Capitulo 1

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Las noches en Mónaco eran algo ostentosas, multitudes de fiesta, casinos abarrotados y los fuegos artificiales brillando en el cielo de la ciudad. Pero esta noche tenía algo distinto, era especial, ¡Era mi cumpleaños! y aquí todos toman cualquier excusa como un modo de celebración.

Había pancartas, pendones con mi nombre y la bandera de la realeza por cualquier lugar donde posara la mirada, todos acompañados con la típica frase célebre ¨¡Que viva la princesa!¨ no podía negarlo, me divertía la situación mientras recorría las calles en un coche con Amira a un destino que solo ella conocía, al parecer mi mejor amiga quería sorprenderme.

Rodamos un par de kilómetros hasta que un edificio de tres pisos apareció frente a nosotras, aparcamos en el estacionamiento y un gran letrero en francés iluminaba la entrada del lugar ¨Profiter de la nuit¨ (disfruta la noche). Volví mi mirada a mi mejor amiga que me miraba expectante.

-Definitivamente esto no era lo que tenía en mente – la acuse mientras veía como la gente se aglomeraba en las puertas para entrar.

-Yo solo dije que te sorprendería- me guiño el ojo.

-Más no dijiste que íbamos a cometer un acto suicida mujer- fruncí el ceño- Todos van a saber que estoy aquí – dije nerviosa.

Ahora sí que me voy a meter en un lio, que tonta, como pude pensar si quiera en aceptar la propuesta de Amira.

Primero dice que quiere celebrar mi cumpleaños de una manera distinta, segundo, mintió al decirme que iba a ser algo tranquilo y tercero, si mis padres llegan a enterarse van a matarme, ni siquiera sé cómo pudimos salir del palacio sin que nos pillaran.

-Vamos Amelie, nadie va a enterarse que se trata de ti – me miro suplicante – ¡Vamos!, por algo este lugar existe.

Amira busco en su bolso y saco dos antifaces, me entrego uno y bajo el espejo del retrovisor para mirarse mientras se colocaba el suyo. Mire el que me había entregado.

Resople totalmente rendida, no tenía caso decirle que fuésemos a otro lugar.

Baje el espejo y me mire mientras colocaba el mío, al terminar de acomodar el antifaz acabe dándome cuenta que cubría lo suficiente.

-Bueno, no creo que por mis labios vayan a descubrirme- le dije al fijarme que era lo único que dejaba al descubierto el antifaz. Voltee y la mire sonreír.

-Es la magia de Profiter de la nuit – puntualizo haciendo una mueca exagerada y un ademan con la mano.

-Te equivocas, esa es la magia de Mónaco querida – corregí.

-El punto es que puedes ser quien tú quieras esta noche – me miro - ¿lista? – asentí y bajamos del coche.

Amira podía ser un tanto persuasiva cuando se trataba de lograr lo que quería, en ese aspecto no podía negar que ambas éramos parecidas y esta noche aunque me hiciera la que no quería salir, era la que realmente más quería hacerlo. Despejar mi mente y por un momento pensar que era libre de todo este embrollo que apenas estaba conociendo, esa faceta tan oculta como oscura que tenía mi padre y que poco a poco en la que también iba involucrándome.

Esta noche quería ser otra, ser libre y olvidarlo todo.

¡Eso quería!

-Te luce ser rebelde Amelie- dice Amira divertida mientras caminábamos al local.

-¿Te estas burlando de mí?- arquee una ceja siguiéndole el juego.

-No, solo no pensé que te vería en una situación como esta – me tomo del brazo para caminar juntas – ¿quién lo diría?, logre sacarte de la mansión a escondidas después de tu fiesta de cumpleaños, logre que te pusieras ese vestido plateado, que déjame decirte querida – me examino con la mirada - es demasiado sexy – la mire divertida.

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⏰ Last updated: Oct 02, 2018 ⏰

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