Capítulo once.

302 23 3
                                    

Narra Diego.

Me desperté y automáticamente miré el reloj, las 11:30 de la mañana, menos mal que hoy era fiesta y no había clase, necesitaba dormir.

Me quedé pensando un momento y se me ocurrió una idea así que me vestí rápidamente, envié un mensaje rápido y salí volando de casa.

De camino hacia el lugar al cual iba, me paré en una cafetería a comprar dos cafés y algunos donuts.

Llegué a mi destino y volví a enviar un mensaje y me abrieron la puerta, estaba en casa de Aurora, sabía que iba a estar durmiendo y le iba a dar una sorpresa.

Entré en su habitación con los cafés y los donuts, los puse en su mesita de noche y me acosté a su lado intentando no mover mucho el colchón. Estaba tan preciosa durmiendo, que dios. ¿Me estaba enamorando? No lo sé. Me incliné hacia ella y le di un beso en la frente, luego uno en la mejilla y acabé en sus labios hasta que a ella se le escapó una sonrisilla. Abrió los ojos me rodeó el cuello con sus brazos y me estrujó. Estaba adorable hasta recién despierta.

-¿Qué haces aquí, feo? ¿Sabes que son los mejores buenos días           que me han dado nunca? – Terminó de hablarme y ya me estaba besando otra vez, cosa que a mí me encantaba.

-Pues que te tengo una sorpresa, por un lado toma. – le di el café y un donut y yo me quedé con el café y el donut restantes. – Y por otro lado vístete que te tengo una sorpresa. – Vi que se estaba comiendo el donuts lo más rápido que podía y le di un beso. – Así está más dulce eh, anda mastica que te vas a ahogar. – Me empecé a reír y ella ya se estaba vistiendo así que me di la vuelta.

- No mires eh, que me da vergüenza, y ahora estoy nerviosaaaaaa,  ¿qué es la sorpresa? – Me empecé a reír con los comentarios de Aurora y me di un poco la vuelta para verla. -Diegoooooo, te he visto, pero ya estoy vestida te lo has perdido todo. – Se tiró encima de mí y nos fuimos. – Por cierto Diego, ¿quién te ha abierto? Ni siquiera he escuchado la puerta.

-Tengo mis contactos y tu hermano es uno de ellos. – Me eché a reír al ver su cara de asombro.

-Bueno y ¿dónde vamos? – Me dijo dándome, estaba muy nerviosa y eso me hacía gracia.

-Pues de momento al metro, lo demás sorpresa. – Le guiñe un ojo y ella puso cara de enfadada pero al final me cogió de la mano y seguimos camino del metro.

Por fin estábamos dentro del metro y Aurora estaba con una energía impresionante.

-Diego, ¿dónde vamos me lo vas a decir ya?

Negué con la cabeza y le dije que ya lo vería.

-Pero ¿dónde… - Antes de que me lo preguntara otra vez la besé y ella me seguía el beso. Eres un tramposo.

-Lo sé, pero ya estamos llegando a nuestra parada, vamos.

Bajamos del metro y me paré con Aurora un momento antes de salir.

-Ahora te voy a tapar los ojos y no vale ser tramposa eh.

-Está bien. – Puso pucheros pero después se empezó a reír y yo le tapé los ojos.

Íbamos por la calle y todo el mundo nos miraba ya que yo iba detrás de ella tapándole los ojos y nos costaba andar pero al fin llegamos.

-Ya hemos llegado, ¿estás preparada?

- Sí, venga rápidoooo.

Le dejé de tapar los ojos y su cara era de mucho asombro, no sabría si le gustaría pero su cara lo dice todo.

Se tiró encima de mí, me abrazó y me besó.

-Gracias por traerme aquí, me encanta.

---------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Siento haber tardado tanto en subir capítuloooo, bueno solo quiero deciros que a partir de ahora subiré más a menudo e intentaré hacerlos un poco más largos o al menos poder subir uno casi todos los días. Muchísimas gracias por leer :3.

Por si me olvidasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora