'Reflejo'

DÍA 1

CAPITULO 1

Fue inexplicable, el día anterior estoy seguro de que me hallaba en una realidad distinta a la mía, pero que coincidía en algunas cosas, alterándolas en algo aterrador y siniestro.

Mi familia estaba reunida en el comedor, esperando con sus hambrientos estómagos a que se sirviera la comida, cuál fue mi sorpresa al hallar a más de la mitad de mi familia materna; me alejé de allí y me acerqué a mi madre, en busca de una respuesta

- Madre ¿Cómo es que hay tanta gente en el comedor? – mi madre, distraída se asusta al escuchar mi tono de voz grave, ubica su mano en el corazón y me observa con los ojos abiertos

- Joder hijo ¿quieres matarme de un susto? ¿acaso ya no quieres a esta pobre vieja? – le sonrío-

- No mami, pero venia por que quiero saber cuando citaste a nuestra familia, y, lo siento

- Vale, no te preocupes- voltea su cuerpo dirección a la estufa- eres un olvidadizo, hace menos de dos semanas los citamos, y anoche te dije que ellos llegaban hoy, pero estabas demasiado distraído ayer que llegaste-me mira de reojo- por cierto, ¿en que estabas pensando?

- ...- no le respondo nada, ¿debería contarle, aquel acontecimiento extraño que ocurrió y que no me permitió dormir?, pero ¿creerá en mí?, o, ¿creerá que enloquecí? - No pasó nada ma, venia con muchas cosas en mente, ya sabes, la universidad y todo aquello- miro a mi madre y decido irme de allí.

Me ubico en la mesa comedor, y espero. Es aquí, el inicio de mis pesadillas, mi madre sirvió el almuerzo, y, como tal espere a que iniciara mi padre a comer, cuando lo hizo, agarre mi cubierto, y antes de ingresarlo a la comida, vi mi reflejo distorsionado, en donde cambio radicalmente mostrándome una chica, de cabello negro largo y gestos tristes. Solté el cubierto, como si me estuviese quemando, mis latidos se desenfrenaron, mi respiración se acortó y mi mente me la empezó a jugar de una muy mala manera, revoloteé los ojos buscando a mi familia. No estaban allí, ¡NO ESTABAN EN MI PANORÁMICA! Había oscuridad rodeándome, y luego me encontré con muchas fuentes brillosas que molestaron mi vista, parpadeé, y al enfocarla, vi a aquella mujer, la que se presentó en el reflejo de mi cuchara...

Grité, entre en un ataque de pánico, cerré mis ojos y me agaché, buscando protegerme, me repetí una y mil veces, que lo que vi no era real, que me encontraba soñando despierto y en realidad me hallaba en el comedor, tenía que ser así, ¡tenía que serlo! Rogué y rogué, y en ningún momento me atreví a abrir mis ojos, me columpié en mí mismo, hasta que sentí una mano en mi espalda, grité de nuevo, más fuerte, encerrado en mi miedo

- Hijo, ¡hijo! – abrí los ojos, y allí estaba mi madre, observándome con miedo y preocupación en su rostro-

- ¿q, qué pa paso? – tartamudeaba, mi organismo aún se hallaba alterado, dudaba que lograra recuperarme pronto

- Explícame tu eso, estábamos comiendo, normalmente cuando decidiste gritar, y gritaste que no era real, te hallabas lejos mentalmente de nosotros, ¿Qué ocurre? – mi familia todos me miraban con pánico ¿he dañado el almuerzo?

- n-no sé, ¿puedo retirarme de la mesa?- asintió, y sin más que decir, me retire de aquella mesa aterrado, confundido, y sobre todo, desprotegido...