Capítulo 8

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Pov Kim
—Oye Kim—Alzó la mirada en cuanto me llaman y veo a mi jefe delante de mí.

—Dime—Despegó mis manos del teclado prestándole toda la atención a él.

—Amm estaba pensando si—Coloco su mano en su nuca inseguro.

— ¿Sí? —Alargó con una sonrisa molestándolo un poco.

—Si querías ir a mi sección de fotos ahora mismo. —Inclina su cabeza hacia un lado mirándome con una ceja alzada mostrando un poco de ternura en sus ojos.

Me quede mirándolo par de minutos aun procesando sus palabras. Había entendido perfectamente que me había invitado a su sección de fotografías, pero nunca pensé que ibas ser tan pronto. Nunca había ido a uno de ellos en vivo y a todo color, solamente lo que se más o menos es a través de videos o la misma televisión. Por primera vez veré cómo es el proceso en cuanto, a la ropa, maquillaje hasta el resultado final y sólo saber que el modelo es mi jefe me para los pelos de punta.

— ¿Piensas venir o te quedas? —Pregunta cayendo en razón.

—Si. —Asiento levantándome de la silla, cogiendo mi cartera y colocando el teléfono adentro. Apago la computadora recogiendo un poco los alrededores. —Estoy lista. —Alzó de hombros mostrando una sonrisa.

(...)

—Aquí es donde hacen esto. —Miro a mi alrededor las luces blancas que iluminaban en una esquina de la habitación. Había estaciones donde uno podía maquillarse y al igual vestirse.

—Ujum—Responde entrando después de mí.

—Quería que vieras como era el procedimiento. —Se posa al lado mío mientras veíamos a la gente caminar de un lado a otro moviendo cosas, colocando más luces y decorando el pequeño cuadro donde se tomarán las próximas fotos. —Quien sabe a lo mejor te puede ayudar en el futuro. —Coloca su mano encima de mi hombro.

Lo miro viendo las facciones de su rostro. De la nada escuchamos que alguien lo llama posando las miradas adelante viendo a un señor con una cámara alrededor de su cuello.

— ¿Estás listo para la sección? —Pregunta poniéndose delante de él.

—Claro que si—Asiente. — ¿Que me colocaré esta vez? —Cuestiona mirando a sus lados.

—Ahí no sabría que decirte, tendrías que preguntarle a Yun. —Señala la una chica una poco más alta que yo, de pelo largo rubio, con un estilo de ropa muy combinada por así decirlo. —Bueno...—Mira su cámara por unos segundos y vuelve a mirar a Taeyong. —Te estaré esperando. —Le avisa yéndose.

— ¿Yun es tu estilista? —Pregunto mirándolo nuevamente y el asiente.

— ¿Quieres conocerla? —Alzó de hombro como respuesta. —Ven, ella es una chica muy pacífica y tranquila. —Me avisa mientras que caminábamos a esa dirección yo detrás de él.

—Tanto tiempo Lee—Habla la chica acomodando algunas cosas de maquillaje en la pequeña mesa sin darnos la mirada. —¿Cómo estás? —Pregunta dándonos la cara dejándose ver a una chica con una cara lisa de tan perfecta que estaba, su piel era un poco más oscura que la mía, sus labios eran pequeños y sus ojos un negro bien intenso.

—Estoy bien, —Responde—Te quiero presentar a la señorita Kim, mi secretaria. —Me empuja delicadamente hacia adelante.

—Hola—Me inclino un poco tímida y ella hace lo mismo.

—Con que eres la famosa Kim—Ríe un poco poniendo su mano sobre su boca.

— ¿Qué es lo que me tengo que poner? —Cuestiona Lee rápidamente.

—Ten—Coge la chica unas ropas y se las entrega en la mano. —Ve y vístete que ya me quiero ir a comer algo. —Lo empuja hacia un pequeño cuarto hecho con cortinas.

—No puedo creer que tenga delante de mí la secretaria de mi modelo. —Aplaude Yun acercándose a mí. —Toda la empresa anda hablando de usted.

—¿De mí? —Me señalo aturdida por sus palabras.

