this lonely world [perrentes]

003

Mike y Tony se dirigían la palabra más seguido, aunque la mayoría de las veces sólo era Mike contando su vida y Tony escuchando con atención. Le parecía muy curioso todo lo que Mike tenía para decir, como si hubiera vivido tanto que podría contar una historia diferente todos los días, le gustaba escucharlo, lo ayudaba a sentirse menos solitario. Por su lado Mike había dejado de hacerle muchas preguntas a Tony, creyó que si dejaba de insistir tanto repentinamente Tony lograría confiar en él a su tiempo.

—... Entonces me las arregle para que no le avisaran a mis padres haciendo trabajo en la biblioteca por dos semanas —. Terminaba de contar Mike

—¿Eso fue todo?

—Dios, Tony ¿de qué lado estás? Fue demasiado, realmente el alcohol ni siquiera le entró a los ojos, sólo hizo drama. Fue un castigo realmente injusto

—Mis padres hubieran pedido que te expulsaran

—Parecen buena gente, ¿No tienes hermanos o algo?

—Una hermana

—¿Por qué no vino a la ceremonia? Parecía que todos estaban muy felices de estar aquí —. Mike dio una pausa esperando una respuesta que no llegó —Bueno, todos menos tú, que realmente parece que no eres ni un poco feliz nunca

Mike solía burlarse de lo poco que Tony hablaba, no lo hacía de mala manera, sólo le gustaba molestarlo y ver lo rojo que se ponía cuando hablaba de él.

—Podrías hablarle a mis demás amigos, son buenas personas

—Yo no... —. Guardó silencio como arrepintiéndose de lo que estaba por decir —Yo no se

—Se que odias hablar con gente nueva y eres muy rico para hablarnos a nosotros los pobres, pero sería divertido que no te fueras cada que alguna otra persona se me acerca

—Si, lo intentaré

—Lo digo en serio, les he hablado a todos de ti y creo que les agradas, supongo que todos tenemos la necesidad de contarle nuestros problemas a alguien a quien realmente no le interesan pero aun así te escucha

—Me interesa lo que me cuentas

—Lo que yo cuento claro que es interesante, pero ellos suelen no tener nada mejor que contar que sobre la persona con la que pasaron teniendo relaciones todo el verano

El timbre sonó, Mike llevaba todo el día desde que terminaron las clases en el dormitorio contándole cosas a Tony y estaba seguro que sus amigos estarían molestos. El timbre indicaba que era momento de ir a las regaderas, Tony como siempre se bañaba en las mañanas se quedó ahí y Mike salió.

—¿Dónde has estado? Estuve muy cerca de llamar a la policía para reportar tu desaparición —. Le gritó Jaime

—Estaba en el dormitorio, con Tony

—Me prometiste que jugaríamos ajedrez hoy, ¿qué pasó con eso?

—Lo olvidé completamente, lo siento mucho, prometo que mañana

—Yo ya no creo en tu palabra

—Te estoy diciendo que lo siento, por fin conseguí mantener una platica con Tony, tenía que aprovecharlo ¿no?

Caminaron hasta las regaderas, todas separadas y con puertas, lo cual era bastante bueno, suponían que no les podían ofrecer menos por la cantidad de dinero que pagaban por estar ahí.

Mike no tardó mucho en salir con la toalla enredada en la cintura, se dio cuenta tarde que había olvidado totalmente llevar su cambio de ropa, lo tenía que haber dejado sobre su cama. No encontraba un modo de salir con la toalla en la cintura y escurriendo hasta su dormitorio para poder cambiarse, no sabía que hacer así que pensó en esperar a secarse y poder salir corriendo rezando para que ningún profesor o nadie del personal lo viera.

Se sentó a esperar mientras hablaba con la gente. Fue sorpresa para todos cuando Tony abrió la puerta y entró. Mike caminó hacia él no entendiendo que era lo que había ido a hacer, pensaba que Tony simplemente odiaba entrar a lugares con mucha gente.

Tony no podía dejar de mirarlo, estaba asustado por como todos lo habían mirado, no sabía si había hecho bien en ir y Mike tenía un abdomen demasiado marcado, algo con lo que Tony simplemente soñaba con tener. Tener de cualquier modo que se entienda.

—Vi que olvidaste esto y supuse que no podrías salir de aquí sin esto así que... —. Dijo Tony muy rápido —Bueno, te lo traje

—Gracias

Mike estaba esperando que Tony le diera la ropa pero su amigo parecía como petrificado, Mike se estiró un poco para tomarla de las manos de Tony.

—De nada

Tony salió corriendo de los baños, no lograba comprender en qué estaba pensando cuando decidió ir para allá, era tan sensible que ahora tenía unas ganas horribles de llorar. No era nada normal lo que hizo, no consideraba a Mike su amigo pero era lo más acercado que tenía y ahora estaba seguro que él estaría enojado y todos lo mirarían horrible al siguiente día.

Mike se quedó ahí con las miradas de todos sobre él, él sólo sonrió y comenzó a vestirse. A todos les parecía extraño que un compañero simplemente hubiese decidido llevarle su ropa hasta allá y más tratándose de Tony quien no hablaba con nadie más que con Mike y los profesores. Cuando terminó simplemente salió hacia su dormitorio para agradecer a Tony por el buen gesto aunque lo encontró echo bola en su cama.

—Oye, ¿te encuentras bien? —. Preguntó

Tony se sentó en su cama temblando, tenía miedo por la reacción de Mike o que fuera lo que iba a decir.

—Lo siento... Yo sólo quería ayudar

—¿Sentirlo por qué? Sin ti seguiría ahí esperando poder venir corriendo hasta acá con la toalla en la cintura, eso hubiera sido vergonzoso

Tony se quedó callado mirando a Mike quien estaba sentado en su cama justo en frente de él.

—Aunque debo de aceptar que fue extraño que aparecieras ahí, nadie te esperaba, lamento haberte metido en una situación tan incómoda —. Mike de nuevo espero una respuesta que no parecía que fuera a llegar —Creo que es hora de dormir, a menos que quieras salir por la ventana al lago que está por aquí

—¿Hay un lago?

—Si, lo descubrí hace varios años, nadie ha ido ahí además de mi, pero tal vez si quieres ir algún día, obviamente hoy no, sería bueno

—Lo pensaré

—Bien, buenas noches Tony

Mike creía que si le decía algo realmente privado a Tony se podría ganar un poco de confianza, pero no recibió una vez más una respuesta larga o interesante, llegar a ser amigo de Tony era algo complicado.

Por su lado Tony sonreía tontamente una vez acostado y con la luz apagada, nunca nadie le había confiado algo personal y apreciaba a Mike por confiar en él.