Dedicatoria para una Hermana

Carta para un desconocido

Querido y amado desconocido mío, no espero que leas esta carta hoy ni mañana, ni en los próximos años.

Puede qué, después de todo lo que hemos pasado, esta carta quede como una pequeña coma o un punto final en nuestra historia.

Nunca te lo conté, el hecho es que escribo, pero no soy buena escribiendo sobre las personas que me hacen feliz, y tu mi amor desconocido me hiciste muy feliz, no sabes cuanto, espero que jamás llegues a pensar que el daño causado es suficiente para borrar cada sonrisa que compartimos.

Esta noche es distinta a las demás ¿por que? 

Porque a pesar de haberte amado tanto, de extrañarte y saber donde vives, esta vez, por primera vez en nuestro pequeño infinito e decidido no buscarte y abandonarme, soltarte y observarte de lejos cual si fuese una extraña que nunca cruzo por tu vida. 

Siempre e pensado que eres igual de maravilloso y nostálgico cual estrella fugaz, apareciste en medio del obscuro firmamento cuando mis ganas de la vida se desvanecían, iluminaste todo a mi al rededor a tu paso y tu luz obligo a mis ojos a abrirse para descubrirse encantados con el maravilloso universo que me ofreciste al darme tu mano y permitirme caminar a tu lado. Pero igual que las estrellas fugaces, llego el momento en que te vi a lo lejos marchar, y llore, llore como no lo he hecho nunca con el alma y mi corazón en manos pero sin una sola lagrima.

Enterrare mi amor en lugar eterno, un lugar en donde no afecte el tiempo, ni los comentarios de las personas, un lugar imperturbable.

Lo cierto es que lo único que odie de ti fueron tus promesas, has prometido (de cierta manera indirecta) volver por mi y me destroza porque se, que no sucederá, me olvidaras y aunque llegues a pensar que soy yo quien lo hará, mi amor, nunca te lograré borrar, porque te amo y esperaría una eternidad de soledad solo por volver a tus brazos una última vez. 

El dolor que siento me agobia, pero me e prometido no llorar, no borrar mi sonrisa nunca más, con la esperanza de que algún día (si vuelves a verla) recuerdes los motivos por los que me amabas.

Y por mucho tiempo que pase no olvidaré nada de ti, guardaré las cartas y los detalles en un viejo baúl que nadie sabe que existe, guardare todas mis ganas de buscarte bajo llave y me iré con nuestro ultimo beso bajo mis sabanas, llevaré mi corazón oxidado de la mano esperando el día en que este dolor se borre, el día en que nuestra despedida sea un ultimo recuerdo y no un pesar de luto como lo siento justo ahora.  

Me había prometido no decirte adiós y no lo logre, porque, muy a pesar de no haberlo dicho, lo sentí en cada fibra de mi cuando te bese en esa parada de camiones por ultima vez, por ultima vez. 

Sigo odiando las despedidas y los finales, pero se de alguna forma (muy incierta) que el final de lo que solíamos ser esta mas cerca de lo que nunca imagine.

Tengo el corazón completo y no esta roto, pero entonces no puedo entender que es lo que me duele.

Tal vez y solo tal vez, me vuelvas a ver, tal vez me verás llegar a tu puerta con una sonrisa y te abrace, preguntándote; ¿me has extrañado?

Pero si eso no sucede... Bueno, supongo que para entonces ya me habrás superado, una parte de mi esta segura que lo harás ya que alguien como tu se merece encontrar una mejor historia, una que no llegue nunca a su final.

Te deseo lo mejor conmigo o sin mi, hasta siempre, hasta luego (o adiós) mi amor.