Joint

7-Mi primera raya

Llegó un punto en mi vida,en el cúal no sabía que hacer ni como reaccionar ante nada.
Mi abuela estaba muerta y yo era la culpable,mi madre aún no me había perdonado del todo ,Jessica no me quería,Alex me acosaba y no me gustaba.
Los porros comenzaron a no hacerme efecto así que decidí empezar con drogas mayores porque total ya no había vuelta atrás...
Un sábado quedé con Jessica como amigas para irnos a una fiesta donde había muchos tipos de drogas,alcohol,chicos y putas.
Comencé a beber al segundo de entrar en esa fiesta,no sabía muy bien como pero había un camarero repartiendo mini-porros no sabía si era mi fumón permanente o estaba en las nubes...
Para conseguir otro tipo de droga tenías que ir a una de las habitaciones a hablar con el camello.
Yo subí y cogí un gramo de coca,solamente quería experimentar.
Me daba un poco de apuro meterme aquella cosa blanca con textura de harina por el orificio de la nariz...
Como no Jessica me ayudó a hacerlo,sentí una sensación muy extraña al principio luego estube tres horas como nunca.
Estaba super feliz y hablando con todo el mundo sin verguenza alguna,cuando se me bajó el colocón de cocaína ya necesitaba más...
No había probado cosa igual,me quedé otro rato en la fiesta aunque necesitaba más,los porros ya no eran de mi ayuda,ahora estaba enganchada a la cocaína.
Sí,tenía dieciseis años y esnifaba cocaína y sí cuando tenía trece años tomaba té frío...
No sé en que momento pudó cambiar tanto mi vida,no sé en que momento maté a mi abuela y no sé en que momento estube con Alex...
Jessica tambíen era un error,pero mi error favorito.
Cuando me desperté al día siguiente la cabeza me daba mil vueltas y estaba sangrando por la nariz.
Esa tarde me apeteció ir a dar un paseo por el campo para pensar si debía cambiar mi vida o continuar así...
Una de mis opciones fui tirarme por un precipio,otra fue hablar con Jessica y otra hablar con Abril,la primera era muy precipitada y nunca mejor dicho,la segunda era genial y la tercera no hablemos de ella.
Llamé a Jessica y ella me dijó que estaba viviendo la vida y olvidandome de los problemas,que continuará así como ella,además así nos uniría algo siempre.
Jessica era mi perdición y le hice caso desde el primer momento hasta el final de mis días estaba segurisíma.
Era ese punto de mi vida en el que te encuentras sin alguna idea de que hacer ni que pensar respecto a nada.
No tenía estudios,no tenía dinero,mi familia pasaba de mí y era drogadicta y lo peor de todo tenía 16 años.
Tube una idea que fue ir a un centro de desoticación para alejarme del mundo de las drogas,también pensé en mudarme a Marbella o tal vez irme lejos de mi pueblo y lejos de mi Jessica.
Mi adicción con la cocaína no era tan grande como yo pensaba y solamente me drogaba una vez a la semana,el gramo valía unos 50 euros,comencé a robar lo que podía y vender todas todas mi pertenencias.
Volví con Alex una temporada,me siguió maltratando así que me salí de ahí en cuánto pude.
Volví a vivir con mi tío para no hacer daño a mi pequeño hermano...
Cumplí los diecisiete años,como había cambiado mi vida nada era alegre como antes y no recibía una simple felicitación,nadie se acordava de mí y no significaba nada ni nadie.
Me dí cuenta de que era una cuenta atrás con diecisiete años mi vida no iba a durar mucho más allá de los treinta,no tendría hijos ni casa ni una pareja sentimental estable.
Nadie lo podría cambiar y mi vida estaba jodida.