Fin de año que mira al futuro

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Pasado los rencores y la intolerancia, Jane y Patrick comenzaròn a llevarse bien, hasta podían decir que eran amigos, cuestión que ante sus amigos de la escuela no reconocían antes. Al fin de cuentas, el castigo sirvió para ponerle un título a la relación que tenían. De ahora en más, su relación va cuesta arriba, confían un poco más y no tienen miedo a lo que pueden llegar a decir de ellos. En cierta forma se complementan, pues se abrieron un poco más y permitieron conocerse entre sí. En ocasiones Jane y Patrick salían en defensa del otro, hubo una ocasión en la escuela en que uno de los amigos de Patrick le jugó una broma a su maestra y lo inculparon a Patrick, pero Jane vio como sucedieron las cosas y salió a defenderlo. Lo mismo hizo Patrick por ella, cuando una niña de la escuela que había audicionado para el mismo papel que Jane, le decía a sus compañeros mentiras que la perjudicaban, tras conocerla mejor, Patrick sabía que los rumores que decían de ella era mentira, así que diseñó un plan para dejar a la otra niña en evidencia.

Llegado el fin de año, el club de patinaje al que van David, Sabrina, Jane y Patrick, tiene la costumbre de hacer un festival a modo de recaudar fondos para asistir a los torneos y costear los trajes de los patinadores y los equipos de los conjuntos de hockey. A ese festival suelen asistir todos las familias de los alumnos que están en nivel de competencia Junior y senior, pues estos atletas hacen un número en conjunto que nadie se quiere perder. A diferencia de años anteriores, actuarían en ese los niños de 7 a 10 años, y como Jane ya había cumplido 7, podría participar del evento, por lo que Payton le armó una rutina para que hiciera con Patrick. A ambos les gustó la idea, así que no dudaron en participar, los papás de Patrick, y la mamá de Jane, le diseñaron unos trajes para la actuación: un hermoso vestido blanco con mangas para Jane, y un hermoso traje negro y blanco para Patrick. Quedaron encantados con su vestuarios y salieron a divertirse como nunca. Disfrutaron tanto el momento, que querían volverlo a repetir, a su tía Payton les gustó tanto su actuación que les propuso para el próximo año, participar en la competencia de parejas en un campeonato infantil de todos los clubes de la ciudad de Montebec. Si bien no era un campeonato importante, era para ellos, el principio de cosas inimaginables, a pesar de no ser algo que estuviera en sus planes, era una posibilidad de abrir los horizontes mirando hacia el futuro.

Ninguno de ellos estaba seguro de querer participar, pues seguían enfocados en sus vidas de bailarina y jugador de hockey, por lo que participar de este torneo, significaba tener que enfocarse un poco màs en esta actividad y dividir sus tiempos para poder prepararse para esto. Tampoco estaban muy convencidos sus padres, ni Katherine, ni Alice, ni Jonas estaban seguros de dejar a sus hijos participar, entre la escuela para ambos, los ensayos de ballet, las competencias de danza y la obra de Jane, màs los entrenamientos de hockey y los partidos para Patrick, sabían que una competencia como esta para ellos, significaba más horas de entrenamiento y màs dedicaciòn a una actividad que no sería la que ellos quieren para su futuro. Ademàs, sentían que sus hijos estaban dejando de hacer “cosas de niños” por dedicarse a los que les gusta, y competir en esto era demasiada carga extra a su rutina, no sabrían si los chicos eran capaces de aguantar tanto, eran muy chicos para comprometerse a tantas cosas, “tienen que disfrutar un poco màs de su niñez” repetìa Jonás. Sus padres, al no estar convencidos, dejarían que su hijos decidan qué hacer.

Viendo que ni Jane, ni Patrick, ni sus padres estaban convencidos de aceptar la propuesta, Payton dejò de insistir y se hizo a la idea de no tenerlos, asì que el poco tiempo que tenía antes del receso de invierno, Payton ayudarìa a Sabrina y David con sus rutinas de danza, y a Jessica, una alumna de la categoría de singles que tenía potencial para ser una gran patinadora. Conforme pasaban los dìas, Jane y Patrick comenzaron a sentirse celosos de no recibir tanta atenciòn por parte de Payton y sus dudas respecto a la competiciòn eran mayores, pero ademàs, esta falta de atenciòn hacia ellos  hizo que Patrick y Jane comenzarán a distanciarse, luego del festival no tenían algo para hacer en conjunto y solo se hablaban lo necesario.

