SUNSET ━ peter parker

05: la copa fénix.

━━━━ CAPÍTULO 05:
❛ LA COPA FÉNIX ❜

El día anterior había sido bastante extraño, empezando que llamé a Blake en un gran ataque de nervios donde vino casi corriendo al pequeño departamento de Peter inventando miles de excusas baratas, ni siquiera me despedí de él o de May, solamente salí corriendo hacia la puerta para irme sin que vieran como extrañamente mis ojos habían adoptado un color azul bastante notorio. Mi hermano me inundó de preguntas a las cuales yo no tenía ninguna respuesta, pues yo tampoco sabía lo que me estaba sucediendo, mucho menos tenía idea del porque mis ojos cambiaron de color o porque me dolían tanto las palmas de mis manos.

Papá me atendió casi enseguida una vez puse un pie en mi hogar, me dio alguna extraña pócima de la que estoy segura jamás había escuchando siquiera ser mencionada antes y me pidió reposar en mi habitación, ya que está era muy fuerte y me iba a tumbar en la cama. Hice caso a todo lo que me dijo, cuando Blake le preguntaba desesperadamente que me estaba ocurriendo, papá no respondía, solamente le decía que no era tiempo de preguntas, que ponerme nerviosa podría empeorar todo. Dylan no dijo nada, solamente ayudó a Edward a preparar la poción ya que él dijo que era uno de los mejores en esa área cuando iba a La Academia Oscura, papá no se vio muy contento cuando el castaño le ofreció su ayuda, pero la aceptó de todos modos. Una vez me fui a mi cuarto para poder dormir un poco, Dylan me llevó unas chucherías para comer, me dijo que intentará estar relajada y que todo estaría bien, aprecié bastante aquel gesto.

—Hoy es domingo de arquería ¿Lo olvidas? —le dije a mi hermano y este negó mientras practicaba su puntería—. Blake, no seas absurdo, ya me encuentro mejor.

—Papá dijo que estarías algo débil por la poción que te dió ayer, lo mejor será que hoy no saques tu arco y flecha, zanahoria —el pelinegro frunció el ceño.

—No estás hablando enserio.

—Estoy hablando bastante enserio, Jade —dijo un poco más molesto—. Ayer tenías los ojos de un maldito otro color, no sabemos qué demonios está sucediendo ahora, solamente trato de llevar el ritmo de todo ¿Puedes ayudarme con seguir unas simples órdenes? —suspiré profundamente ante sus palabras y asentí con enojo mientras me quitaba todo el armamento y lo lanzaba al césped como una pequeña rabieta.