Monotonía

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Hasta que me olvides

Aclaro que estos personajes no son mios, son del señor Kazuki Takahashi, esto es entretenimiento de fans a fans. Fanfic de Yaoi chico x chico

La vida de adulto de Seto Kaiba no era tan divertida como sus momentos de juventud, cuando era feliz participando en duelos, pero desde la desaparición del faraón ya nada tenía sentido, Yugi se volvió una persona poco interesante para él, así que estaba retirado de todo eso, ahora solo estaba dedicado a sus negocios con Kaiba Corp y cuidando de Mokuba como siempre, aunque su hermanito insistía en que ya no lo necesitaba, él vivía lejos estudiando muy pronto la Universidad.

Un día tiró con fastidio todos sus papeles y salió hecho una furia de la oficina, bastante cabreado porque se sentía devastado debido a la monotonía. En la calle comenzó a llover pero él no se refugió en ningún lado, continuó caminando hasta que se topó con un negocio de comida que se veía muy abandonado, pero las letras afuera estaban llamativas, aprovechó que no tenía sus ostentosos autos ni se veía muy acaudalado como siempre, entró

—Hola señor ¿Qué le ofrecemos? En este lado puede ver el menú —señaló el dependiente uno de los muros, Seto miró y se sentó también

—Un plato de ramen y un poco de sake por favor

—Enseguida

Seto miró hacia afuera, la lluvia continuaba con su torrente y se sintió bien nostálgico por ello, recordó aquellos días de duelos, a todos, a quienes se negaba a llamar amigos, a quienes no dudó en nombrar enemigos, todos estaban en su memoria, pero uno en especial, alguien que siempre lo sacaba de sus casillas

—Aquí tiene —el dependiente le dejó lo que pidió y se retiró, Seto comenzó por el sake

Continuó comiendo hasta que acabó que siguió y siguió bebiendo sake y más sake, sin medirse para nada, no estaba muy acostumbrado a él, pero se sintió confiado. Pidió su cuenta y pagó, pero cuando se quiso levantar se sintió todo mareado y tropezó

— ¿Está bien señor?

—Llama... un taxi —pidió con dificultad al hablar, después cayó al suelo a punto de desmayarse, viendo el foco arriba de él, le encandiló

—Señor, señor —llamó todo asustado, pero Kaiba no respondió

— ¡Ya vine! Pero ¿qué pasa? —una tercera voz que a Seto le resultó familiar, pero no vio a nadie, no se podía mover —Pero si es

Finalmente esa persona que apenas llegó se mostró poniéndose frente a él, su rostro todo oscuro por la luz del foco en la nuca, pero alcanzó a distinguir un poco

—Debo estar soñando —habló pero su voz no se oía para nada —Joey Wheeler

—Hey, oye, oye, despierta —llamó la voz en la lejanía, pero él se quedó dormido, cansado y borracho

...

Abrió los ojos y poco a poco se dio cuenta que no estaba en su casa, de golpe se sentó sobre la cama, aturdido y con un enorme dolor de cabeza, todo mareado. No se fijó ni por donde pisó, localizó el baño en ese pequeño lugarcito y vomitó todo lo que pudo

— ¿Cómo te sientes? —preguntó la voz de anoche a su lado, Seto volteó rápido dejando de limpiarse la boca que enjuagó después de vomitar

Lo de anoche no fue un sueño, ahí estaba Joey observándole impávido, le sonrió después

—Seto Kaiba ¿Quién iba a decir que te vería así? No esperé encontrarte nunca de nuevo, menos de esta forma

El otro continuó sin creérselo, lo miró todo asombrado

— ¿Perdiste el habla?

—Dime ¿en dónde estoy?

—En mi casa ¿dónde más?

— ¿Esta porquería es tu casa? —preguntó todo mala onda, a su alrededor vio solo un cuartucho simple, cama en el suelo, un baño cutre, un estante con basura, o lo que él llamaría como tal, la ropa en un intento de clóset y ya, todo

—Eres un maleducado como siempre —dijo Joey todo molesto, colocando sus manos en la cintura

—Dime ¿Qué hago aquí? ¿Qué me hiciste?

— ¿Qué te hice? —exclamó indignado pero riéndose —Eso quisieras

—No te pedí que me trajeras

—Estabas desmayado y no quise traerle problemas a mi jefe, pudimos tirarte en la calle ¿sabes?

—Dijiste ¿tu jefe? ¿Trabajas en esa pocilga?

—Muy pocilga pero comiste ahí ¿eh? Hipócrita

—Bueno ya —lo calló con prepotencia —Nunca creí que llegarías solo a ser el empleado de un restaurante tan solitario como ese ¿Qué fue de tu vida?

—Oh vaya, Seto Kaiba esta preocupado por mí —exclamó sorprendido

—Solo siento curiosidad, no te confundas, en todo caso no respondas, no me importa —lo miró bien feo y le dio la espalda — ¿Es otro día?

—Claro bruto

Kaiba lo miró feo por decirle así pero esta vez no respondió

—Dime —Kaiba miró a su alrededor y notó que esa cama donde despertó era la única — ¿Dormimos juntos? —preguntó alterado

—Juntos pero no revueltos —aclaró preocupado de recibir un golpe

—Te lo dije antes, no te pedí nada, no vuelvas hacer algo así —regañó todo molesto y Joey se indignó por su falta de tacto

—Eres un cretino, no quise abandonarte a tu suerte y así me tratas

—Has lo que quieras, me voy —buscó su gabardina que vio colgada por ahí y se puso los zapatos, sin un gracias salió de la pequeña casa de Joey

— ¡Malagradecido! —gritó desde dentro, Seto sonrió, extrañó mucho aquellos insultos.

—Pero ¿Qué le sucede a este idiota? —enojado por la actitud mala de Seto, Joey golpeó la puerta de su casa, si ese maldito se volvía a cruzar en su vida, le rompería todos los dientes.

CONTINUARÁ

Comencé otro fic, espero les guste, no abandonaré los otros y seguiré escribiendo one shot, espero me sigan leyendo, gracias por todos sus follow, sus favorite y reviews

Hasta que me olvidesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora