⌗Different慰⨾ kooktae

❀Extra; Yeontan

-¿Yeontan?

-Así decidí llamar al cachorro, pero Jungkook, Yeon...

-Taehyung, se a donde va esto y es un no.

-Jungkook, por favor.

-No.

-Por favor, amor ~

Domingo por la mañana, su único día libre, ese hermoso día en que podía dormir hasta tarde había sido profanado por una bola de pelos, una molesta bola de pelos. Jungkook se arrepentía de ser tan fácilmente manipulable por Taehyung, era tan débil ante su novio, gracias a ello, ahora estaba de caminó a comprar la comida de Yeontan, eran las seis de la mañana y ya estaba fuera de la cama, definitivamente terminaría odiando a ese intruso peludo.

Entro al departamento, dejó las llaves del auto en su lugar y comenzó una busqueda para encontrar a su novio, al llegar a la sala, se encontró con la cosa de ojitos tiernos, iba a marcharse pero un ladrido lo hizo detenerse, el pequeño cachorro corrió hasta sus piés, lamiendo sus zapatos mientras movía su colita, debía admitir que era adorable, demasiado, pero odiaba el efecto que tenía sobre su novio y como es que pasaba a segundo plano por su culpa.

Taehyung llegó corriendo a la sala, tomando al cachorro y la comida antes de irse a la cocina, una mueca se apodero del rostro de Jungkook, había ido a comprar la comida de esa cosa y ni un gracias recibió.

「 ♡ 」

Molestó con la actitud de su novio, Jungkook permanecía en su habitación todo el tiempo, habían pasado tres dias en los que Taehyung se dedico a mimar y estar solo con Yeontan, se había olvidado por completo de él.

Escuchó a Taehyung conversar con alguien, y sabía perfectamente quien era ese alguien; Jimin, hace unas semanas el y Taehyung se habían hecho amigos, algo que le alegraba a Jungkook, sabía que su novio no podía pasar todo el tiempo con él, necesitaba alguién más con quien distraerse de vez en cuando y Jimin, el fue el indicado.

Jimin hablaba casi a gritos al ver al pequeño cachorro, este meneaba su colita recibiendo con alegria al mas bajo, escuchó al rubio preguntar por él, a lo que Taehyung respondió con simpleza, enfocándose nuevamente en Yeontan, una puñalada más.

Tras un rato de exiliarse en su habitación, decidió salir y buscar algo que comer, se escabulló hasta la cocina para encontrarse con el refrigerador vacío, decidió que la mejor opción seria ir a la tienda mas cercana y comprar algo. ¿Debería avisarle a Taehyung que saldría? Probablemente, pero corria el riesgo de ser ignorado, suspiró antes de dirigirse a la sala.

-Jungkook hombre, pensé que ya habías muerto en tu habitación.- Jimin río apenas lo vio entrar.

-También me alegra verte hyung.- El pelinegro habló con cierto sarcasmo en su voz.

-Taehyung ire a comprar algo para almorzar, ¿vienes? Jimin podría cuidar de Yeontan.- Jungkook observó a Jimin, quien asintió como respuesta.

-Claro, solo tengo que... ¡Yeontan espera!- La risa del mayor no tardo en hacerse presente, el peludo cachorro lamía sus mejillas.

La expresión de Jungkook ensombreció, observaba a su novio con aquel enojo que hace días se había formado en él y rogaba por salir, metió sus manos en las bolsas de su sudadera en un intento de ocultar su molestia, sin insistir salió de la casa azotando la puerta tras el.