Uno pensaría que todos odiarían a Aurora, pero la realidad es que no. Dicen que no tienen tiempo para gastar sus emociones en alguien que no vale la pena, ni siquiera con el odio. La indiferencia es el mejor y peor castigo que se le puede dar. Yo tampoco estoy dispuesto a desperdiciar mi tiempo pensando o sintiendo nada por ella. Prefiero tener mi mente y mi corazón ocupados, pensando y sintiendo cosas por otra persona. La persona que cambió mi vida desde el momento en que la conocí en aquel Starbucks. La persona que pudo meterse bajo mi piel y dejar una huella por el resto de mi vida.

Lex me rebasa por un lado sobre su longboard y entonces me doy cuenta de que casi llegamos al punto donde nos quedamos de ver con los demás.

Cada año todos venimos a acampar aquí, al lago donde la traje por primera vez, aunque este año es diferente.

Hace unos días nos enteramos de que mi hermana está embarazada después de casi un año que llevan de casados. Lex no quiso que Kaa viniera porque teme que le haga daño y él tampoco se quedará porque no quiere dejarla sola al igual que todos los demás. Creo que es un tanto paranoico. ¡Apenas tiene dos semanas, joder! Pero bueno, debo admitir que yo también quería quedarme y dentro de la alegría que nos dio a todos saber esa noticia, los niños se pusieron un poco tristes porque tal vez este año no podríamos acampar, así que me dispuse a llevarlos de todos modos y estarán bajo mi cuidado y el de Thomas.

Cuando llegamos al punto donde nos quedamos de ver, veo a Thomas junto con sus dos hijos, que también vendrán con nosotros, y a Nikky y a Bruno esperándonos. También hay dos agentes más un poco más atrás.

–¡Papiiii! –grita Nikky, que se acerca corriendo hacia mí con su enorme y hermosa sonrisa.

–Hola, pequeña –la saludo mientras me bajo de la tabla y la recibo con un fuerte abrazo.

–No me digas pequeña –replica, poniéndose completamente seria–. Ya tengo ocho años.

Yo me echo a reír. Tenga la edad que tenga, siempre va a ser mi pequeña.

Y además todavía es pequeña.

–Lo siento, mi pequeña grande –murmuro–. ¿Estás lista para esta noche?

–Sí. ¿Pero cuándo nos van a dejar ir a patinar con ustedes? –pregunta, haciendo pucheros.

–Yo también quiero ir –dice Bruno.

Algo que los dos han aprendido bien es a andar en skateboard. Pero es diferente hacer trucos a ir a toda velocidad en una longboard.

–Todavía estás muy chico, Bruno –le dice Lex.

–¡Pero si ya tengo doce! –replica.

–Tal vez en unos años más –dice Lex sin inmutarse.

¿Cómo es posible que esté tan tranquilo con Bruno y tan histérico con su nuevo bebé que apenas viene en camino?

De verdad que jamás termino de entender a ese idiota.

–Tienen que seguir practicando –murmuro–. Ya depende de cómo vayan, decidiremos cuándo pueden ir con nosotros.

–Bueno –dicen Nikky y Bruno al mismo tiempo, derrotados.

Es gracioso ver cómo hacen sus berrinches, pero son buenos niños y Bruno quiere muchísimo a Nikky, pero también la fastidia demasiado, aunque Nikky jamás se deja. En una ocasión, Bruno le rompió un dibujo que ella estaba haciendo, Nikky no dijo nada ni se enojó con él, sin embargo, esperó hasta el día en que alguno se quedara a dormir en la casa del otro y cuando eso pasó, esperó a que se Bruno durmiera y fue cuando lo pintó todo a él: le puso bigotes, le pintó el cabello con pintura escolar y luego le tomó una foto con el propio teléfono de Bruno. A la mañana siguiente lo amenazó diciéndole que si volvía a romperle algún dibujo, ella subiría la foto a internet y se la mostraría a todos sus amigos. Bruno jamás ha vuelto a romperle dibujos, pero la sigue molestando con otras cosas. Aunque también la protege mucho, como aquella vez en que unos chicos estaban molestando a Nikky por que decían que tiene ojos de gargajo debido a su color verde. Nikky estaba llorando y Bruno la defendió y se peleó a golpes con los chicos. Llamaron de dirección a Lex y ahí nos enteramos de lo que pasó. Jamás regañamos a Bruno por eso, pero le dijimos que no lo volviera a hacer. A los otros chicos, bueno, les quedó claro el mensaje.

Huellas en la Piel ©Where stories live. Discover now