mullida, tapada con tu edredón favorito mirando las estrellas plateadas pegadas en el techo de tu habitación mientras cantas silenciosamente la música que baila en la atmósfera como un incienso tranquilizador. En tu mundo aparte, lejos de los problemas por tan sólo unos minutos... para luego volver a la tortuosa realidad. El cambio es constante, los momentos efímeros. Todo es temporal, nada dura para siempre.

Lo tenías todo. Todo. Vida, felicidad, tranquilidad. Eras tan feliz pero no lo disfrutaste porque querías más. No aprovechaste, no agradeciste lo mucho que tenías aunque en ese entonces lo creías poco. Te diste cuenta sólo cuando te encontraste de pie en medio del caos, de destrucción y sobre todo, de incertidumbre. Porque el cambio es constante, los momentos efímeros. Todo es temporal, nada dura para siempre.

Tiempo después escuchabas las mismas viejas canciones con nostalgia. Con ganas de llorar por los recuerdos latentes, con tu piel erizada y pulso furicundo ante el recuerdo de los momentos que no supiste apreciar del todo. Por un tiempo, un momento, un instante; por las sensaciones que conllevaron a una acción, una decisión. Tu decisión y tu libertad efímera pero errónea ante el visto de los demás. Sensaciones que estarán contigo siempre como un bonito y triste recordatorio de la dificultad que existe para quién desea ser libre. Por todo.

Tiempo después te diste cuenta que el cambio es constante, los momentos efímeros. Que todo es temporal y nada dura para siempre. Pero entonces ya era muy tarde.

---
Una mala mañana. Un porvenir lejano.

thoughtsWo Geschichten leben. Entdecke jetzt