🎃¡Halloween! #1🎃

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Esta es solo la primer parte de mi "¡Especial de Halloween!", espero que los disfruten~

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Felix gimió, sentándose lentamente con los ojos cerrados. Bostezo, llevando sus manos a la cabeza y rascándose ligeramente tras las orejas. Abrió lentamente los ojos y miro de manera adormilada a su alrededor, frunciendo el ceño con confusión: estaba sentado en un colchón en el piso, a su lado estaba Oswald acostado boca arriba, con una mano en su pecho y la otra a su lado, con los ojos cerrados y la boca abierta mientras roncaba; le seguía Mickey, acurrucado de costado y con las manos acunadas contra su pecho, dejando escapar ligeros suspiros y moviendo la cola; luego estaba Bendy acostado boca abajo, con las manos a los costado y su derecha aplastada contra el colchón, murmurando cosas entre dientes; Cuphead estaba a su lado, con las manos entrelazadas sobre su pecho y ligeros ronquidos saliendo de su boca abierta; y al final estaba Mugman de costado, abrazando a Ink contra su pecho y una de sus mejillas aplastada contra la cabeza ajena, mientras que Ink estaba acurrucada y sin dar señales de querer moverse.

-Agh...- parpadeo, el sueño se desvaneció de golpe al recordar un detalle: cada uno de ellos tenía una habitación por separado en el gran castillo. Trago saliva y miro hacia arriba, bajando las orejas con miedo al ver que el techo no era de grandes piedras como en el castillo, si no que era de sementó. Palpo ciegamente hasta poder alcanzar la mano que el conejo tenía en su pecho, agitándolo mientras miraba a su alrededor. Al recibir solo gruñidos como respuesta, apoyo ambas manos en el pecho ajeno y lo empezó a agitar con más fuerza que antes. -¡Oswald, despierta!- 

-¿He?- parpadeo varias veces, sin esperar encontrarse con la expresión asustada del felino de pelaje negro. -¿Felix?- se sentó lentamente, mirándolo con atención. -¿Qué...?-

-¡No estamos en el castillo!- señalo rapidamente. El conejo miro a su alrededor, frunciendo el ceño con molestia: estaban en lo que parecía ser una sala algo grande, con muebles tapados con sabanas blancas con algo de polvo encima y grandes ventanas que dejaban notar que afuera era completamente de noche, con la luna brillando con fuerza en el oscuro cielo. Suspiro y miro a los demás.

-¡Despierten!- sin respuesta ni movimiento. Felix se levanto, caminando hasta una ventana para mirara hacia afuera. -¡DESPIERTEN; MONTÓN DE HOLGAZANES!-

-¡¿Qué cosa?!- Mickey y Cup se sentaron de golpe, parpadeando rapidamente.

-¿Qué pasa?- murmuro Ink mientras se sentaba y bostezaba, Mug haciendo lo mismo a su lado.

-Odio las mañanas...- gruño Bendy, moviéndose hasta quedar arrodillado. Todos miraron a su alrededor, despertándose por completo. -¿Donde se supone que estamos?- frunció el ceño.

-Ni idea- negó la coneja, levantándose y estirando los brazos por sobre su cabeza.

-¿Como es que no podemos tener un descanso?- bufo Cup, levantándose.

-Mala suerte- Mickey se encogio de hombros.

-No tengo mi bolso- suspiro el felino con tristeza.

-Tampoco tengo mi control- negó el rey del Páramo después de palmear sus bolsillos.

-Ni yo mi pincel- el ratón frunció el ceño. Mug apunto hacia una pared y se concentro, la punta de su dedo brillo pero ningún disparo salió.

-¡Hey!- frunció el ceño.

-Supongo que tampoco tenemos disparos- suspiro Cup. Ink miro sus manos y bufo cuando estás brillar pero su martillo no apareció. Miro a sus amigos y negó con la cabeza, encogiéndose de hombros.

-Bendy...- la coneja miro al demonio. -...¿puedes sacarnos de aquí?-

-¡Por supuesto que si, querida~!- él sonrío con confianza, alzando una de sus manos. -Nos iremos justo...- se detuvo en seco, frunciendo el ceño y mirando su cuerpo, como si estuviera buscando algo raro.

