Emprendiendo el viaje

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Como era de costumbre, cada tribu se levantaba con los primeros rayos de sol. Exacto Hank quien, aparte de siempre levantarse tarde, tenia una gran resaca que lo podía de peor humor.

-LEVANTA TE ESTÚPIDOS HIJO! NO VES QUE TU ERES EL ÚNICO A QUIEN ESTAMOS ESPERANDO?!

En la cabeza de Hank todo se escuchaba como su estuviera en una burbuja. Con las mismas ropas del día anterior se acostó y con esas mismas ropas se dirigió al lugar de encuentro. Todo el mundo lo estaba esperando con el ceño fruncido. Excepto Mimi quien se dirigió a el con una taza de plata.

-Sabía que te quedaste bebiendo después que me fui, dijo tendiéndole la raza- así que te preparado una receta familias para el dolor de cabeza.

-aha dijo nada mas para después tomar la bebida de un solo trago

-mi padre también solía pasarse un poco con el alcohol

-Hablas del anterior líder del agua?- Pregunta Hank a lo que ella asiente cabizbaja

El al darse cuenta del tema delicado que saco no sabia como escapar

-hamm.. Gracias... Por el remedio -alcanzó a decir

-De nada! Digo! -hace una pequeña reverencia -no hay de que -dice sutilmente



Tras charlar unos minutos fueron interrumpidos por tres chicas exactamente iguales. La única diferencia en ellas era el color de sus ojos Azul, amarillo y Violeta.

-Señorita Mimi, todo esta listo para el viaje-hablo la muchacha de ojos amarillos.

-La generala dio la orden de partir inmediatamente para evitar la patrullada matutina de la fuerza militar-aviso esta vez la de ojos violeta.

-La esperamos afuera señorita Mimi, no tarde por favor-se despidió la de ojos azules.

Hank se preocupó inmediatamente y se giró hacia Mimi que se mordía el labio.

-¿Te vas?-pregunto ansioso-¿No te tenían que deliberar la situación todavía?

La líder de la tribu agua se movió nerviosa mientras buscaba las palabras exactas para explicarse. Pero tardó demasiado, por lo menos para Belenus.

-¡¿Es una broma!? ¿Estas jugando con nosotros niña?

Belenus tenía la cara roja y Hank estaba seguro que era cuestión de tiempo para que el vapor saliera por sus oídos.

Mimi dio un paso atrás asustada pero sintió que alguien colocaba una mano en su espalda, era reconfortante. Al voltear la cabeza se encontró con Dahila.

Hank atinó a ver un brillo alentador en ojos de ambas. Mimi volvió a encarar a los demás con un semblante seguro y decidido.

-No es ninguna tontería es mi decisión. Es verdad que no poseo la experiencia ni las capacidades para ser un líder pero no voy a permitir que la tribu de mi padre caiga frente a mi. Es mi obligación como líder y como hija.

La tribu de agua se mantendrá en pie y no me importa frente a quien deba arrodillarme.

Mimi clavó su mirada en todos y se detuvo más tiempo en Belenus. Luego salió por la puerta seguida de su soldado



Hank tenía que admitir que aquella niña se había ganado su respeto ante tanta valentía. Pero mas que eso, sentía algo de envidia de la relación tan familiar que tenia Mimi con su generala. Ni de su padre siquiera los guardias que por tantos años lo han acompañado recibió ni tan solo un abrazo, para ellos fue desde que nació el heredero que tiene que crecer fuerte y frío para sobrellevar todo un pueblo.

Cadáver exquisitoWhere stories live. Discover now