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La caída no fue tan dolorosa como esperaba. Caí sobre mis pies, pero no me dolió en absoluto. Entonces recordé que los octarianos y los inklings no tenían huesos.

-Bien, ya estáis aquí -dijo un altavoz, colocado en frente nuestro.

Estabamos en una plataforma flotante, la sala que debía encontrarse sobre nuestras cabezas ya no estaba, solo se veía el cielo anaranjado.

-¿Ves esa arma? -dijo la máquina -Eso es un lanzatintas, una arma básica. Cógela.

Cogí la pistola. Me recordaba a las pistolas de agua con las que los niños solían divertirse en verano.

Apreté el gatillo, y salió un poco de tinta de color rosa rojizo. Un recuerdo vino a mi mente:

"Así, ¡muy bien! ¡Ahora aprieta ZR y díspara al suelo! Ahora aprieta ZL para deslizarte a través de la tinta!"

Cómo por instinto, me transformé en pulpo y me escondí en la tinta, recordando que esa era una de mis habilidades.

-Parece que vas recordando cosas, ¿eh? Tu primera prueba será llegar al final del circuito -dijo mientras los tentáculos de Perla se tornaban del color de los míos.

-Sólo eso? -me confíe.

-No será tan fácil, amigo. Tu amiga también tendrá que llegar.

-¿Para que dices nada? -dijo la inkling, enfadada.

-¡Perdón, perdón!

-Mucha suerte, y recuerda: tienes tres vidas -dijo antes de dejarnos solos.

El altavoz se metió dentro de la plataforma flotante, y finalmente llegamos a un pequeño circuito. Estaba completamente pintado de una tinta azulada.

Empezamos a avanzar, yo iba pintando y Perla, subida a mi espalda, vigilaba por sí acaso. De repente, unos cañones emergieron del suelo y nos dispararon. La tinta enemiga alcanzó a mi compañera y la liquidó. Entonces, una pequeña bomba de tinta colocada en mi espalda se hinchó y estalló, liquidándome a mí también.

Reaparecimos en el punto base, en la plataforma. Repetimos estrategia, pero antes de llegar al lugar en el qué estaban los cañones, dejé a Perla detrás de una pared. Nadé lentamente para no hacer ruido y en un veloz movimiento, pinté completamente uno de los dos cañones y este se volvió a esconder bajo el suelo. Hice lo mismo con el otro y fui a buscar a mi amiga para acceder a la siguiente plataforma.

Un campanita sonó, indicándonos una cosa:

PUNTO BASE!~

G.A.M.E. (N°8)Where stories live. Discover now