Don't Stop | Luke Hemmings - Ashton Irwin [Editando]

Capitulo 11

|PDV's Brooke|

Después del encuentro con Ashton, el siguió manejando. Realmente tenía terror de donde habían planeado llevarme, aunque probablemente era algo alejado.

- no te preocupes, hermosa, te encantará el lugar - la voz adormilada de Luke se hizo presente y lo mire rápidamente, dedicándole una pequeña sonrisa.

- ¿a dónde me llevan?

- ya veras, es muy lindo - sentí las diferentes voces de los chicos. Ash tenía un tono muy tierno y más agudo que el de Luke. Eran completamente diferentes en casi todos los sentidos. Asentí y vi que llegábamos a una cabaña en medio de la nada. Mi mirada brillo, amaba las cabañas. Me baje rápidamente con mi bolso al hombro. Mire a los chicos y me miraban sonrientes.

- entra - dijeron al unísono. Y lo hice. Era un lugar muy cálido y acogedor. Los chicos entraron. Ashton traía unos cinco bolsos y Luke muchas bolsas con comida. Habían preparado todo y de cierta manera, me encantaba. Recordé la vez que Calum me llevo a una cabaña. La verdad es que llegamos con nuestra ropa y descubrimos que sólo había una habitación, cocina y un baño. Después, me dijo que olvido traer comida así que él fue a comprar pero comenzó una tormenta y nos quedamos atrapados. Fue lindo, de todos modos.

- lindo, ¿no? - Ashton me abrazo por detrás y paso los brazos por mi cintura. Aspire su aroma. Olía tan jodidamente bien.

- sí pero, ¿me voy a quedar encerrada aquí? - negó y lo mire como diciendo '¿en serio?'.

- no, claro que no, saldrás pero con nosotros a tu lado - suspire. Extrañaba mi libertad, extrañaba las fiestas. Asentí y sonreí.

- ¿donde puedo dormir? Estoy cansada - me miro pícaramente y recordé lo que paso en el auto. ¡No lo decía por eso! Tomo mi mano y me dirigió hasta una pequeña habitación muy rústica.

- aquí, descansa y te llamáremos para comer - sonreí en agradecimiento y me despojé de la ropa. Cuando me iba a poner el pijama, la puerta se abrió.

- oye, lind... - Luke me escaneaba con su mirada. Ya me conocía, ¿por qué lo hacía? - eres muy perfecta.

- ya, calla, Luke - me sonrojé. Nunca en mi vida me había sonrojado tanto, ni con Calum y eso me asustaba. Una parte de mi quería volver con Cal y la otra se quería quedar con los chicos. Sin si quiera darme cuenta, Luke me había tirado a la cama y me había sacado lo poco que me quedaba de ropa. El también se la saco y observe sus tatuajes que, por alguna razón, no había notado antes. Luke comenzó a masturbarse pero lo pare y seguí yo. Introduje su miembro en mi boca y comencé a chuparlo, sin apartar mi mirada de sus ojos.

Amaba esos ojos. Eran especiales, como los de Ash, como los de Mike, como los de Calum. Ashton al parecer los tenia pardos, eran raros. Los de Mike son verdes y los de Calum cafés. Pero todos eran hermosos. Seguí mi 'trabajo' y pensé en que podrían estar haciendo los chicos. ¿June en serio estará con Calum o Em ya lo habrá conseguido?; ¿Estará Mike bien sin mí, con sus ataques de ira repentinos sin nadie que los sepa calmar? Luke comenzó a botar su líquido pre-seminal y me levantó.

- quiero correrme dentro tuyo – asentí y entro lentamente en mi. Solté un gemido fuerte y me beso para callarme. Sus embestidas eran duras y rápidas. Sentí el orgasmo cerca cuando él se corrió pero se salió en un segundo.

- ¡LUKE! – lloriquee.

- tranquila, recuéstate – obedecí. Me había dejado con las ganas. Se posiciono entre mis piernas y paso su lengua por mi feminidad. Lo mire algo sorprendida. Me encantaba eso y quería que siguiera. Como si leyera mis pensamientos, así hizo. Comenzó a besar, mordisquear, chupar y todo lo que se pueda hacer. Y finalmente llegue al preciado orgasmo. Estaba, simplemente, agotada. Estos chicos eran insaciables – gracias, hermosa.

Sonreí y me beso. Se vistió mientras yo me colocaba mi ropa. Estaba adolorida y solo quería dormir. Así que me acosté y me dormí pensando en la hija de puta que me había convertido.

Sentí un zarandeo en mi hombro y me desperté exaltada. Allí, mirándome interrogante, se encontraba Ashton. Le sonreí.

- la cena esta lista.

- ¿ustedes cocinaron?

- dah, es obvio, ¿Quién más, cabeza hueca? – me empujo en broma y caí de bruces a la cama. Solté carcajadas.

- ha, claro, mira quién habla – mi estomago rugió y reímos. Camine tras él hasta la cocina donde vi a Luke. Este estaba cubierto de harina apuntando hacia la puerta y al vernos entrar, lanzo un puño que cayó en mí. Chille y reí. Tome un poco del suelo y se lo tire. Así es como se comienza una guerra de harina con tus secuestradores. Cuando mi estomago pidió a gritos más fuertes comida, paramos y comimos. Habían hecho unas exquisitas pastas con salsa Alfredo. Comí, literalmente, como bestia.

- oye, parece que tenías hambre – Luke soltó mirándome.

- no, solo un poco – y de la nada, recordé algo. Mi periodo me venía la próxima semana y necesitaba una máquina para depilarme. Y me puse roja como tomate – chicos...

- ¿Qué? – respondieron al unisonó.

- es que... - me coloque nerviosa, ¿Cómo decirle a chicos tan lindos que necesitas depilarte? – es que...la próxima semana me viene

- ¿Qué te viene? – pregunto Ashton inocente y golpeé mi cabeza contra la mesa.

- que la próxima semana hay alerta roja, me viene.

- aun no entiendo – siguió Luke.

- ¡que me viene el periodo, idiotas! – grite desesperada. Se miraron entre si y comenzaron a reírse a carcajadas.

- Brooke... - dijo Ashton entre risas.

- y necesito una depiladora, chicos – me miraron con los ojos llorosos de tanto reírse.

- aww, te queremos así, seas un mono o una rata lampiña – dijo Luke, en broma, supongo. Choco los cinco con Ashton.

- oh, vamos, Brooke, te daremos todo lo que quieras.

- ¿y mi libertad? – susurre volviendo a la realidad. Ellos no eran mis amigos, eran mis secuestradores.