El Dragón sin Límites

¡Rivales! el poder liberado

Por desgracia Darling lo que ocurrió en ese entonces volverá a ocurrir, pude ver el futuro y en esta dimensión ocurrirá lo mismo que en la otra, tendrás que detener a Rizervim una ves más - Decía algo triste la peliblanca - Se que es muy doloroso tener que enfrentarte nuevamente al pasado pero es así, no hay vuelta a atrás

Lo se Chi- Chan, no te preocupes, esta vez las protegere aunque me cueste la vida - Decía decidido Issei

Issei... en verdad sufriste mucho, te prometo que jamás me apartare de ti, lo prometo - Decía Sona abrazando el brazo de Issei mientras lágrimas salían de sus ojos

No te preocupes Sona, esta ves será diferente - Decía el castaño con una sonrisa que tranquilizó a Sona

Dime Chichigami, si es que tienes tanto poder ¿Por que no eliminas tu a Rizervim? Así Issei no tendrá que pasar por lo mismo - Decía Sona buscando una solución

Por desgracia no puedo involucrarme a tal punto, si lo llegará a hacer se perdería el balance entre las dimensiones y eso será mucho peor que Rizervim - Decía Chichigami con tristeza - Bueno Darling tal ves no pudimos pasar tanto tiempo juntos pero ya me tengo que ir, tengo unos asuntos pendientes

Claro Chi- Chan has lo que tengas que hacer, nos veremos luego - Decía Issei siendo besado por la peliblanca

Nos vemos Darling - Decía la peliblanca creando un portal para luego entrar en él y desaparecer

Dime Issei ¿Ella es tan fuerte como dices? - Preguntaba curiosa la pelinegra

Hai, según ella me dijo es capas de destruir una dimensión en un segundo - Decía Issei sorprendiendo a Sona

Mientras tanto en otro lugar se encontraba Chichigami viendo una pantalla, pero en esta pantalla había algo peculiar ¿Que cosa? Pues se podía observar a un hombre, alguien parecido a Issei con la diferencia de tener el pelo color negro y los ojos violetas sentado en un trono echo de huesos rodeado de miles de Ophis Ouroboros que lo manoseaban, lo complacian sexualmente, le daban masajes, lo alababan y rogaban por que este sujeto le prestara un momento de su tiempo para pdoer acostarse con ellas, a unos metros de el se encontraba un peliblanco el cual era Rizervim que era torturado mientras curaban sus heridas y nuevamente lo torturaban de las peores formas que existen, lo azotaban, golpeaban, le lanzaban ataques mágicos, lo violaban con objetos, le arrancaban las uñas, y muchas cosas más, todo esto era visto por el sujeto pelinegro que tenía una risa de maniático, pero lo que más destacaba de este sujeto era su armadura, la cual era completamente negra con gemas violetas, Chichigami lo veía con repulsión, pero a la vez con miedo...

Maldito Dark Issei... Nunca te dejaré escapar de esa dimensión...

Mientras tanto en la ciudad Kuoh Issei acompañado de Sona estaban llegando a la Academia, cuando al fin llegaron Issei hizo algo que sorprendió a todas las chicas del séquito de Sona, apenas las vio fue corriendo hacia ellas para abrazarlas con mucha fuerza sonrojandolas al límite, el pobre castaño contenía sus lágrimas lo más que podía, Sona entendió lo que ocurría y veía esto con tristesa

¿Ellas también eran tus mujeres? - Preguntaba Sona cuando al fin Issei se tranquilizó y pudieron ir a un lugar privado

Hai, ellas también - Decía Issei con tristesa mientras le venían a la mente recuerdos de ellas del pasado

Eso no fue lo único que paso en ese extraño día, cuando el castaño vio al séquito de Rias hizo precisamente lo mismo, todas se sonrojaron, incluso el corazón de koneko el cual todos creían que era de roca dio un salto al sentir al castaño tan serca de ella, Saji se tomó muy mal esto, pero Sona le dio una mirada que lo petrifico impidiendo que haga cualquier movimiento