En Pedazos.

Harry lo tiene todo listo. Ha comprado una pistola. Ha preparado su propio funeral. Ha elegido el día y la hora exacta. Dos semanas es lo que le queda para que todo funcione como él quiere.

Lo único que le falta, es morir.

Pero algo sale mal, Harry no está muerto, por más que lo deseé, no fue realidad. Su plan ha fallado, y solo le quedan veinticinco días para volver a intentarlo, antes de que decida arrepentirse. Él ha vivido una vida difícil, puesto que lo culpan por algo que no fue verdaderamente su culpa, aunque él piense que sí.

La intención de Harry es pasar inadvertido por los últimos días, gozar lo que le queda de vida con sus amigos, para luego apartarlos lo más que pueda, no molestar a nadie con su muerte será perfecto. Pero las cosas se le dificultan cuando él chico del cual está completamente enamorado, se interpone en su camino.

Louis Tomlinson ha estado observando a aquella persona cuyo es callado y, le ayuda con sus tareas. Pero algo le resulta incómodo cuando se ve envuelto por una extraña sensación de protrección hacia él ojiverde.

Veinticinco días para volver a intentarlo. Veinticinco días para poder perdonar. Veinticinco días para seguir con vida. Veinticinco días para enamorarse. Veinticinco días para aprender a reconstruir los pedazos rotos.