#BlushAndHappyEnd

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Desde su más tierna infancia su vida había estado rodeada de lujos. Juguetes caros, colegios de primera categoría, ropa a la moda, comida hecha por chefs y una mansión que era la envidia de todos. Pero, a diferencia de otros niños, Jason desconocía quién era su padre. Tenía un hermano, de ojos azules, cabello negro, sonrisa perfecta, parecido a su madre, él tenía cabello negro, ojos verdes y un esbelto cuerpo, como su madre, pero no entendía a quien había sacado esos ojos esmeralda.
Era de público conocimiento que el Señor Wayne, Bruce Wayne madre de Jason, tenía amantes, muchos amantes. Y también se sabía que producto de esas relaciones había tenido dos hermosos hijos, que al igual que él eran donceles. El mayor era Dick, y el segundo Jason. Sólo Wayne sabía de quién eran hijos, y como todos respetaban su decisión de ser madre soltera nadie cuestionaba.
Así que Jason, siempre tuvo esa incógnita, la duda de no saber quién era su padre. Pero aún así no se molesto en buscarlo, más bien admiraba a su madre por haber tenido tal decisión de permanecer soltero. Y esperaba algún día seguir sus pasos. Ser importante y ser buena madre.

Por lo menos lo de ser importante se le daba bien, había "huido" a Hollywood con la intención de hacer carrera en el mundo del espectáculo, y debido a su belleza era muy cotizado. Buscado por bandas para que protagonizara sus videos, buscado por marcas para que fuera su cara, buscado por magnates para pasar una noche con él. Pero Jason era exigente, no pretendía pasar la noche con viejos ricachones, ni estar en vídeos musicales ajenos, no, él pretendía ser cantante, pero no era uno de los mejores, y por más que le pusiera empeño no lograba atinar ni una nota. Más allá de eso, era feliz sacándole jugo a su belleza, siendo participe de campañas de publicidad, haciendo apariciones en fiestas y siendo él, Jason Wayne.

El alcohol y las fiestas llenaban su agenda, pero su corazón estaba vacío, por más labios que besara no encontraba ya satisfacción, esas sonrisas a las cámaras, al cabo de seis meses, comenzaron a ser falsas, ya no le era del todo entretenido salir a las calles y ser acosado, sus fans eran exigentes, constantemente debía subir fotos a sus redes sociales y fingir que era feliz viviendo una vida realmente hueca.

-Señorito Wayne, su auto ya está listo. - anunció una solemne voz masculina.
-¿Ya despidieron a Ferber? - preguntó sin despegar los ojos de la cámara de su celular, sonrió para ella y sacó la foto, eligió el filtro que resaltará sus ojos - Ese idiota filtró cosas que no debían ser públicas. - miró al techo en busca de una frase para el pie de foto, blanqueo los ojos - C'mon, Jason, let's go party 🎉 #Blush
#SaturdayNigth #Happy
-Ya nos encargamos de él, señorito.
El chico subió la foto y se paró - Bien, espero que este chófer no nos decepcione. - guardó el teléfono y fue directo al ascensor, bajo los ocho pisos, siempre acompañado de aquel hombre que antes había hablado, un hombre mayor llamado Gredler. Al bajar miró atento a su nuevo chófer, ojos azules, cabello rubio, alto, muy alto, una sonrisa ideal, y con traje negro, definitivamente era un bombón a degustar, un poco más grande que él, pero ¿a quién mierda le importaba la diferencia de edad teniendo semejante espécimen enfrente? . El hombre extendió su mano - Wilson, Wade.
-Que nombre tan terrible. - dijo Jason, sonrió y apretó su mano sin dejar de ver sus ojos. Él hombres soltó y sólo abrió la puerta del coche, la sostuvo hasta que la estrella estuviera dentro, la cerró y entró al Ferrari negro.

La música fuerte hacia olvidar sus penas, las manos sobre sus caderas le hacían olvidar el no ser amado, las lenguas dentro de su boca hacían que dejara atrás viejas promesas e ilusiones de amor, pero el alcohol sólo hacía que él recordará todo.
Tomó hasta que no pudo más, bailo hasta que sus pies dolieron, grabó videos para su instagram hasta que ya apenas podía mantenerse en pie. Canto a gritos desafinados hasta que su garganta quedó rasposa, y beso hasta que ya no sintió sus labios.
A duras penas salió del antro, un chico lo alcanzó al auto y cuando este quiso irse Jason lo metió dentro. Sin importarle que apenas hacía una hora que conocía al muchacho comenzó a quitarse la ropa - a cadsaa. - dijo, apenas se le entendía.
Lo hizo con ese chico de cabello rojo y ojos negros, lo hizo durante todo el camino a casa sin importarle que impresión le causaría al chófer nuevo.
Lo hizo.
Lo hizo porque no había nada peor para un Wayne que volver a casa sin compañía.

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⏰ Última actualización: Apr 16, 2018 ⏰

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