Misión cumplida y regreso a casa.

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Ella se sentía mal y no podía evitar llorar, pues sus lágrimas se salían sin su permiso, mientras el la abrazaba fuertemente y trataba de calmarla, mientras ella recordaba la partida de Sasuke, luego imaginaba lo que había pasado con Masaru, el dolor de sentirse solo y abandonado

--- yo siempre estaré contigo Sakura- chan... nunca te dejare sola...--- susurro Kakashi, casi inaudible, pero ella logro escuchar cada palabra de él, como si él hubiera leído su mente, ella se aferró a él con más fuerza, para luego soltarlo poco a poco, bajo la mirada secándose el resto de las lagrimas y fingiendo una sonrisa trato de parecer natural

--- debo ver a Masaru y a su padre, debo dar el visto bueno para que Masaru pueda salir del Hospital...--- dijo la joven para darse la vuelta para irse, pero se detuvo

--- gracias sensei... ---susurro la pelirosa para tomar rumbo hacia la habitación del joven comerciante, mientras el hombre suspiro

--- de nada... estaré cerca de ti cada que lo necesites...--- dijo en voz baja quedándose unos momentos ahí.

Sakura entro a la habitación y para su sorpresa Masaru había despertado, el joven miro hacia ella y sonrió

--- muchas gracias... sakura--- dijo Masaru aun mirándola

--- muchas gracias jovencita, por salvar a mi hijo...---dijo Maoko haciendo una pequeña reverencia,

ella sonrió levemente ante sus palabras y se acercó a ellos, para revisar una pequeña maquina a un lado del joven comerciante

--- buenas noticias Masaru podrás salir del hospital hoy mismo--- dijo la pelirosa con algo de alegría, mientras padre e hijo sonreían ante las palabras de la joven médico

¿? --- son buenas noticias, entonces nosotros ya hemos cumplido con nuestra misión--- sonó una voz que les hizo voltear a la puerta, viendo al peliplateado recargado en el muro con los brazos cruzados

--- al parecer es cierto Kakashi-san, en nombre de mi hijo y yo estamos agradecidos con konoha y ustedes por traernos a nuestro destino vivos--- dijo Maoko levantándose y sonriendo amablemente

--- era nuestro trabajo señor Maoko --- dijo el peligris sacando unos papeles de su mochila y entregándoselos a Maoko

--- debe firmar aquí, cuando lo haga nuestra misión llegara a su fin--- finalizo Hatake sonriendo bajo la máscara, Maoko firmo los papeles con cuidado y se los devolvió al Shinobi

--- bueno, fue un gusto conocerlos y tengan un buen día, tenemos que retirarnos ya a nuestra aldea--- dijo el exsharingan para después mirar a la pelirosa, quien acentuó con su cabeza comprendiendo que debía despedirse de los comerciantes

--- señor Maoko, fue un gusto conocerle y trabajar a su lado--- dijo Sakura al hombre mayor para luego mirar a Masaru que se encontraba a un en camilla

--- Masaru... sé que eres un chico fuerte, pero aun así quiero que te cuides, principalmente ese brazo por ahora...--- dijo con mirada seria para luego continuar a un más tranquila---me tengo que ir fue un gusto conocerte y trabajar a tu lado espero que sigas las indicaciones, --- finalizo la pelirosa para después entregarles una ultima sonrisa, se dio la vuelta para retirarse

--- ¡sakura¡¡espera ¡--- la voz de Masaru hizo que se detuviera de golpe, volteando hacia su dirección, el joven intento levantarse, pero solo consiguió soltar un quejido de dolor, la chica se acercó

--- Masaru que te acabo de decir...--- dijo la chica en forma de reproche, acomodando nuevamente su cabestrillo

--- toma...--- el joven extendió su brazo derecho, la chica puso su mano para recibir lo que le deba Masaru, el chico deposito en la mano de la pelirosa un brazalete dorado con incrustaciones de pequeños diamantes azules claros

Heridas abiertas( mi secreto)Where stories live. Discover now