capitulo 4: Descubrimientos raro

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Coraline y wybie se miraron, la confundidos estaba a flor de piel por lo que habían leído, era una historia interesante pero con un final decepcionante, ¿como se suponía que contactarían con el hijo si ella se lo había comido?, el gato subió a la mesa de un salto y con sus patas cerro la computadora, observo a los dos chicos y negó con la cabeza

-¿es mentira la historia?- pregunto wybie seriamente

El gato asintió y luego negó dándoles a entender que una parte era cierta y otra obviamente no lo era, el gato bajo de la mesa y con un paso decidido salió de la casa, junto con los dos niños, wybie caminaba a solo tres pasos del gato y justo a un lado del gato caminaba Coraline, en el trayecto habían pasado por la chancha de ping pong y por el pozo también, entraron a una especie de bosque espeso, levantaron la mirada y a lo lejos observaron una casa abandonada casi en ruinas, que si no hubiera sido por el gato jamás la hubieran encontrado, estaba escondida en lo que parecía un laberinto de la naturaleza...una casa de color rosa (aunque ahora completamente opaco), entraron a la casa de dos pisos y tuvieron una extraña sensacion

-es parecida al palacio solo que más pequeña- dijo Coraline

El gato asintió, los tres entraron a la casa y caminaron por lo que en sus tiempos pudo haber sido la sala, detrás de una muy destruida escalera había una puerta de color gris bastante vieja pero parecía ser muy resistente, incluso la cerradura no parecía estar oxidada, coraline dedujo que esa puerta llevaba al sótano, el gato levanto su pata izquierda y señalo la puerta, Coraline rápidamente intento abrir la puerta pero esta se encontraba cerrada

-tiene seguro- se escuchó una voz 

Coraline y wybie giraron rápidamente la cabeza para ubicar de donde provenía esa voz y su sorpresa fue encontrar a una niña de cabellos negros y ojos grises justo en la entrada de la caza sostenía tres muñecos los cuales abrazaba con fuerza, uno era con al forma de Coraline, otra con la forma de wybie y el tercero pero no menos importante tenía la figura de un niño de ojos azules

-solo hay una llave...y ella no descansara hasta encontrarla a fin de cuentas, ella solo quiere algo que amar...o algo de comer- dijo la chica de al parecer unos 12 años

-¿quién eres?- pregunto wybie

-yo sé quién soy-contesto la niña con desinteresadamente - pero no sé quién eres tu... ¿Quién eres?

Coraline y wybie se miraron confundidos, ¿quien era esa chica extraña?,  ¿porque hacia esa clase de preguntas?... no sabían que contestar, cuando Coraline se dio cuenta el gato estaba siendo levantado por la misteriosa chica la cual le sonreía como si lo conociera desde hace muchos años

-nuestra madre solía vivir aquí- dijo sin despegar la vista del gato- pero ella cambio desde que la bruja llego a la casa, mi hermano no me creía, pero solo era porque el no la veía,  mi madre decía que ella era buena una buena mujer...una mujer  que quería tener hijos, pero cuando la la bruja  se fue, mamá cambio, dejo de ser la madre dulce y amorosa que conocíamos para convertirse en algo raro

La vista de la chica se posó en Coraline, una sonrisa triste apareció en sus labios, parecía mirarla pero al mismo tiempo parecía no verla, una mirada vacía como si realmente le estuviera hablando a la nada, como si estuviera en algún tipo de trance 

-ella ya no era nuestra madre, nos encerró en el sótano diciendo: ''se quedaran aquí hasta que aprendan a ser buenos hijos''.  había algo raro eso lo notamos, cuando menos lo pensamos nuestra madre ya no estaba, la bruja nos espiaba...un día pareció recobrar el sentido y nos mudamos de casa justo a varios kilómetros, una enorme casa parecida a un palacio...un palacio de color rosa pastel...parecía que todo había vuelto a la normalidad, pero no era así, la casa era extraña había cosas extrañas que solo los niños podía ver o sentir...había muchas habitaciones pero en la sala, escondida detrás de un mueble gigante y pesado había una pequeña puerta ...mamá nos dejó encontrarla y sabiendo que un niño tendría curiosidad por esa puerta nos dejó entrar...la abrió para nosotros...gateamos hasta estar del otro lado, mas no había nada, solo un enorme cuarto vacío...escuchamos algo cerrarse...ella nos había encerrado 

-¿tu eres la hija de la otra madre?- se atrevió a preguntar Coraline

La niña miro a wybie y luego a ella nuevamente, bajo al gato y camino con paso lento pero seguro hasta Coraline, le entrego la muñeca que tenía su figura e hizo lo mismo con wybie, solo se quedó con la figura del gato la cual abrazo a su pecho

-mi hermano es el que le puede terminar de contar la historia, solo él sabe que fue lo que paso, por algún motivo yo no lo recuerdo mas, pero el sí, podrán hablar con el cuándo estén en el mundo de nuestra madre, solo asegúrense de hacer las preguntas correctas- la chica retrocedió y camino hacia la salida de la casa perdiéndose entre los arbustos.

-es extraño -dijo wybie- esa chica es muy extraña...aunque cabe la posibilidad de que tal vez es la reencarnación de esa niña, la hija de la otra madre

-sí, tal vez, aunque había algo raro, como si ella nos estuviera ocultando algo- dijo coraline llevando su mano hasta su barbilla- algo no cuadra en las historias

Coraline miro hacia donde se encontraba el gato el cual aún veía el sendero por donde la niña se había ido, no parecía escuchar nada ni sentir nada, hasta que de la nada miro a Coraline y asintió con la cabeza

-Regresemos a casa se esta haciendo tarde- dijo wybie

El gato al igual que Coraline concordaron con su amigo, salieron de la casa y cruzaron el   laberinto de arboles, alejándose lo más posible de esa espeluznante construcción, aunque Coraline no estaba completamente segura, pero desde que llegaron sintió una extraña presencia, mas no dijo palabra alguna, no quería asustar a su amigos, no hasta tener pruebas de lo que sea que estuvieran ocultando

coraline 2: el misterio de la otra madreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora