Te sigo esperando

Sueño

-¿Que era eso que estaba frente a mi? Camine acerandome a la luz brillante que esta entre la oscuridad.
Cualquiera diría que estaba apunto de morir pero... ¿por que la luz era tan atrayente? No sentía que mis pies tocasen el piso, una fuerza misteriosa rapto mi cuerpo, y desperté, todo fue solo un sueño y muy raro.

-Entiendo, soñaste que eras una polilla enorme.

- no soñé que era una polilla enorme!!!

- si lo hiciste, y... te estabas acercando a tu final.

-¡¡No era una POLILLA!!

-bueno, no te pongas agresiva-dijo alzando las manos.

-¡¡ no estoy agresiva!! 

-si aja..y no hay nada mas para contarme??

- no solo eso.

- bueno si me disculpas seguiré durmiendo.

- no te duermas, aun hay más.

- pero dijiste que era solo eso- murmuró ella bajo su almohada- además solo era un sueño.

-si, pero se sintió tan real, fue increíble y miedoso, quizá sea una buena señal quizá  significa que tengo una oportunidad para el illuminate world tour.

- el illuminate ya termino asé muuucho.

-cierto no me lo recuerdes, entonces que mas puede ser?

-tal vez es un aviso sobre una alergia, como a las polillas.

- no era una polilla.

- la cosa es que te gustaba la luz no es así?- preguntó.

-si, era una luz muy bonita.

-cgh polilla cgh- dijo ella  muy bajito.

-te escuche, vete de aqui.

-tu vete de aquí, es mí cuarto!!

-esta bien te veo en la tarde, ya sabes North-east hill a las 3:10 en punto avisale a Dax y Daniel, y yo llamo a Deán y Dante Okey?

-si, ya largate- dice debajo de las cobijas, apenas puede oírla parece un oso en invernacion.

Ya fuera de su cuarto acepto el desayuno que la señora Collins me había ofrecido cuando llegue, pero ya no se encontraba nada en la mesa.

-lo siento cariño, pero ya sabes como son.

-no se preocupe señora Collins, claro que lo sé. Hasta luego.

-espera cariño, podrías decirle a tu madre que necesito hablar con ella lo más pronto posible- dijo mientras me acompañaba a la puerta.

-si claro yo le aviso.

Y salí de la casa de los Collins  rumbo a  mí casa, pasé por mucho para poder llegar, el transcurso a casa era infinito, tanto que sentí que camine por toda la muralla china, recorrí valles, montañas, mares y extensos prados.

Al por fin llegar toque el timbre y me desmorone en el pórtico de mi casa, esperando por que mi salvación abriera la puerta y me librará del  sofocante sol.

Mi madre abrió la puerta  y asustada exclamó:

-dios mío santo, hija estas bien, que te paso?

-la señora Collins quiere verte-dije en mi agonía, susurrando.

-ya vuelo voy a la casa de los vecinos y por favor Doria hija deja de ser dramática -  dijo mamá alejándose en el horizonte mientras lanzaba un trapo asía mi rostro.

Si quizá sea dramática pero yo le llamo ver la vida desde otra perspectiva. 

De un salto me levante y vi a mamá entrar en la casa de los Collins, subí a mi cuatro para seguir descansando, ya que tenía un tanto de pereza para quitarme la pijama.

Intentaría dormir para descubrir que se encontraba detrás de aquella luz.

Después de 3 horas intente dormír pero era imposible, así que decidí hacer mi equipaje para mañana, camisetas ,mi  sweater favorito, pantalones, ropa interior y lo más importante de todo... mi almohada.

Todo estaba listo menos yo, equipaje transporte, refugio, menos yo, porque a mi, quería ese viaje, lo añoraba y  lo planee durante meses, pero había algo que no sabía qué era pero hacía que mis huesos temblaran.

Ojalá fuese algo bueno porque de lo contrario sé que la voy a liar y mucho.