-TREINTA Y SIETE-

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—Perfecto, yo distraeré a los guardias ¿se llevaron la escalera de cuerda? Cambio – respondí

—Thomas lo cortó antes de él bajar, él se adentró al centro y está en su habitación, búscalo y llévalo a un lugar seguro mientras haces lo demás, cambio – respondió

—Perfecto, cambio y fuera.

Salí de la habitación de Susan y me dirigí a la habitación 205, la de Thomas, en el segundo piso, lo encontré sentado en la orilla de la cama totalmente preocupado, al verme, su preocupación se disipo al instante...

—Pensé que no saldría jamás – dijo

—No te preocupes, si lo harás, quédate aquí, yo llevare a los guardias al último piso y vendré por ti en cuanto pueda y saldremos, Patrick me paso la tarjeta que consiguieron, tu escape es el más fácil – dije y sonreí, el sonrió de vuelta - ¿Dónde está la escalera de cuerda?

—La escondí bajo la cama – dijo a secas

La tome y salí de inmediato de su habitación, baje las escaleras y me dirigí a mi lugar de estar, el de todas las amas de llaves, coloque la escalera en mi respectivo carrito y mañana la colocaría de nuevo en su sitio...

Me acerque a los guardias lo suficiente para que pudieran verme, me miraron confundidos...

—¿Qué hace tan tarde por los pasillos señorita? – pregunto uno de ellos en tono firme

—Pues, estaba solo supervisando algunas cosas – mentí – y me di cuenta de que la puerta de los helicópteros está cerrada por fuera, alguien debe de estar allí

Los dos guardias se miraron sorprendidos, pensaban en que hacer...

—Usted quédese aquí, no se mueva de aquí, nosotros dos vamos a ver de qué se trata – ordeno el mismo de antes

Me limite a asentir y me pasaron una de sus armas, la tome y me quede allí parada mientras ellos se perdían por las escaleras en forma de espiral, cuando los perdí de vista subí rápidamente las escaleras hasta llegar al segundo piso, me acerque a la habitación de Thomas y abrí la puerta, seguía esperándome, le hice señas de que viniera conmigo y de inmediato corrió hacia mí, cerró la puerta de su habitación y bajamos corriendo las escaleras...

Al llegar, de mi bolsillo tome la tarjeta que Patrick me dio hace días y la pase por la pasa tarjetas de seguridad, esta puerta abrió de inmediato deslizándose a los lados, como es, Thomas salió y la puerta volvió a cerrarse, me despedí de él con la mano y el hizo lo mismo hasta que la puerta volvió a cerrarse, escondí nuevamente la tarjeta en mi uniforme y tome el radio...

—Gama, gama ¿estás ahí? Cambio – dije para el radio

—Aquí estoy ¿Qué sucede? – respondió

—Ya Thomas salió y me encuentro sola en la puerta de entrada, deben de tomar el auto rápido para yo presionar el botón.

—Entendido, cambio y fuera.

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Destinados Al Peligro (En edicion/PAUSADA)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant