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Zoe

La alarma sonó y puse mi mano sobre mi radio despertador y lo apagué. Era hora de levantar mi trasero de la cómoda cama para empezar mis funciones en la casa. Me levanté, pero sentía un leve dolor de cabeza. Pero nada grave, tomé una toalla y me fui a la ducha a bañarme.

El verano comenzó y eso quiere decir que mis peores pesadillas se harán realidad por un mes completo. Y hablo de Styles, que ya las clases en la universidad dieron un receso por el verano., espero que este verano no vaya a pasarlo todo el tiempo en la casa sólo para mortificarme, aunque a veces me mira de otra forma, una sin odio y sin su sonrisa burlona que siempre carga cuando me ve. Pero sólo aparece Jake, su mejor amigo y se vuelve lo mismo. Jake es diferente a él, y conmigo se porta muy lindo y no aprueba las cosas que Harry me dice o hace. Jake y yo somos amigos, pero a Harry no le agrada que le quite a su amigo, porque hay veces que Harry y su séquito quieren salir y Jake prefiere acompañarme y solemos jugar juegos de mesa o ver alguna película de terror y comer palomitas. Harry me dice que deje de enredarme con su mejor amigo o no responde. Pero nunca hace nada...

Me cambié con un short negro de tela dos dedos más abajo de mis muslos, una blusa gris con caida en el hombro con el logo de Nirvana enfrente. Me puse mis converse negras y me até mi largo cabello rubio en una cola de cabello, y me dejé mi fleco en mi frente. Y ya estaba perfecta.  Lo bueno era que la señora Anne me miraba con buenos ojos y no dejaba que yo usara un uniforme,  y siempre me ha ayudado en todo y eso hace ver que es una persona maravillosa y bondadosa. Como me hubiese gustado tener una mamá como ella, pero algunos no tenemos tanta suerte como otros.

Nunca entendí porque Harry me decía fea, sino lo soy, tengo ojos azules, mi cabello es rubio ondulado, mi cara es perfilada pero de forma redonda, y apostaba y ganaba que yo tenía mejor cuerpo que su operada noviecita, todo en mí era natural. No tenía ni mis pechos ni mi trasero operados y eran del tamaño que a los hombres les encanta. Bueno, no a todos, Harry me detesta y no sé porqué...

Ni me puse maquillaje, yo no lo necesito. Mi belleza es natural y no exagerada como otras que conozco.

Al salir de mi habitación choqué con alguien y cai sentada de pompis sobre las baldosas. Miré con quien tropecé y me fijé que era Harry que me miraba de manera desaprobatoria y con las manos en la cintura. Estaba sin camiseta y sólo con un pantalón negro de franela, mostrando ese abdomen de lavadero y los tatuajes que le sentaban muy bien. Harry sin duda sería el sueño ideal de cualquier mujer al tener a un hombre como él a su lado.

-. ¿Qué tanto me ves, sirvienta? Levántate y ve a hacer tu trabajo y deja de violarme en tus asquerosos pensamientos.. - dijo con la mandíbula apretada y sin la ayuda de él me puse de pie para luego sacudir con mis manos mi trasero y Harry se me quedo viendo de arriba abajo con una mirada diferente y sonrió de lado..
-. Si quieres te ayudo a sacudirte el polvo. Mis manos son más grandes y pueden abarcar tremendo culo. - dijo sonriendo para luego morder su labio inferior y yo me sonroje pero negué con la cabeza.

-. No se preocupe, joven. Yo puedo sola. - contesté sonrojada y él rió negando con la cabeza.

- . Ya lárgate y ve a hacer tus quehaceres. Que bueno que no puse mis manos en tu asqueroso trasero. Me das asco, puta.. - dijo con sorna y me ahogué las ganas de llorar frente a él. Y bajé la mirada al piso y me di la vuelta para ya salir de su presencia. Luego sólo sentí su mano que me halaba del cabello fuertemente y me tiraba al piso y caí de nuevo golpeándome el trasero con fuerza y escuché la risita burlona y yo me sentí mal por seguir soportando las humillaciones de Harry, quería llorar pero no iba a hacerlo, no al menos enfrente de Harry..

-. Eso es, para que no me vuelvas a ignorar, estúpida zorra y respondas a cada palabra que te ordene diciendo "si, mi supremo majestad y hermoso amo" ¿entendido?. - preguntó acuclillándose a mi posición tomándome fuertemente de las mejilla haciendo que lo vea a los ojos mientras aguantaba las lágrimas. -. No te escucho, perra. Ladra. - dijo ronco apretando más mis mejillas y me quejé del dolor pero aun asi no me soltaba..

Sweet Creature: H.SDonde viven las historias. Descúbrelo ahora