Función: Se usaba comunmente para castigar a criminales o traidores, ya que no dejaba marcas y la víctima podía recuperarse.
Intensidad: ★★★★☆☆☆
Descripción: Aunque el término "cosquillas" pueda hacerlo sonar como un castigo leve, esto no es nada más alejado de la realidad.
La víctima es atada en una silla, una cama, un diván o cualquier otra superficie, y se usa un cepillo o una pluma, o a veces las manos, para cosquillear las plantas de los pies, los costados y el cuello de la persona.
Si alguna vez te hicieron cosquillas, sabrás que se vuelve desagradable al cabo de un corto período de tiempo.
En este caso, se empiezan con caricias suaves, provocando la risa, y se va incrementando la intensidad poco a poco, sofocando a la víctima y haciéndola sufrir. La persona torturada pierde el control de su cuerpo entrando en un estado de fatiga, ansiedad y tensión
Si el torturador no pone un límite, pueden suceder dos cosas. Una, que la víctima muera de asfixia o de un paro cardíaco provocado por la risa, u otra, que el mismo estrés lleve a un derrame cerebral.
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