«Capitulo 2»
Sentía que me veía realmente horrible con el vestido, prácticamente a como estoy vestida a como están todos en una escala del 1 al 10 yo soy el 0, todas las mujeres que miro traen joyas mas pesadas que si mismas. Visualizó a una pareja que se besan cómodamente y sin timidez enfrente de juntos, puedo mirar que están prometidos ya que trae un anillo que parece de matrimonio.
Se miran demasiados jóvenes para casarse, pero tal y cuál son sus decisiones y su vida y no me incumbe.
¿Alguna vez me voy a enamorar? Que se sentirá, Kileyen dice que se siente magnífico, pero ella es muy enamoradiza, la ultima vez el estúpido de Jains la destrozó, me aprieto mi mano, me da coraje.
Trato de visualizar a mis padres y logro captarles hablando con sus amigos, no creo que noten que vaya afuera por un momento. Camino tratando no caerme o chocar con alguien lo ultimo que deseo es eso.
Una vez afuera me siento relajada, me sentía asfixiada adentro, todos con pareja excepto yo, algún día me va a llegar ese chico y me voy a entregar completa y seré capaz de matar o vivir en peligro solo por él, estoy cansada de ser la niña buena, quiero experimentar cosas nuevas y si el peligro es una de esas cosas lo haré.
Aunque dudo que alguien se enamore de mí ¿Quién se fijaría en mí? No soy la clase de chica que todos los hombres buscan, nadie se a enamorado de mí y no creo que alguien lo haga, viene afuera a relajarme y lo único que estoy haciendo es que me ponga mas nerviosa. Subo mi mirada hacía el cielo y noto que esta por llover, no logro mirar la luna gracias a que las nubes la tapan, escucho un trueno y me estremezco, algo que odio son los truenos definitivamente.
Escucho un ruido y siento como si alguien me viera, como si me vigilarán, me sentía en película que el enemigo me atrapaba y mi galán me rescatara, y como es de esperar yo no tengo galán. El ruido se vuelve a repetir como si corrieran de un lado a otro, demonios, deben de ser alucinaciones mías.
Giro mi tobillos y doy media vuelta, acomodandome derecha y obligó a mis píes ir hacia la entrada pero al parecer estos no responden, intento otra vez y logro por fin caminar. Una vez antes de agarrar la manija una voz gruesa y con tono peligroso me habla, mandando una señal a mi cerebro, quedando en shock.
-No tan rápido gatita-menciona esa voz desconocida.
¡Diablos! Lo que me faltaba un ladrón, tienes un día con mucha suerte este día Marcie. Probablemente me mate y le de mis restos a mis padres, o me viole primero,cielos, necesito relajarme. Suspiró, todo va a estar bien, esto es un sueño.
-¿Gatita?-vuelve a mencionar.
-No soy...tu....gatita-mi voz se quiebra.
-Lastima por que para mi ya lo eres, gatita-dice con tono burlón.
Respira, todo va estar bien, pronto estaré con mis padres y no lo volveré a ver. Tienes que ser valiente, el solo quiere captar mi miedo y poder hacerme daño, suspiro, tengo que ser fuerte y valiente, tu puedes.
-¿Quién eres?-mi voz vuelve y suena decidida.
-Alguien, gatita, soy como tu pesadilla-vuelve a mencionar, pero esta vez con tono burlón.
-¿Pesadilla?-logro decir.
-Una vez dentro de tu vida me vas a desear afuera, pero adivina que, jamas lo seré.-su voz suena normal.
-¿Qué quieres de mi?-escupo.
-Mucho.
Me volteó, intentando ver a ese chico con voz peligrosa, rezo en mi mente en que no me haga daño. Noto su sombra, mas no logro verlo con claridad.
-¿Cómo te llamas?-trato de ser amable.
-¿Realmente te interesa mi nombre?-su voz burlona me esta empezando a caer mal.
-Yo soy Marcie Anne Bleens ¿Y tu eres?-vuelvo a repetir.
-Austin Mahone-logra decirme.
-Austin ¿Me vas a hacer daño?-mi voz es pausada.
-No.
De un momento a otro la sombra se acerca velozmente hacía mi y me agarra de la cintura, logro verle unos ojos hermosos, color avellana, me aprieta con fuerza y yo me quejo.
-Me duele.
-¿Crees que me importa?
-No se-menciono con voz temblorosa.
Ahora si estoy sola y sin fuerzas
-¿Te puedo decir algo?-dice Austin.
-Dime-logro apenas decir.
-Eres mía cariño, para siempre y yo soy tuyo.
-¿Para siempre? -«Siempre»
