—Draco Malfoy —respondió Vega frunciendo el ceño—. Alto, albino, con un rostro perfecto para darle una bofetada.

—Sí es así, puedes quedarte el tiempo que quieras.

Vega miró al tercer y último chico en el lugar. Tenía el cabello horriblemente desordenado y vestía ropa como tres veces su talla. Era lindo, pero lo que más llamó su atención fueron los grandes ojos verdes escondidos tras un par de horrorosas gafas redondas.

Harry miró hipnotizado a la chica frente a él. Tenía una larga y perfecta melena recogida en un moño, su color rojo sangre contrastaba con su piel pálida. Su rostro tenía rasgos finos, pómulos altos, mejillas sonrojadas y labios rojos. Tenía unos grandes ojos plateados que por alguna razón se le hicieron familiares.

—No recuerdo haberte visto antes —dijo la castaña, llamando la atención de Vega—. ¿Eres nueva?

—Sí, mi hermana y yo empezaremos cuarto año.

—¡Nosotros también! Soy Hermione Granger, él es Ron Weasley y...

—Harry Potter —respondió el chico de lentes cuando Hermione se quedó callada.

—Yo soy Vega Prince —respondió la pelirroja con una pequeña sonrisa. No estaba acostumbrada a las platicas por cortesía.

—¿Eres Vega Prince? —preguntó Hermione asombrada, mientras Ron la veía con la boca abierta.

Harry miró a sus amigos confundido. Jamás había oído hablar de ninguna Vega Prince, y estaba seguro de que recordaría haber visto antes a una chica como ella.

—¿Vega Prince? —preguntó Ron sin creerlo— ¿Como en Apollo y Ursa Prince?

—Mis padres —respondió Vega cada vez más incómoda.

—¡Los héroes de guerra! —le dijo Ron a Harry— Apollo Prince fue el mejor auror de su época, incluso mejor que Moody. Él sólo acabó con una cuadrilla completa de mortífagos. Su esposa Ursa fue jefa de sanadores en San Mungo. Ella atendía a los aurores heridos, ¡salvó la vida de cientos de ellos.

—Ron —advirtió Hermione al notar la incomodidad de Vega, pero el pelirrojo siguió hablando.

—Ambos eran una pareja mortal en duelos. ¡Tú-sabes-quién tuvo que matarlos él mismo!

—En realidad Voldemort sólo mató a mi padre —aclaró Vega, rodando los ojos cuando Ron y Hermione temblaron al oír el nombre del "señor tenebroso"—. A mí madre la mató Bellatrix Lestrange unos segundos después. La atacó por la espalda. Con primas así, ¿para qué quieres enemigos?

—¿Primas?

—El apellido de soltera de mi madre y el de Bellatrix es Black —dijo, alertando a los tres chicos frente a ella—. Eran primas. Sus padres eran hermanos.

—Y tu madre, ¿no tendrá algo que ver con Sirius Black, o sí? —preguntó Harry intercambiando miradas con Ron y Hermione.

—¿Sirius Black, el famoso mortífago y asesino en masa, que se convirtió en el primer hombre en escapar de Azkaban? —preguntó la pelirroja alzando una ceja—. Mi madre era su hermana. Eran mellizos, de hecho. Sirius es unos minutos mayor.

—¿Y tú... Tú no crees que él pueda ser, ya sabes... inocente?

—Hay testigos que afirman que fue el quien mató a esas trece personas, ¿no? —dijo Vega con tranquilidad— Puede que no haya sido mortífago, pero mató a más de diez personas.

—Y lo dices con una calma... —murmuró Ron, ganándose un codazo de Hermione.

–Es la verdad. Yo no soy quién para juzgarlo o decir que se merece morir en Azkaban. Hay cientos de mortífagos que se merecen diez cadenas perpetuas ahí, pero que jamás pondrán un pie en prisión gracias a sus generosas "donaciones" al ministerio.

Las Mellizas Prince [Harry Potter/Draco Malfoy]Where stories live. Discover now