20: Se vale soñar.

369 41 3
                                    

Core.


<< —Jamás me sentí tan miserable en mi vida.

—Creo que exageras.

—Mi ex novio está saliendo con alguien más, ¿no crees que es suficiente para sentirme así?

Lisa me miró analizando qué decir para no herirme.

—Solo es una cita, Core. La chica le pidió salir y él por amabilidad aceptó.

—Claro... amabilidad.

Es horrible ver como todos han seguido adelante sin mí, aún más horrible es saber que la persona que me gusta está superando todo lo que pasó entre nosotros. >>


§


Algunas semanas pasaron, todo iba mejorando progresivamente tanto que ya me había hecho a la idea de ver a Natalie y Alex juntos. Todavía sentía un dolor en el estómago cada vez que se besaban o decían algo cursi pero de algún modo ya me había acostumbrado.

De hecho se veían bien juntos.

Gracias a Lisa me había enterado que las primeras dos semanas solo se estaban conociendo, pero hace apenas unos días eran novios oficialmente y dolía, pero ya no tanto como el primer día.

Incluso los primeros días que los vi juntos mantuve la esperanza de que dejarían de hablar y mágicamente estaría conmigo, pero no puedo ser tan egoísta.

No quiero, ellos merecen ser felices juntos.

Así como Luke y yo merecíamos ser felices separados.

Había hecho un progreso en todos estos meses sobre mi estabilidad emocional, no iba a dejar que eso se cayera por dos chicos.

Me había mantenido ocupada leyendo libros, saliendo a correr, cocinando cosas, incluso me había propuesto aprender a tocar la guitarra, en lo cual apestaba.

Sip, era una vida interesante.

—Y dime, ¿Cómo va tu día?—Alex me preguntó mientras cenábamos pizza juntos.

Habíamos intentado recuperar nuestra amistad y estaba funcionando, incluso era bastante normal a veces.

Veíamos películas, íbamos a ver a su abuela e íbamos a comer helado con papitas, claro cuando no salía con Natalie que era muy pocas veces la verdad. Me sentía un poco desplazada pero no se lo diré o lo haré sentir culpable, además es normal que le dedique más tiempo a su novia que a su amiga, tal vez yo sea la que necesite más amigos.

—Lo único interesante de mi día es que mi profesor de geometría renunció y ahora asignaron a otro de la escuela. ¿A quién se le ocurre renunciar a mitad del curso?

— ¿Quién es?

—Collins.

— ¿Sabes lo que dicen de él, verdad?

— ¿Qué?

—Oí que se acuesta con las alumnas—dijo agarrando otro trozo de pizza—, pero no soy fan de los rumores.

—Oh. Un pequeño detalle ¿No?

—Pero solo cuando ellas lo permiten. No te preocupes por ello, no es como un acosador o algo.

—Bueno. Una preocupación menos.

Nos quedamos en silencio varios minutos comiendo nuestras pizzas.

— ¿Alguna vez has pensado que sucederá después de terminar la escuela?—dijo él.

Yo oí que...Kde žijí příběhy. Začni objevovat