Capitulo 5

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Mi campera- me corrí hacia la puerta y me asome por su pequeña ventana, pero esta demasiado oscuro para ver.
Mira el lado positivo, tenemos la cocina para nosotros solos- me cruze de brazos y lo mire.
Más vale que cocines bien- camine hacia la cocina y prendí la luz.
Okey, yo seré el chef y tú la comensal- levante una ceja, a veces podía ser un poco extraño.
¿Que cocinaras?- me senté en la mesada.
Sorpresa- se puso un delantal blanco y un gorro de chef- Primero tendré que buscar una buena receta- abrió un libro y se puso a ver.
Me levante de la mesa y me fui al baño al caminar podía sentir la cantidad de agua en mis pies, lo que era raro e incomodo. Abrí la puerta y la cerré, me saque las zapatillas y tire toda el agua para después estrujar mis medias.
¿Porque habré aceptado venir aquí?. Me saque la remera y la estruje. O mejor ¿Que diablos hacía con Noah acá? Sería mejor volver, cuando Lidia se entera me degollara. Podría ser que me estaba gustando la sensación de estar con el, aunque no estaba bien, nada bien las cosas que me hacía sentir a ratos. Los latidos acelerados y el cosquilleo eran solo pequeños síntomas que la enfermedad Centineo provocaba en mí y lo peor es que me gustaba sentirlos. Seguro era porque es la primera vez que los experimento, pero deseo que se vallan antes de que ocasionen más problemas.
Salí del baño y fui a la cocina, Noah estaba cortando cebolla y hechandola en una olla.
Pensé que te habías ido- dijo sin dejar de prestar atención a las cebollas- Aunque sería más pizza para mi- sonrió.
¿Harás pizza?- asintió- Que creativo chef Centineo...espero que valga la pena- me senté al lado de un gran ventanal que daba a la parte trasera del lago.
¿Porque eres tan callada?- seguí mirando la ventana.
¿Quieres decir aburrida?- dije.
Como tú digas...eres muy distante con las personas- No conteste, me quede pensado. Era verdad, no tenía mucho contacto emocional con los demás excepto con Mel y mi padre
No lo sé, me acostumbre- me abraze a mi campera que estaba algo mojada.
No te cansas de estar sola- porque diablos hace este tipo de preguntas.
Nunca se me pasó por la cabeza, pero creo que no- lo mire- Fue desde la muerte de mi madre que entendí que entre más personas dejes entrar a tu vida más daño te ocasionan- el saco la masa de la pizza y le empezó a agregar la salsa.
Mis padres se están por divorciar...fue por lo que mi hermano y yo luchamos siempre. Su matrimonio se fue convirtiendo en algo rutinal y ya no los veíamos felices a ninguno de los dos- puso la pizza en el horno.
Al menos tienes a los dos- me mordí la lengua.
Créeme que no suena tan bien...mi padre le es infiel a mi madre en más de una ocacion y lo peor es que yo soy cómplice y nunca le dije a ella- se acercó a donde yo estaba.
Todos los recuerdos que tengo de ella no son tan lindos- lo mire y el conecto sus ojos con los míos.
No eres tan fría como pareces Smith- me revolvió el pelo.
Y tú tan idiota como pareces- le di una pequeña patada con la pierna.
Ves que si puedes ser una chica normal- dijo.
Soy normal, que no me gusten las mismas cosas que las otras no significa que no lo sea- le conteste.
Si te gustan- levante una ceja- Solo que no te animas a probrar- tal vez tenía razón.
No lo creo- el se sentó al lado mío.
Solo tienes que confiar y ese es tu problema, como es que pásate de ser la chica déjame en paz, a la chica que se ríe todo el tiempo-lo mire.
Sigo siendo la misma, pero prefiero esto a llevarme mal- me puse seria- Volveré a la cabaña- me baje de la mesada.
¿No comerás?- negué y me dirigí a la ventana por donde habíamos entrado- Te hará mal no comer- puse una silla y me subí.
Hasta mañana Noah- deslize el cuerpo hacia el otro lado y caí al barro.
La lluvia era aún más intensa pero el viento había cesado, camine por todo el predio buscando mi campera pero no la encontré.
Me resigne cuando un rayo rompió a lo lejos en las montañas,me apresuré y camine hacia la cabaña, entre y cerré la puerta.
No necesitaba abrirme con nadie menos con el. ¿Porque y pare que lo haría? Sería algo estupido. El solo entabla conversaciones conmigo porque soy la única persona que literalmente tiene para hablar.
Alumbre con la luz de mi celular y me dirigí al baño al entrar me saque la ropa mojada y me di una rápida ducha. Salí envuelta en una toalla y me cambié poniéndome mi pillada, para después meterme a la cama.
La puerta se abrió dejando ver a Noah, estaba empapado. Cerro la puerta y se fue directo al baño sin decir nada.
No fue muy bueno lo que hice pero que esperaba. Hace menos de 10 horas que estoy empezando a tener una tipo de amistad con él y no le voy a contar mis más profundos secretos, ni siquiera se porque le conté tantas cosas sobre la situación de mi mamá. Yo no soy así y tampoco quiero serlo. No quiero que la gente encuentra nuevas maneras de lastimarme y no le quiero dar pena a nadie, menos a él.

Soñemos un poco  •Noah Centineo•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora