18

10 0 0
                                    

Mis bisabuelos maternos son del estado de Guanajuato, y se trasladaron a la capital del país en la revolución de 1920, tuvieron a mi abuela Esther, y el linaje de los Stirling comenzó al casarse Esther con George –hijo de uno de los condes de España, adinerado y atractivo, con una potente voz que endulzaba a las chicas de esa época.

La versión de cómo se conocieron mis abuelos, es muy romántica, según Esther, y espero vivir una historia como la de ellos, llena de romance, pero claramente es imposible.

****************************†*******
Hemos llegado a la capital del país vecino del sur.

Rayza investigó en internet algunas boutiques para comprar objetos que utilizan las quinceañeras en su día.

No tengo idea de qué se utilice, según sé es un vestido, zapatillas, y de ahí no sé qué más.

La primer boutique está llena de vestidos, el primero que observo es colocar verde esmeralda, con un escote pronunciado y un diseño muy simple, sigo caminando.

Diviso uno, en color coral, abonbachado de la parte de la falda, y con una pedrería muy discreta; me encanta el color, pero definitivamente no es el vestido que quiero.

Rayza, Belle —mi madre—, y Esther, se encargan de mostrarme la calidad de la tela, de cada diseñador, el ramo del vestido, y el tipo de pedrería que tiene cada uno.

Belle se desespera con mucha facilidad, dice que soy muy difícil en estar conforme con algún tipo de prenda, en lo que le doy la razón.

Quiero un vestido que me guste, no me quiero sentir presionada, porque después me arrepentiré.

Me enamoré como nunca Donde viven las historias. Descúbrelo ahora