18. Vampiros ~ Larry Stylinson-Terminada

Catorce.

Harry entró a su habitación por el pasadizo de su pared, miró a todos lados pero comprobó que su esposa aún no había regresado o por lo menos allí no estaba.

Iba a tumbarse de nuevo pues ya estaba por amanecer y no se podía salir, pero de repente escuchó un gran jaleo en el pasillo y salió.

—¿Qué es lo que está ocurriendo aquí?—dos de sus guardianes traían a un lacayo a rastras.

—MiLord, es su esposa... ella no está, venía a avisarle.

—Si ya sé. Estará dando un paseo o estará comiendo alg...

—¡Diselo!...¡habla!—exigió el otro guardia empujando al lacayo.

—Si miLord...yo la vi irse con unos vampiros de otra Comunidad.

—¡¿Cómo es eso?!...¡Explicate!...¡Habla escoria!—gritó entonces Harry.

—Y-Yo e-estaba por los alrededores y entonces la vi salir. Unos tipos salieron de los árboles y tras decirse algo desapareció con ellos. Pe-Pensé que regresaría pero no ha sido así, o por lo menos aún no.

—Ahora ya no podemos salir miLord. El sol está por salir. Tendremos que esperar a la noche.

—¿Tendréis que esperar para qué?—preguntó repente una conocida voz tras ellos.

—¡Madeleine!...¿se puede saber de donde vienes?—gruñó molesto Harry.

—Claro esposo, he salido a pasear por tus dominios—dijo la vampiresa atusandose el pelo tam tranquila.

—Te vieron irte con otros vampiros y al parecer eran forasteros.

—Ah eso... si estaban perdidos y yo les indique el camino. No hay peligro—mintió la rubia.

Harry no se creyó mucho el cuento pero no tenía ganas de discutir, además estaba demasiado contento por lo sucedido en los túneles y no quería amargarse.

—Bueno, ya que todo está bien, regresamos a la habitación... ¡Vosotros iros a vuestros deberes, aquí no ha pasado nada!—ordenó a sus guardianes y al lacayo.

Una vez en el intimidad de su cuarto, la vampiresa intentó una vez más tener sexo con Harry pero este le dijo estar muy preocupado y molesto para eso.

La vampiresa chasqueó la lengua molesta y entonces se tumbó ignorandolo por completo, cosa que el vampiro agradeció enormemente.

...

Lejos de allí, en las Comunidades enemigas se preparaban para un nuevos ataque tras las nuevas noticias recibidas.

—Bien mis queridos hijos...esta noche atacaremos la mansión Styles, nadie se interpondrá.—dijo Liam muy confiado.

—Ésta será nuestra oportunidad mi Señor. Por fin acabaremos con ese arrongate follalobos de Styles, ¡es una vergüenza para nuestra raza!—gritó Zayn.

El resto de los miembros vampiros y lacayos de la Comunidad Payne, gritaron enérgicamente con sus ojos rojos de furia.

—¡¡¡Siii....siiii...los mataremos a todos....siii...!!!.

Así que con ansias pero con tiempo suficiente a un par de revolcones, antes del anochecer, Liam y Zayn rieron y planearon que harían en cuanto echasen mano del trono de Harry.

—Cuando sea Lord de esa mansión, todos me temeran y tendrán que doblegarse ante mi y tú, mi dulce Zayn gobernarás conmigo. Se acabará tener que aliarnos con Horan y con Cowell y con las granjas de sangre de los Styles, todos nos tendrán que rendir pleitesía como se la rinden a ellos.

—Amor y que harás con la esposa. Ella es una buena aliada, odia tanto a Styles como nosotros. Madeleine sospecha que él mató a su amante, su más fiel guardián James, tan sólo por proteger al híbrido—dijo el moreno.

—Si es cierto mi querido Zayn. Styles ni se imagina la de traidores que tiene a su alrededor pero de momento no le haremos nada, es valiosa al igual que esa criatura, la cual será nuestra arma secreta. Si no estamos equivocados, en cuanto sepa que la tenemos en nuestro poder, se rendirá y entonces lo destruiremos.—dijo riendo el ojimiel antes de besarlo con pasión de nuevo a su amante.

Louis se despertó en el suelo de un lugar oscuro y húmedo pero no eran las cloacas ni mucho menos, apestaba a vampiro, así que se incorporó pero rápido notó que estaba encadenado, intentó soltarse pero le fue imposible.

Lo último que recordaba era salir feliz del túnel dónde había pasado la mejor experiencia de su vida y con el vampiro más lindo y complaciente del mundo.

Louis estaba completamente seguro, de que ese vampiro era su destino, pero ahora se encontraba encerrado y prisionero y no sabía cómo iba a escaparse.

La puerta se abrió de repente y un vampiro rubio con los ojos azules y muy sonriente le habló.

— ¡Vaya! ...¡vaya!.. ¡vaya!..., Al parecer ya ha despertado la bella durmiente, ¡qué bien!. Ahora podremos jugar y me contarás lo que quiero saber, extraña criatura.

— ¿Quién demonios eres tú?, ¿y por que me tienes prisionero?— preguntó confuso el híbrido ojiazul.

— Me llamo Niall Horan y este es mi buen amigo Simon Cowell—dijo señalando a otro vampiro que entraba en la celda— somos jefes vampiros al igual que tú queridísimo Harry Styles pero al contrario que tu, nosotros lo odiamos y queremos destruirlo.

— ¡Estás loco si piensas que yo voy a ayudaros a destruir a Harry!, ¡antes me tendréis que matar!—Gritó Louis furioso.

— Bueno... eso podremos arreglarlo pero antes te usaremos como cebo y cuando ese estúpido pique, que seguro picará, estará tan débil y vulnerable qué será mucho más fácil destruirlo. Jamás debió perder el culo por una criatura como tú, vas a ser la perdición de Styles.