━Capítulo diez

Start from the beginning
                                    

Los recuerdos eran oscuros, fríos y terroríficos, justo como esa noche en la que ambos habían sido separados.

—Y esto... —Nolan le mostro otra parte de su cuerpo a Zoe—. En cada laceración, cada parte mutilada... ellos simplemente la sustituyeron... como si solo fuera una máquina.

Zoe comenzó a bajar lentamente su arma, mientras sostenía su respiración y buscaba las palabras adecuadas para darle consuelo a Nolan.

—Me termine convirtiendo en lo que tú siempre rechazaste, pero no de manera metafórica... yo si termine siendo su robot —el brazo metálico de Nolan se movió, mientas el formaba una sonrisa—. Imagínate, despertar y ver que ya no eres un humano completamente. Te buscas, intentando aferrarte a lo que alguna vez fuiste, pero no encuentras nada.

—Nolan, los dos pasamos por un proceso difícil —intento explicarle Zoe, manteniendo la calma—. Regresar de la muerte no es fácil...

—¿Y tú qué sabes de eso? —interrumpió Nolan a Zoe, mientras recargaba una de las armas que tenía, logrando que Zoe hiciera lo mismo—. ¡Solo quería paz, no terminar siendo tu maldito sustituto!

—¿Qué?

Nolan se quedó en silencio por unos cuantos segundos, mientras comenzaba a reclamarse a sí mismo y hablar hacia sus alrededores.

Estas acciones provocaron que Zoe se asustara, ella realmente quería encontrarse con el Nolan que conoció en el área, pero no lo encontraba por ningún lado.

El Nolan que estaba mirando había consumido a su mejor amigo.

—¿Crees que me revivieron solo porque me querían mucho? —pregunto en un susurro—. Ni mis padres o la doctora lo hubieran permitido a menos que tuvieran una razón... y esa razón eres tu...

Zoe retrocedió nuevamente, antes de desviar su mirada con lentitud hacia la computadora que estaba detrás de Nolan. Solo tenía que destruirla y después podría intentar por lo menos hablar con aquel joven que estaba frente a ella.

—Necesitamos a la A8, tenemos que recuperarla, ella es la candidata más potencial, bla, bla, bla... siempre fue así, de los dos siempre tú fuiste la mejor...

Nolan tenía tantas cosas por decirle a Zoe, tantas cosas por expresar y liberar de su mente y alma, pero no conseguía hacerlo con claridad.

La ira que había estado acumulando, y todo por lo que había pasado desde que era un niño, habían conseguido cegarlo e impedirle pensar con claridad.

—Nolan no sé de qué estás hablando...

—¡No mientas! —le grito el joven—. ¡Siempre fui la segunda opción en todo! Tu... tú me quitabas todo... desde que éramos niños, te ganaste tu lugar como sujeto potencial y después lo rechazabas... ¡Tú eres la culpable de que todo se esté viniendo abajo!

—Nolan, por favor, tienes que escucharme...

—¡No, no! ¡Basta! —el joven se sujetó su cabeza, mientras dejaba caer el arma que llevaba entre sus manos—. ¡Déjenme en paz! ¡Cállate, cállate... no lo hare!

Zoe observo a Nolan, notando la desesperación en su mirada, como si de un momento a otro se hubiera transformado en una persona completamente diferente.

La joven aprovecho ese momento de locura de Nolan para poder acercarse a la computadora, intentando no llamar la atención del castaño. Era muy difícil, el ver como su mejor amigo se golpeaba a si mismo mientras se negaba a hacer algo que le solicitaban.

Zoe no pudo evitar pensar en cómo ella también había luchado contra las voces de su cabeza, negándose a hacer lo que ellas le pedían, rechazando el ser controlada por ellos... tal vez, Nolan intentaba hacer lo mismo.

RECLUTA A8: LA GUERRERA ─── the maze runner [EDITANDO]Where stories live. Discover now