-¿Qué pasa?- pregunto Mickey, confundido.

-No tengo tinta- suspiro el demonio.

-¡¿Qué?!- se le quedaron viendo con sorpresa.

-¡Oigan, no me reclamen!- gruño. -Si utilizo la tinta que tengo, me debilitare y tendrán que cargarme...- se cruzo de brazos. -...¡y quien sabe que tan grande es este lugar!- los demás suspiraron.

Mientras ellos hablaban, Felix estaba revisando los muebles en busca de algo de utilidad, deteniéndose en seco al notar un espejo colgado en la pared. Entrecierro los ojo, acercándose lentamente al ver una figura borrosa reflejada en la superficie. Levanto su mano y antes de poder reaccionar, aquella cosa se convirtió en un rostro de lo que parecía ser un zorro amarillo con blanco, con una sonrisa algo deforme llena de colmillos y los ojos bien abiertos...con un liquido rojo manchandolo por completo. El felino grito, cayendo de sentón y temblando ligeramente, su pelaje totalmente erizado.

-¡Felix!- el conejo fue el primero en acercarse, ayudando a su tembloroso amigo a pararse. El gato miro de reojo el espejo, tragando saliva al ver que estaba estaba completamente roto. -¿Estás bien?- pregunto, sujetándolo de los hombros. Felix asintió rígidamente, la extraña imagen que había visto aun en su mente.

-¿Seguro?- pregunto Mickey, preocupado. El felino solo volvió a asentir, dándole una ligera y temblorosa sonrisa.

-¡Encontré linternas!- se voltearon a ver a Ink, quien tenía una sonrisa y una linterna para cada uno de ellos.

-¿Donde estaban?- Mug la miro con curiosidad.

-En el piso- ella se encogio de hombros.

... ... ... ...

Afuera era mucho peor. Estaban entrando en un bosque completamente oscuro, con el viendo moviendo y haciendo sonar las hojas de los grandes y altos arboles, el cielo oscuro y nublado solo daba un toque más tétrico. Todo era silencio, roto solo por el sonido de los pasos múltiples de toons.

-Y yo que pensé que mi estudio era tenebroso...- murmuro Bendy, alumbrando a su alrededor con la linterna.

-Yo pensé lo mismo...- asintió Cup, haciendo una mueca. Podía jurar por el sorbete que sobresalía de su cabeza, que alguien se estaba moviendo entre las sombras.

-Este lugar me parece familiar, en realidad- hablo Ink, apretando ligeramente la mano de Mug.

-¿En serio?- pregunto el ratón con sorpresa.

-Si pero no se me viene nada a la mente- negó con un triste suspiro. Se detuvieron en seco al escuchar una risa escalofriante, la cual hizo eco a su alrededor. Y luego, un cuchillo salio disparado desde algún lugar en la oscuridad, pasando muy cerca de la cara del conejo y clavándose en un árbol. Los presentes jadearon, sorprendidos.

-¡Rayos!- gruño el rey del Páramo, había visto el filo de esa cosa pasar muy cerca de sus ojos.

-Chicos...- Felix los llamo, atrayendo su atención. -...miren- señalo con miedo hacia el cuchillo clavado en el árbol, donde pudieron notar una nota.

-¿Una..nota?- Mug se acerco y la saco, todos parados tras él para poder mirar también.

-"Can't run"- leyó la coneja lentamente. Eso es lo que estaba escrito en aquel viejo papel, acompañado con algunos rayones de más. -No...- trago saliva con algo de miedo. -No puedes correr- se miraron entre ellos con miedo, para después tragar saliva cuando un fuerte sonido de estática se empezó a escuchar.

-¡¿De donde viene?!- el felino tembló.

-N-No sé- negó el ratón. Y justo en ese momento, pudieron notar una alta figura aparecer lentamente entre los arboles, al mismo tiempo que el sonido de la estática se hacia cada vez más fuerte e insoportable. La risa de antes volvió a sonar y notaron, con gran temor, que el cuchillo ya no estaba clavado en el árbol.

-¡Vamos!- ordeno el conejo y empezó a correr, escuchan que los demás lo seguían. No sabían a donde iban pero debían alejar, rápido.

"The Old Toons"Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