Capítulo 5

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SeokMin quería saber, quería descubrir porque la madre de HyeSun había dicho aquello, sabía que se metería en problemas, pero, ¿No valía la pena?, ya no tenía excusa para visitar a su superior y tendría que pasar cuatro días sin hacer nada sufriendo al querer descubrir los secretos que existían en aquella casa.

Entonces solicitó la presencia de su amigo MinGyu, el cual se enfermó de una repentina gripe en el trabajo solo para ir con SeokMin.

–Analicemos esto, quiere saber porque la vieja dijo eso con tanto drama, pero no tienes excusa para ir, por lo tanto no puedes preguntarle sobre la desaparición de su marido. Sin mencionar que toda tu curiosidad se debe a que te gustó el chico especial.

– ¡No me gustó SoonYoung! ¡MinGyu por favor!

– ¿Y por qué te alteras tanto? Algunos chicos han podido superar esos síndromes y vivir normalmente, incluso se han casado, ¿Qué nivel tiene?

–No lo sé, no me interesa- MinGyu levantó una ceja y SeokMin suspiró-. Bueno, si me interesa, pero no pienso tener algo con ese chico, sería jugar con fuego.

–Sabía que te gustaba, que risa, tiempo sin gustar de alguien y mira quien te vino a interesar- Dijo con una gran sonrisa.

–MinGyu, a veces pienso que tu cerebro no maduró.

–Perdón usted rey de la seriedad y la madurez- Rodó los ojos-. Espera, Tal vez esa mujer mató a su marido y lo enterró en el patio, tal vez tenga un cementerio con todos los que quieren sacar al chico al exterior. ¡SeokMin tal vez tenga tu tumba ya lista por descubrir a su hijo!

– ¿Pero qué coño estas diciendo?, sabes, no ayudas.

MinGyu rió y SeokMin no pudo evitar acompañarlo, Sí, SoonYoung era precioso, pero era demasiado arriesgado tener algo con ese chico, era un camino demasiado difícil y que el evitaría, su vida era cómoda y pacifica lejos de problemas complicados, estaba bien así.

Minutos después y unas copas de más provocaron que MinGyu empezara a quedarse viendo el infinito mientras SeokMin servía más licor.

– MinGyu... quiero ver a SoonYoung

–Vamos... yo, prender, la camioneta que no tengo.

Ambos rieron mientras se golpeaban sentados en el sofá balanceándose de un lado a otro y en pocos segundos se quedaron dormidos.

Faltando tres minutos para las cinco de la mañana una llamada despertó a SeokMin, desorientado y algo mareado buscó su teléfono con la mirada, se quitó a MinGyu de encima dejándolo en el sofá para encontrar el celular.

Llamada entrante: HyeSun

–Buenos...-SeokMin no sabía qué hora era pero antes de revisar la mujer habló rápidamente.

–SeokMin, necesito tu ayuda.

La adrenalina recorrió su cuerpo instantáneamente. Vistiéndose rápidamente, salió del apartamento dejando a MinGyu tirado en el sofá, recorrió las oscuras calles, tenía que llegar rápido a la casa de HyeSun.

Mi madre ha perdido el conocimiento, voy camino a la clínica, eres el único que conoce a SoonYoung a parte de nosotros, su doctor no está disponible, por favor, cuídalo.

Al llegar buscó ayudándose con la linterna de su celular las llaves que había ocultado HyeSun para que ingresara. Al encontrarlas abrió la reja con algo de dificultad y la volvió a cerrar, repitió el proceso con la puerta que daba entrada a la casa.

Todo se encontraba en penumbras, encendió la luz, SoonYoung estaba dormido, o al menos eso le había dicho HyeSun, pero un fuerte y lastimero llanto proveniente de algún lugar decía lo contrario.

SeokMin buscó por la cocina, y toda la planta baja, el llanto cesó y aun no encontraba a SoonYoung, decidido a encontrarlo subió a la segunda planta buscando en cada habitación, no le importaba revisar cada rincón de la casa, SoonYoung estaba solo y posiblemente asustado.

– ¿SoonYoung?, soy yo, SeokMin. ¿Dónde estás?

Pero el chico no respondía y SeokMin empezó a alarmarse, la luz empezó a fallar, y luego un fuerte relámpago se filtró por los ventanales. Un gritó lo hizo saltar de su lugar y corrió siguiendo las réplicas de este, salió al patio trasero de la casa, algunas gotas de lluvia empezaron a caer, encendió la luz del lugar y miró en un pequeño jardín de flores blancas a un chico arrodillado llorando desgarrando sus cuerdas vocales.

SeokMin corrió hasta SoonYoung arrodillándose a su lado, el chico gritó ante la presencia y empezó a golpearlo y alejarlo.

–Soy SeokMin, mírame, escúchame soy yo, SeokMin.

SoonYoung dejó de golpearlo para quedarse un momento analizando al nuevo invitado y se lanzó a los brazos del de cabellos oscuros. SeokMin sintió un fuerte dolor en el pecho al sentir como temblaba, lo rodeo con sus brazos susurrando que todo estaba bien, pero cuando SoonYoung habló, las palabras de consuelo se esfumaron.

–Mami la golpeó, mami... mami la golpeó. Mi abuelita, ¡SeokMin mi abuelita! 



SamGus

Especial [SeokSoon]Where stories live. Discover now