La chica de Slytherin

Temporada 3 "Capitulo 6"

Mire a Harry tomar la poción, aún me sentía disgustada con él pero entendia el porque lo hizo. Suspire cuando termino de tomar la poción.

-¿Y bien? ¿Cómo te sientes?- Le preguntó Hermione.

-Excelente- Se levantó del sofá.- En serio excelente- Sonreía a más no poder.-

-No lo olvides, Slughorn suele cenar temprano, sale a caminar y luego regresa a su oficina- Harry escuchaba atentamente a Hermione-.

-Sí... Iré a ver a Hagrid- Fruncí el ceño-.

-¿De qué hablas?- Le pregunté.

-Harry tienes que hablar con Slughorn- Le regañó Hermione.- Tenemos un plan-.

-Lo sé pero tengo un presentimiento sobre Hagrid, siento como si deberia estar con él esta noche ¿comprenden?- Alcé la ceja.

-No- Respondimos los 3 al mismo tiempo-.

-Créanme, sé lo que hago o la poción lo sabe- Dijo para después irse-.

Miramos como se marchaba y me froté la cara cansada.

-Iré a mi habitación, estoy muy cansada y no he dormido casi nada- Hermione y Ron asintieron-.

Comencé a caminar a la sala común de mi casa cuando choqué con una persona, voltee los ojos al ver quien era.

-No tengo intenciones de hablar contigo- Dije y antes de irme tomo mi brazo.- ¡Zabini!- Me quejé.-

-Hablaste con Draco- Rodee los ojos.- Responde-.

Suspiré cansada, yo solo queria dormir un rato, le mire; sus ojos cafés marrones me miraban exigentes.

-Sí, sí hable con Draco, ahora si me disculpas- Me zafé de su agarre-.

Bufé cansada de que me mangoneen como se les pegue la gana, y pensar que yo era una de las más temidas anteriormente, ¡bah! que tontería.

***

Desperté por las lamidas de mi gata, arrugué la nariz.

-¡Oh vamos!- La tome y la levanté de mi estómago.-

Ella se indignó y se lamió donde la había agarrado, voltee los ojos. Miré al suelo y agarré a mi serpiente que se deslizaba hábilmente en el suelo.

-Sé que los he dejado a un lado- Hablé en parsel.- Lo lamento mucho- Dije acariciándolo-.

Había crecido mucho desde que llegué, hasta yo misma me sorprendía de lo enorme que había quedado.

Me duché y vestí para salir a mi sala común, mire a los de mi casa; unos tenían caras de agotamiento, otros se veían orgullosos de permanecer aquí, entre otros que no vale la pena contar. Suspire cansada, definitivamente prefería a Gryffindor si hablábamos de estudiantes.

Camine con la cabeza en alto y antes de salir escuché a alguien decir "La traidora se va" paré de caminar y me gire lentamente con una sonrisa sabiendo quien lo había dicho.

-¿Quieres decirme algo Parkinson?- Ella se irguió y me miró.

Titubeo antes de hablar.

-Estamos al tanto de tu amistad con los Gryffindor- Alcé una ceja y me reí-.

-Pensé que eso era muy claro desde hace tiempo- Sonreí-.

-No podemos creer lo bajo que haz caido, si tu padre te viera ahora- Bufé, entrecerrar los ojos y le di una sonrisa torcida-.

Me acerqué a ella dejando escarcha por donde pisaba (esto gracias al collar) y la mire, yo era más alta por lo cual ella tuvo que alzar su rostro.

-Mira Parkinson, no he tenido ganas de lastimar a nadie desde hace tiempo- Hice una sonrisa de lado.- Pero no olvido de donde vengo ni quien fui, esa chica puede volver siempre que yo quiera-Agarré su rostro con mis dedos y estos ejercían una fuerte heladez a lo cual ella hizo una mueca.- No hagas que esa chica vuelva, no querrás saber lo que sucederá- Quite mis dedos dejando una marca de hielo en donde le había agarrado-.

Me alejé de ella y me di la vuelta para salir pero antes pronuncie unas palabras.

-No vuelvan a olvidar quien soy y de quien soy hija, puede que sea más amable ahora... pero eso no quiere decir que lo sea con ustedes-.

***

Corrí prácticamente a donde estaba mi padrino, él miraba la ventana como sabiendo que algo pasaría.

-Es hora ¿verdad?- Susurré lo suficientemente alto para que él lo escuché.

Se dio la vuelta con lentitud y caminó despacio hacia mi.

-Sabes lo que tienes que hacer- Mis ojos empezaron a picar por las lágrimas-.

-Es increíble lo que tendrá que pasar- Negué.- Solo un maldito año tranquilo es lo que pido-.

Él me acarició la mejilla y me miró con ternura.

-Te he amado como la hija que nunca pude tener, eres mi orgullo nunca olvides eso Elizabeth- Asentí levemente-.

Sin poder evitarlo abracé a mi padrino, él me había cuidado desde hace mucho tiempo, siempre velo por mi seguridad y fue el padre que nunca pude tener, derramé unas lágrimas sabiendo que lo peor pasaría dentro de poco y yo no podía hacer nada para evitarlo.

Toque la puerta esperando a que Dumbledore me dijera que pasara, escuché un débil "Adelante" por lo que abrí la puerta para cerrarla.

-¿Me mandó a llamar profesor?- Él me miró, se le veía cansado.

-Es lo suficiente lista como para deducir lo que le dire- Bajé la cabeza.

Me acerqué a Dumbledore y con la boca seca pronuncie unas palabras.

-Se refiere a Draco ¿no?- Las comisuras de sus labios se elevaron dándome una sonrisa.

-Así es señorita Riddle- Hice una mueca al escuchar mi apellido.- Los dos sabemos que su padre le dio una misión al señor Malfoy- Hizo una pausa antes de continuar.- Pero en caso de fallar el que deberá completarla será el profesor Snape- Mis manos temblaban.-

-¿A qué misión se refiere?- Sabía la respuesta, por supuesto que lo sabía.

-Su padre, señorita Elizabeth- Paro unos segundos y se fijó en mi expresión.- Le pidió al señor Malfoy que me asesine- Puse las manos en mi cara-.

Traté de reprimir mis sollozos pero fue en vano, las lagrimas salian sin dudar y miré a Dumbledore, sin saber como le abracé sabiendo que él no se opondría a que le asesinen y a pesar de todo le había tomado cariño, me separé de él y me limpie las lagrimas con fuerza.

-No todo es tristeza Elizabeth- Alcé mi cara- Debes ayudar a Harry para que consiga los horrocruxes- Hice una mueca.- Sé que serás capaz de ayudarle, solo confia en ti- Asentí varias veces.

-Le voy a extrañar mucho profesor- Mi corazón se había partido en dos-.

Sentí una molestia en mi garganta al intentar comprimir mis sollozos, era inevitable lo que sucedería y me carcomía por dentro saberlo.

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El siguiente capitulo sera el último, hasta yo me sorprendí.