Un favor (una historia de The Loud House)

Capítulo 1: Mañana de ausencias.

Primer capítulo, a ver que dicen.

Pero antes, de seguro hay una duda. ¿Cómo hicieron los padres para ocultar el secreto ante las hijas que no saben de lo acontecido?. Sencillo, las madres mintieron diciendo que sus "padres" habían fallecido cuando ellas nacieron. Y como modo de consolación, Lincoln las invitó a vivir, ya que él "también perdió" a su esposa e hija. Y debido al tiempo que llevan viviendo ahí, era mejor que se dijesen hermanos y no primos. Además, debido a que Lincoln los cuidó, y por ende, es la única figura paternal que hay en la casa, los que no saben del secreto le dicen padre, papá y de más, sin saber la verdad de que en realidad es su padre real.

Con la duda ya resuelta, es momento de que se vea como Lemy Loud ha descubierto el secreto, y con cuales resultados acabará esto.

El inicio de esto da a lugar un día sábado, en la casa remodelada de los Loud, en la que fue con anterioridad la habitación de Lincoln, despertaba un muy cansado Lemy a las 8:00 am.

-Lemy- (Abre los ojos) dios...que noche. Para la próxima debo ser más cuidadoso. ─ Le hablaba a nadie, pero no le importaba. ─ (bosteza y se rasca la cabeza) mejor antes y no después de las 11. ─ Tal vez ni siquiera cumpla esa promesa.

Lemy se puso de pie, se estiró y miró su habitación, la cual para sorpresa suya, estaba normal. Regularmente su hermana Lyra le decoraba la habitación al estilo de ella, aveces era Liby que le hacía bromas en estado de beta, e incluso otras en las que Leia se la decoraba al estilo del glamur por el cabello que largo que él tiene. Pero esta vez no, su habitación llena de posters de sus bandas de rock favoritas, dibujos hechos por él junto a esas bandas y demás cosas estaban ahí.

-Lemy- Aleluya, no tendré que cambiar nada. ─ Al celebrar para sus aposentos, se levantó.

Salió de su habitación y la sorpresa volvió a aparecer en su rostro, normalmente habría una larga fila para entrar al baño, pero esta vez no. No había nadie, ni una sola alma.

-Lemy- ¿Será que habré olvidado una fecha especial?. ─ Decía en tono bajo. ─ Le preguntaré a mamá o a mis tías después. ─ Volvió a no tomar importancia y fue al baño.

Pocos minutos más tarde.

-Lemy- (Abre la puerta del baño) una buena ducha. ─ Se detuvo al ver que no estaba la fila de sus hermanas. ─ (suspira) para iniciar el día. ─ Aunque se relajó, también sentía algo de tristeza, ya que ya se había acostumbrado a verlas en el pasillo.

Debido a que solo se hacía más rara la situación, Lemy fue rápido a su cuarto, se cambió y fue a inspeccionar las habitaciones.

Primero fue al pequeño cuarto de las hermanas Lupe y Lulú, pero nada, ninguna de las pequeñas estaba ahí. Según sabía, esa era la habitación de su tía Lisa y su tía Lily, por lo que de seguro también sería la futura habitación de la hija de su ría más joven. Inspeccionó a detalle, pero solo había una cama, una cuna y bastantes planos y máquinas. Miró un poco desilusionado el suelo y fue a otra habitación.

Decidió acercarse a la de Leia y Lizy, pero cuando entró a la que fue la habitación de sus tías gemelas, solo encontró también que estaba sin las compañeras, solo habían dos camas, una limpia y ordenada junto a mesas de té y unos peluches y otra más sucia, desarreglada, con juguetes de dinosaurios y animales. Esta vez soltó un suspiro, porque si Leia hubiese estado ahí, las cosas se hubiesen puesto feas para él, ya que siempre tiene que tocar esa puerta antes de entrar.

Se dirigió a la tercera habitación, la que sería de Lacy, Lupa y Lina. Según sabía, esa fue la habitación de su tía Lynn y su tía Lucy, pero, el resultado fue el mismo, no había nadie ahí dentro. Un ataúd a la izquierda llena de tumbas, esqueletos, murciélagos y de más estaban ahí, y en la derecha había una litera, en la parte de abajo habían balones, fotos de deportes y deportistas, mientras que por arriba habían posters de música, héroes de cómics y bandas.

Lemy frunció el ceño ante eso, ya se estaba desesperando al no encontrar a nadie.

Intentó calmar su desesperación yendo al cuarto de Liena y Liby, el cual es el cuarto que era de su madre y su tía Luan, más frustrado se puso al ver que también estaba vacío. Solo se encontró con otra litera, prendas tiradas al igual que algunas flores cerca de la ventana, un muñeco de un conejo en forma de títere, y artículos para bromas.

-Lemy- ¡Oh, por el amor de dios!. ─ Miró con fastidio la última habitación que quedaba, la que fue de su tía Lori y su tía Leni. ─ (suspira con molestia) si al menos están ellas, me calmaré. ─ Con pisadas fuertes, se dirigió al cuarto que menos gusto tenía al entrar.

Ese era ahora el cuarto de Loan y su hermana Lyra, con tan solo eso, ya se sabía por qué no le gustaba mucho ese cuarto en específico. Pero viendo que las demás no estaban, Lemy se tragó el disgusto y abrió la puerta. Papeles tirados, una laptop, posters de bandas que ni él conocía más un gran piano es la respuesta obtenida. Tampoco estaban las dos mayores en la casa.

-Lemy- ¡POR DIOS SANTO! ¡¿A DÓNDE DEMONIOS SE FUERON TODAS!?. ─ No pudo más, estalló en ira.

Se tapó la boca al instante, esperaba recibir un regaño de parte de sus padres o sus tías luego de haber gritado así, pero no obtuvo nada.

Sin duda que las cosas se pusieron más extrañas.

Ya no solo estaba enfadado, si no también preocupado. ¿Tampoco estaban su mamá, su papá y sus tías? Rápidamente fue a comprobar su duda. Al bajar, revisó la habitación que según su madre le dijo, era antes el garaje donde se guardaba la camioneta familiar, Vanzilla.

Pero tal como se temía, ese cuarto estaba cerrado con llave, ni él, ni ninguna de sus hermanas (al menos las que no saben el secreto) tienen idea de lo que hay detrás de ese cuarto, solo sabían que sus tías y madres compartían esa habitación con Lincoln, por esa causa, ellas y él piensan que ocultan algo.

Pero ignorando ese hecho, Lemy solo pudo suspirar, estaba solo en la casa. Después festejaría, llamaría a sus amigos y haría una revuelta gigantesca, pero primero tenía que comer algo pero se dijo algo antes de eso.

-Lemy- ¿Dónde están todos?. ─ Luego de hacerse esa pregunta, prosiguió a caminar hacia su destino ya anteriormente mencionado.

Fin del capítulo 1.

¿Estará solo de verdad? Se verá luego.