-¿Tienes hambre? -preguntó Jaebum-. Mi abuela está preparando comida.

Youngjae  hubiera querido decir que no, que no tenía hambre y que prefería volver a casa cuanto antes, pero su estómago eligió ese preciso momento para rugir como el motor de un tren y no pudo hacer más que asentir con la cabeza. Jaebum lo imitó y luego se levantó de la cama para darle la espalda y dirigirse hacia el armario, de donde obtuvo algo de ropa, y regresó al lado de Youngjae ofreciéndole la misma.

-Ponte esto -le dijo el mayor mientras que tomaba las prendas-. A no ser que quieras andar desnudo por mi casa o con tu ropa apestosa de alcohol.

-No... usaré esto, gracias -logró decir, poniéndose en pie y cubriéndose con la ropa de Jaebum, ignorando el dolor en el trasero-. ¿Puedo ducharme?

-¿Eres tonto? -fue lo que respondió el pelirosa, resoplando con una sonrisa burlona-. Sí, Youngjae, puedes ducharte. Cuando salgas ve directo a la cocina.

Dicho esto, Jaebum esperó a que Youngjae se vistiera para abrir la puertilla y dejarlo bajar primero. Una vez que ambos estuvieron de vuelta en el suelo de abajo el mayor le señaló la puerta del baño a unos pasos de donde se encontraban y se encaminó a lo que Youngjae suponía era la cocina, dejándolo solo en medio de la sala, ahora iluminada. La habitación era más bien pequeña y la decoración muy modesta, y al igual que en el cuarto de Jaebum, apenas había muebles. ¿Sería que el ser minimalista y sencillo era algo que Jaebum había heredado de su familia? Lo único que había en la sala era un pequeño sillón para dos personas, una silla mecedora de madera, un escritorio con una máquina de coser y diversas telas al lado y un mueble también de madera que sostenía la televisión y una radio, y eso era todo. Las pocas cosas que había estaban un poco amontonadas debido a la falta de espacio pero le daban a Youngjae una agradable sensación hogareña a pesar de la diferencia con su propia casa, enorme y repleta de muebles y cuadros decorativos.

Sin perder más tiempo se dirigió hacia el baño y se apresuró en ducharse, logrando sentirse nuevamente humano cuando el agua chocó contra su espalda. Disfrutó especialmente el uso de la crema para cabello porque olía demasiado a Jaebum (o a su cama, mejor dicho, a hierbas) y eso le encantaba. Se secó y se vistió lo más rápido que pudo, no tuvo mayores problemas además de que la remera le iba holgada y los pantalones un poco largos considerando que era más bajo y rellenito que el mayor, pero lo ignoró porque ambas prendas tenían también el embriagante aroma de la colonia del pelinegro impregnadas. Se atrevió a usar también el enjuague bucal que reposaba junto a la pasta de dientes porque quería lavarse la boca pero no traía su cepillo encima, y nuevamente el líquido mentolado olía exactamente como el aliento cálido de Jaebum y Youngjae no pudo evitar sonreír al notarlo. Él entero olía igual que Jaebum cuando salió del baño y se encaminó a la cocina, desde donde se oía al mayor conversando con su abuela mientras el aroma de la cocina inundaba la casa completa, y todo se sentía demasiado bien en su mente.

Apenas entró se encontró con que Jaebum ponía la mesa para los tres mientras que una anciana aún más pequeña que él pero igual de blanca le iba pasando los platillos ya terminados con movimientos lentos y manos temblorosas. La mujer hablaba con parsimonia sobre algo que Youngjae desconocía, aunque asumía que era algo gracioso porque Jaebum se reía mientras la escuchaba, enseñando los dientes al hacerlo. No pudo evitar sonreír él también con tal escena familiar, sintiéndose de repente un invasor en aquel ambiente íntimo entre el pelinegro y su abuela, pero no tuvo mucho más tiempo para pensar en nada porque Jaebum levantó la vista, notando su presencia, y le hizo un gesto con la mano para que se acercara a la mesa.

-Abuela, él es Youngjae -lo presentó Jaebum una vez que la mujer lo notó en la cocina-. Jae, ella es mi abuela.

-Buen día, señora -saludó mientras hacía una reverencia de 90° hacia la anciana-. Es un placer conocerla.

• Don't Tell Noona... | 2jae •Where stories live. Discover now