—Nunca habíamos visto a un jefe salir corriendo detrás de una chica y más su secretaria. Has roto los estereotipos de este joven. —Señala a su espalda en donde debería de estar Taeyong cambiándose de ropa.

— ¿Enserio? —Digo.

—Ujum—Asiente. — ¿No me digas que no te habías dado cuenta? —Niego. —Eres la primera mujer a la cual el sale corriendo y trae al set de fotografía Kim. —Dijo con un tono de voz emocionante.

Agarre mi bolso un poco más fuerte al escuchar sus palabras. Un chico como Lee Taeyong debería de haber tenido tantas chicas en su vida que las pudo haber traído aquí o tratado de la misma forma que a mí. Un cosquilleo pesado empieza a correr por todo mi estómago, dándome una estúpida sensación a la cual no había sentido desde hace años atrás. Mi corazón estaba latiendo un poco más rápido que de lo común y un pequeño calentón subió a mis mejillas.

—No puede ser—Susurra acercando su cara a la mía con una amplia sonrisa.

—Ya estoy listo—Sale Lee acomodándose el gabán que tenía puesto ahora.

Mi vista comenzó a recorrer el vestuario que la peli rubia le había entregado, era un vestido sencillo y cómodo. Unos zapatos con diseños parecidos a la piel de cocodrilo, unos pantalones slim negros, su correa era una especie de vendajes alrededor de su cadera y abdomen del mismo color, pero con diferentes tipos de texturas, su gabán era como dos tallas más grandes que él de color negro y su camisa, no se podían notar desde mi distancia.

—Cuantas veces te he dicho que no tengas miedo a enseñar tu cuerpo Lee. —Gruñe Yun su nombre acomodándole el gabán dejando verse su pecho entero. Rápidamente aparte mi vista mirando hacia abajo. —Ven conmigo. —Coge mi brazo y caminamos al set donde ahora había cambiado las luces por unos amarillos y rojos.

Las fotografías habían empezado comenzando con poses comunes hasta que fueron cambiando los ángulos de la cámara, luz y decoración del lugar. Veía la clara concentración que Lee le estaba dando a su trabajo. Yun debes en vez venía aplicándole cada vez maquillaje dependiendo de la claridad de la luz o placer del fotógrafo. No cabía duda de que este tema de la fotografía y diseñadora cada vez me llamaba más la atención.

—Ya es suficiente por hoy. —Avisa el fotógrafo mirando la foto que había tomado. —Buen trabajo como siempre Lee. —Le extiende el brazo a lo que Lee se lo corresponde.

—Ya tú sabes. —Lo acerca a él dándole palmadas en la espalda.

Miraba como ellos dos conversaban tranquilos mirando los resultados de algunas imágenes. Mi vista se concentró tanto en el cuerpo de Taeyong tanto así que mi audición dejó de funcionar y solamente era su presencia. Su vista cambio hacia mí, rápidamente aparte la mirada cayendo en cuenta de lo que acabo de hacer. Mis mejillas no dudaron en ponerse en un vergonzoso rojo carmesí por lo ocurrido, solo quería que la tierra me tragara de una vez.

— ¿Todo bien? —Se acerca Taeyong hacia mí con las manos en los bolsillos delanteros. Paso mi mano sobre mi mejilla hasta colocarla en mi cuello asintiendo sin mirarlo a los ojos. — ¿Te gusto esto o te pareció aburrido? —Vuelve a preguntar bajando su mirada inclinándolo hacia un lado.

—Sí, si me gusto. —Le digo mirándolo a los ojos. Una sonrisa sin mostrar sus dientes aparece en su rostro y coloca su mano encima de mis hombros.

—Ya es hora de comer ¿Qué quieres? —Pregunta y no conteste. —Anda yo invito. —Aprieta más el agarre moviéndome de un lado a otro leve.

—Una comida rápida no estaría nada mal. —Le respondo mirando hacia adelante apartando mi mirada de la suya.

—Me alegra que te haya gustado la sesión de fotografías. —Coge su ropa enganchada bien bonita sin arrugarse y se va al pequeño cuarto.

—Sí, me gusto—Susurro juntando mis manos mientras miraba al suelo.

Boss-Taeyong y tú-(Fanfic)On viuen les histories. Descobreix ara