Reina a los 16

CAPITULO 30

        Te he extrañado

    ΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞ

        NARRA DIANNE

    ΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞΞ

Analicé mis posibilidades de escapar: Nulas.

Suspiré dejando la comida en el plato.

Me acerqué a la puerta de la celda.

- ¿Hay alguien ahí? - pregunté desesperada.

- ¿Qué quieres? - respondió una voz conocida.

- ¿Qui-quién eres? - pronuncié.

De repente el dueño de esa voz se dejó ver.

- ¿E-Eric? - dije entre asustada y sorprendida.

- Así es Dianne - me respondió tranquilo.

- ¿Qué haces aquí? ¿Acaso eres un guardia? - dije sin tartamudear.

- No exactamente - hizo una pausa - soy el hijo de Marcus.

Me quedé petrificada.

¿Él era aquel crio con el que jugaba en el bosque de pequeña?

- ¿Cómo....? - deje sin terminar la pregunta.

Eric abrió la celda y entró.

- ¿Qué crees que estas haciendo?

- Vengo a hacerte compañía y a recordar viejos tiempos - dijo cerrando la celda.

- ¿Por qué lo haces?

- ¿Por qué hago qué?

- Esto, me confundes.. - dije poniendo una mano a en mi frente.

- Te he extrañado - soltó.

- ¿A qué viene eso? ¿Me has extrañado? Vale, esto es raro - dije alejandome un poco de él.

Se acercó más a mí.

- ¿Qué haces Eric? - hice una pausa - me has capturado y ahora eres amable, no te entiendo - dije mientras buscaba un lugar para escapar.

Me acerqué a la puerta y la intenté abrir.

No se abría.

De repente sentí que unas manos rodeaban mi cintura. Alarmada me giré y empujé al maldito dueño de las manos.

- Eric, ya basta, deja ya de jugar.

Se volvió a acercar a mí y enrrolló sus brazos de nuevo en mi cintura.

- PARA - dije casi gritando.

Eric no se movió.

Lo empujé, pero, en vez de alejarse se pegó más a mí dejandome acorralada.

Empezaba a asustarme. A este paso me iba a violar.

Oí unos pasos que provenían de uno de los pasillos. Giré mi cabeza para poder ver entre las rendijas de la puerta, pero no vi nada, habían sido imaginaciones mías.

- Ayuda - dije revolviéndome entre los brazos de Eric.

Volví a oír los pasos cada vez más cerca.

Giré de nuevo la cabeza y esta vez vi a alguien, a un ¿VAMPIRO?

¿Qué hacía un vampiro aquí?

Fruncí el ceño.

De repente en un abrir y cerrar de ojos, sin saber como, me emcontraba a las afueras del palacio.

Miré a mi alrededor.

- ¡¿Shane?! - dije entre confundida y feliz.

Se acercó y me abrazó.

Le delvolví el abrazo.

- Estaba muy preocupado, ¿Estás bien? ¿Te han hecho algo? - dijo cogiendo mis brazos y examinandolos.

- Sí - dije apartando mis brazos. Miré a mi alrededor - ¿Estais todos aquí?

Me acerqué a William y lo abracé.

- ¿Y Cinthya? - le pregunté a su hermano.

- Se ha quedado con unas amigas. Por cierto, este es Evan, sin su ayuda no podrías haber escapado - dijo William mirando al supuesto Evan.

- Gracias Evan, viniste justo a tiempo, pensé que ese elfo me violaría.

- No ha sido nada, las gracias se las tienes que dar a tu soldado. Él es el que ha organizado esto para salvarte - dijo Evan.

Me acerqué a Shane.

- Gracias, pensé que moriría en esa celda - dije y después le di dos besos en las mejillas.

Hubo unos minutos de silencio hasta que Evan lo interrumpió.

- Debemos volver antes de que los elfos salgan a buscarnos.

Asentimos.

- ¿Cómo volveremos? No puedo volar, tengo un ala rota - dije haciendo una mueca de angustia.

En ese momento escuché unas herraduras golpeando contra el suelo.

Me giré bruscamente.

       ⇩⇩⇩⇩⇩⇩⇩⇩⇩⇩

Me he esforzado escribiendo este capítulo para compesaros que tardase más en subir el anterior. Es más o menos largo ¿No?

Bueno, besos, hasta el próximo capítulo ;)