Comenzaròn las vacaciones de invierno y ya no tenían que verse tan seguido, no tenían que ir a la escuela ni tampoco al club o a la academia; además era una temporada libre de competencias y partidos para ellos, así que tenían tiempo libre para divertirse. Respecto a las cenas, Katherine sorprendió sus hijos con un viaje a los Alpes franceses, así que el receso de invierno, la familia Mccormick Dubreuil la pasaron esquiando y no hubo cenas compartidas entre ambas familias, por lo que Jane y Patrick empezaban a separarse más. Después de todas las idas y venidas de su relación, estas vacaciones eran para ellos “un balde de agua fría”, la distancia no pudo con su relación, fue un obstáculo en el camino de la amistad que estaban empezando a forjar, lo que ocasiona problemas a futuro: durante su estadía en los Alpes franceses, Jane conoció a Fedor, un niño que se terminó convirtiendo en un amigo para ella  y que vive en la localidad vecina de London, por lo que se veían seguido, ya que viven a una hora de distancia. Eso a Patrick lo ponía muy celoso, sensaciòn que experimentaba por primera vez, ver a Jane compartiendo tiempo con otra persona lo hacía sentirse horrible, dejado de lado, abandonado, solo y triste. Ahí fue cuando se dio cuenta que tan importante era Jane en su vida, sin darse cuenta, ella había ocupado un lugar en su corazòn dentro de las personas màs importantes en su vida.

Cuando terminaron las vacaciones, ya había pasado el año nuevo, ambos volverían a sus rutinas, pero dejaràn de hacer algunas cosas: ya no iràn màs a las clases de patinaje con Payton y se concentraràn en la danza y el hockey, ambos le dedicaràn más horas al día a sus actividades favoritas, por lo que su distanciamiento es aún màs evidente, a pesar de que se seguiràn viendo en la escuela, ya no comparten esa actividad en común que los conectaba, de esa buena amistad que estaban comenzando a forjar, pasan a saludar formalmente, de algùn modo, volvieron a retroceder. A los pocos dìas de volver a la escuela, llega a la clase de Patrick, una estudiante nueva, Cassandra, con quien tendrà buena afinidad, y se haràn muy amigos. Eso a Jane la pone de los nervios, por primera vez comienza a tener sentimientos nuevos que no sabia como describirlos, pero saliò tan orgullosa como la madre, que hacía todo lo posible para que nadie se de cuenta, trataba de disimularlo lo más que podìa, pero cuando un dìa llegaba a su casa y ve a Cassandra en casa de Patrick, explotò por dentro, aunque se hizo la desentendida, Josephine se dio cuenta, por lo que fue a contarle a Katherine, pero no estaba en la casa, asì que le dijo a Carlton lo que había sucedido con Jane y màs tarde Carlton le sugería a la madre, que Jane y Patrick retomen las clases de patín, ya que el, hace unos dìas, había observado una situaciòn similar a la de Jane y Cassandra, pero con Patrick y Fedor.

Llegada la noche, cuando ambas familias se juntan para cenar, cuando Patrick entra a casa de Katherine, la mira a Jane y le hace una cara muy extraña, como si la odiara. Alice se dio cuenta de eso y quedò extrañada porque recordaba lo bien que la pasaban Jane y Patrick antes de las vacaciones, así que fue a hablar con Katherine en privado y ella le comentò lo que le había contado su hijo Carlton, así que Alice fue a hablar con Jonàs, y a los tres les parecía una buena idea que retomen las clases de patinaje ya que no querían volver a sus hijos pelearse. Creían que eso los unirá, entonces hablaron con Payton  para haber si habia posibilidad de que Jane y Patrick participen de esa competencia, porque asì tendrán que comprometerse màs con las clases y se verán obligados a solucionar sus problemas. Payton les dijo que faltaba poco para ese torneo pero que podría crearles una rutina sencilla para que participen, ya que analizando la situaciòn y teniendo en cuenta que hace tiempo habían dejado sus clases, sabría que no podrían ganar. Aunque Jane y Patrick no querían regresar, fueron forzados a hacerlos, fue para ellos la mejor decisiòn que tomaron sus padres, pues terminaron ganando con un puntaje que les permitiò clasificar a las regionales infantiles de otoño y tuvieron que limar asperezas ya que se veràn obligados a continuar compitiendo juntos. Lo que ellos no saben, es que el tiempo los pondrà a prueba con sus pasiones

De besos y abrazosOn viuen les histories. Descobreix ara