➴❛❛𝐃𝐈𝐒𝐏𝐀𝐑𝐄𝐉𝐎❜❜; 𝐅.𝐖

✿088✿

P r i m e r a  p a r t e

Ambos bajamos del auto, Finn se acercó a la ventana del copiloto y habló con el dueño del auto entregandole dinero. El trato era que él pagaría el taxi de venida y yo el de regreso, costó demasiado convencerlo.

—Hace frío— dije pasando mis manos por mis brazos.

El carro se fue, el rizado se me acercó y me abrazó

—Eso no me quitará el frío, cariño— dije y reí, él también lo hizo.

—Vamos a entrar— respondió y ambos caminamos hasta la entrada de la casa de Jaeden.

Finn tocó el timbre, y en cuestión de segundos una chica de cabello rubio hasta por los hombros nos recibió.

—¡Jaeden, ya llegaron!— gritó con entusiasmo. —Hola chicos, soy Lilia, ¿cómo están? Entren— me abrazó y besó mi mejilla, con Finn sólo hizo la primera acción.

—Hola— respondimos ambos y se hizo a un lado dejándonos pasar, lo hicimos.

—Llegaron— se acercó Jaeden e hizo lo mismo que Lilia hace unos minutos. —Jack y Ellie están en la sala, vamos—

—Que entusiasmo— dije mientras Finn me miraba, seguí a Lilia y Jaeden.

Era una casa grande, llegamos a la sala, y la pareja estaba en un sillón mientras reían.

—Finn, Hayls— se levantó Jack y nos saludó.

—Hola, soy Ellie— se levantó una chica morena.

—Soy Hayley, novia de Finn— le sonreí.

—Así que eres la famosísima Hayley— se cruzó de brazos.

—No sabía que era famosa— dije mientras hacia la misma acción.

—Lo eres. Eres actriz de stranger things— me susurró Jaeden, y lo miré.

—Hayley, ¿me acompañas a la cocina?— escuché a Lilia.

—Ay, lo siento Finn, no te saludé, que falta de educación la mía— le dijo, mi novio le extendió la mano, pero ella la rechazó; iba a besar su mejilla.

—Creo que deberíamos de ir a la cocina con Lilia, ¿qué dices bebé?— me puse en medio de ellos mirando a Finn.

—Vamos— soltó y ambos seguimos a la rubia. —¿Estás bien?— me preguntó cuando estuvimos lejos.

—¿Viste como te miraba?— le pregunté a Finn.

—Estaba ocupado mirándote a ti— contestó.

—Creo que alguien está celosa— dijo Lilia recargada en la barra, la miré. —Lo siento—

Pasaron entre veinte y treinta minutos, en los cuales buscábamos una película, y al fin habíamos encontrado una.

—Voy al baño— me susurró Finn al oído y se fue.

Pocos minutos después mi celular comenzó a vibrar, la pantalla decía "Mamá", me levanté del sillón y fui hasta la cocina para contestar.

—Hola mami—

—Hola ¿dónde estás?— me preguntó ella.

—Aún estoy en casa de Jaeden— le contesté.

—Ahí está Finn, ¿verdad?— cuestionó, ella le tenía más confianza a él que a mí.

—Sí, está en el baño—