[CANCELADA]• l o c υ ѕ • a м o e n υ ѕ • Taejin/Vjin

f i v e

Seokjin iba a quedarse en la casa de Taehyung por las insistencias del padre del mismo. El padre del chico estaría unos días fuera, y dijo que prefería que alguien se quedara con Tae si no le era mucha molestia; Y claro que para Seokjin estar con el chico no era ninguna molestia, y ahora que lo tenía cara a cara, riendo de los chistes malos que hacía, estaba más que seguro que la semana que pasaría ahí, se divertiría mucho a su lado. 

 Se encontraban en la camioneta perteneciente a la familia del chico. Jin estaba sorprendido de que supiera conducir, ya que Taehyung le había manifestado tantas veces -en esas noches en las que se sentía mal y no hacía más que recordarse a si mismo que era "un enfermo"- que era torpe haciendo de todo, y que eso en sí, no era culpa de la enfermedad. Aún así, ahí estaban, yendo relajadamente por las calles de la amplia cuidad de Daegu para ser llevado hacía Seo-gu, que se encontraba más al oeste de la cuidad. El silencio entre ellos ya no existían, iban con la música a un volumen considerablemente, peleando de a ratos por quién tomaba el mando de lo que se reproducía acontinuación. 

 —¡Es mi auto! — Bramó Tae. 

  — ¡Soy tu invitado!— Devolvió Jin. 

— ¡Pero yo conduzco!—  

— ¡Y yo debo escuchar!—  

— ¡Eres malo!—  

— ¡Lo soy! — 

— ¡Te amo!—  

—  Yo tambi-- Espera, ¿Qué?—  

 Y el automovil se inundó de las dulces risas de Taehyung, las cuales terminaron por hacer reír al mayor de los dos. El ambiente creado entre los dos era relajado, los silencios eran casi nulos, pero cuando se encontraban con ellos, no parecía ser para nada incómodo...sentían como si se conocieran de toda la vida, y eso les encantaba. 

  Fueron aproximadamente 50 minutos hasta que llegaron a la amplia casa de los Kim. Su hogar no era similar a una mansión como la de la familia de Seokjin, sino que aunque fuera amplia, daba una bonita sensación hogareña, la misma que Taehyung daba cuando sonreía. El chico lo sacó de sus pensamientos deteniendo el auto frente a la puerta principal y dándole indicaciones de que bajara las cosas del baúl mientras él iba a abrir la puerta. 

 Seokjin, aún embelesado con el calor que le transmitía todo -incluso cuando el invierno los golpeaba-, tardó un poco en sacar sus cosas de la parte trasera del auto. Sin embargo, cuando lo hubo hecho, cerró el mismo y colocó los seguros antes de ingresar rápidamente al hogar ajeno, ya que el menor se encontraba en la puerta del lado interior, y Seokjin no quería que se expusiera más tiempo al frío. 

 Las paredes de la casa eran de color crema que contrarrestaban con la madera natural de los pisos, ese lugar no tenía ningún toque blanco de decoración, y aún así, no era para nada desagradable a vista.