capítulo 9

554 25 0
                                    

Evie: ¿Ya me van a bajar o qué? – bufó
Mal: Jay, puedes bajarla – rió
El descendiente de Jafar así lo hizo.
Evie: Bueno, gracias – se quejo
Jane: ¿Qué esperan? Vamos – se dirigió al lago
Los chicos se fueron al lago encantado, pero Evie se seguía sintiendo incómoda, ni siquiera quiso entrar al agua.
Mal: ¿Ya o todavía? – se quejo
Evie: M, no pienso entrar al agua, sabes que yo tampoco sé nadar
Mal: Yo aprendí, así que, vamos
Evie: Un no es un no Mal, por favor respeta mis decisiones – se quejo
Mal: Ben tampoco quiere entrar – sonrió maliciosa
Evie: Agh, ya que – reviró los ojos —; pero por favor no me dejes sola, no es que ame mucho mi vida, pero creo que aún me faltan cosas por ver, así que no quiero morir ahogada
Mal: Que exagerada, pero esta bien, no te dejo sola
Evie: Prometelo – pidio
Mal: Lo prometo – rió y la jalo del brazo para entrar
Evie no sabía ni qué tenía que hacer, sólo se aferraba al brazo de Mal.
Mal: Evie, si sigues así, nos ahogaremos las dos – se quejo —; mira, te voy a dejar en esta piedra mientras voy por Jason, quiero hablar con él sobre algo
Evie: Prometiste no dejarme – hizo puchero
Mal: Lo sé, lo siento, es que es algo urgente
Evie: Esta bien, pero no tardes – pedió y ella asintió
Evie bajo de la piedra en donde estaba.
Evie: Okey Evie, vamos, puedes hacerlo, aparte, ¿qué tan difícil puede ser? – pensó y bajo por completo de la piedra —; okey, si es muy, muy difícil – se puso nerviosa al no saber qué hacer
Ben: Hey, tranquila – dijo acercándose a ella —; mira, sólo debes patalear un poco para mantenerte a flote, así mira – pataleo sus pies y se elevo un poco —; ¿lo ves? es fácil.
Evie lo intento.
Evie: Wow – se sorprendió al ver que le salía
Ben: ¿lo ves? ya te sale perfecto, sólo debes practicarlo – sonrió al igual que Evie y sin previo aviso ambos quedaron muy cerca
Ben estaba apunto de volver a besarla, Evie igual pero le entró miedo.
Evie: ¿Q-qué haces? – tartamudeo
Ben: Oh, em, lo siento, ya me voy – sonrió nervioso
Evie: Sí, em, yo igual
Ben: Claro – se quedo parado como bobo —; Evie, enserio eres muy hermosa – sonrió
Evie se sonrojo y eso no le agrado. Ben se volvió a acercar, pero ahora nada le impidió juntar sus labios con los de ella.
Mal: ¿Evie? ¿Ben?
Evie reaccionó inmediatamente estirando sus brazos, pero no se fijo y golpeo a Ben en la cara.
Ben: Auch – se quejo tallándose el ojo
Evie: Ay Ben lo siento – se acerco a ver su ojo, pero al ver que Ben disfrutaba de tenerla cerca y preocupada, lo dejo así —; eso te pasa por idiota – se quejo y se fue de ahí
Mal sólo se rió del comentario y Ben la fulminó con la mirada.
Ben: Algún día, no se resistirá a mis encantos
Mal: ¿Quieres apostar?
Ben: ¿Qué? – preguntó curioso
Mal: La verdad invertiría muy bien unos docientos pesos a que antes de que la hagas tu novia, tendrás que pasar por el sufrimiento Grimhilde Queen
Ben: ¿Sufrimiento Grimhilde Queen?
Mal: Sí Beniboo, ella ahora esta confundida, lo cual hace que no te quiera tener cerca, creeme, te hará la vida imposible – burló
Ben: Pero, ¿porqué?
Mal: Agh, cómo te explico, ella te quiere lejos por lo que hiciste, te costará mucho trabajo conquistarla, y si ahora te dolió éste golpe en el ojo, mejor ten a una ambulancia cerca del castillo por si las dudas
Ben: Hablo de porqué quiere hacer eso y porqué me quiere lejos
Mal: ¡Porque la haces dudar Ben! ella tenía muy claros sus sentimientos hasta que llegaste y le plantaste un beso de cuento de hadas en sus labios, así que ahora aguantate y deja de preguntar cosas tontas
Ben: Esta bien, esta bien, relajate
*Mientras tanto con Evie*
Carlos: Ev's ¿a dónde vas tan pronto? – dijo mientras veía a Evie salir del lago
Evie: No me siento bien Carlos, nos vemos luego
Carlos: ¿Quieres que te acompañe?
Evie: No, quedate con los chicos, estaré bien
Dicho esto, la descendiente de Grimhilde se fue a su dormitorio.
Evie: Estúpido, estúpido Ben, ¿porqué tenía que hacer todo eso? ¿porqué ahora, porqué justo ahora? – hundió su cabeza en una almohada con desesperación —; ¿será que a mi también me guste? Ay Evie Grimhilde Queen ¿qué demonios dices? – volvió a hundir su cara —; lo peor de todo es que ahora hablo sola – vió alrededor a nadie —; aghh, ¿qué me pasa? – colocó bruscamente la almohada encima de ella, dejando caer su cara en la cama
Mal: Tock, tock – dijo detrás de la puerta
Evie: ¿Esto podría empeorar? – dijo mirando al techo


Chicas perdón por prestarle más atención a eres mía y de nadie más... volvi!!

Tortolos  Encontrados Where stories live. Discover now