Tyler y Josh se quedaron mirando sin saber que hacer, hasta que el mayor habló;
-Ah, ¿quieres quedarte? Puedo explicarte lo del café.
El castaño simplemente asintió.
Mientras el teñido buscaba chocolate caliente para los dos, Tyler se sentó en un cómodo y pequeño sillón en la sala.
-Bueno, el café tenía muy pocos clientes por lo que quebró y tuvimos que cerrar, ahora debo buscar un nuevo trabajo para pagar la universidad-Josh dijo esto mientras se sentaba y le entregaba a Tyler una taza de la dulce mezcla de cacao, leche y azúcar.
-¿La universidad?-Preguntó el castaño confundido.
-Si, voy en primer año
Así que Joshua era mayor, dos años mayor. A decir verdad parecía mucho mas pequeño e indefenso, juraba que era por lo menos un año menor que él. Ante estos pensamientos el chico esbozó una pequeña sonrisa tierna.
-¿De que te ríes?-dijo el teñido al ver la expresión facial de Tyler.
El castaño se limitó a carcajear:
-Soy dos años menor que tu-dijo entre risas sin razón.
El teñido lo miró confundido para después echarse a reír también.
-Siempre pensé que parecías menor que yo, pero no pensé que fuera verdad-rió Josh.
-Yo pensaba que eras mucho menor que yo, eres tan tierno y pequeño...-dijo a su vez el de menor edad, suavizando su voz, como saboreando las palabras.
Ninguno de los dos supo como terminó Tyler sobre Josh, besándose con cierta intensidad, pero a la vez cariño. Los dos lo necesitaban, más bien lo deseaban y por fin pasó.
Sus emociones eran como fuegos artificiales y de verdad se sentía como el típico beso cliché de los libros.
Y así estuvieron unos minutos, tal vez horas compartiendo besos y caricias. Lo mejor de todo es que se sentía como llegar a casa después de un día de clases o comer algo dulce. Las voces interiores de Tyler desaparecieron completamente para dar paso a un nuevo sentimiento:
Seguridad.
