RECLUTA A8: LA GUERRERA ─── the maze runner [EDITANDO]

━Capítulo tres

—La lluvia no debe tardar en caer —informo Jorge antes de observar a las chicas, pero justo cuando Zoe estaba por hablar, un estruendo se escuchó en la planta de abajo—. Eso no fue un relámpago ¿verdad?

—Alguien entro —dijo Zoe antes de levantarse de donde estaba sentada, mientras sujetaba su bate con fuerza.

—Debemos ir a inspeccionar —ordeno Brenda antes de comenzar a caminar, siendo seguida por Zoe.

Pero cuando ambas chicas estuvieron por salir de la habitación, Jorge las detuvo colocando una de sus manos sobre el hombro de Brenda. Ambas se giraron a mirarlo con el ceño fruncido.

—Ustedes quédense aquí, yo iré a revisar —les ordeno Jorge a las chicas, colocándolas detrás de él

Ambas se miraron antes de detenerlo y evitarle el salir de la habitación, justo como él lo había hecho con ellas.

—No te dejaremos ir solo —dijeron al unísono.

—Solo iré a ver que fue, si es un código "maniáticos invadieron el cuartel" les mandare una señal. Obedezcan —las dos chicas refunfuñaron antes de ver como Jorge salía de la habitación, dejándolas solas.

—Lo único que espero es que no sea una multitud de cranks los que están ahí abajo.

—No me molestaría demoler unas cuantas cabezas —admitió Zoe, ganándose una mala mirada por parte de Brenda. La castaña solo se encogió de hombros antes de seguir jugando con su bate.

—A veces pienso que la llamarada ya te consumió —le comento Brenda con un toque de burla—. Estás loca.

—Te recuerdo que soy inmune.

—Qué tal si Ava les mintió —le respondió Brenda, logrando que Zoe la mirara seriamente por unos cuantos segundos, pero después termino soltando una risa.

—Bueno, si Ava nos mintió, es muy probable que ya este infectada. Tal vez te asesine durante la noche —comento la castaña antes de soltar una risa maniática, Brenda suspiro antes de arrojarle un trapo a Zoe, dándole directamente en su cara, logrando que las dos comenzaran a reír.

La llegada de Zoe había tenido un gran impacto en Brenda, se habían vuelto muy cercanas y para la azabache, Zoe se había convertido en su rayo de luz dentro de toda esa vida tan miserable que había llevado.

Las dos chicas continuaron hablando, mientras esperaban a Jorge. Pero estaba tardando demasiado y no había ninguna señal sobre un ataque, así que poco a poco el sueño comenzó a vencer a Zoe.

Pasaron unos cuantos minutos más para que la castaña se quedara completamente dormida, provocando que no pudiera recibir las noticias que Jorge les traía sobre los visitantes que tenían en el cuartel.

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Cuando Jorge por fin llego a la habitación de las chicas, noto que Zoe ya estaba dormida, al verla en ese estado un suspiro de alivio se escapó de sus labios.

—¿Qué paso allá abajo? ¿Por qué tardaste tanto? —lo interrogo Brenda en cuanto lo vio llegar.

—Es un grupo de chicos, todos son hombres, ya todos se quedaron dormidos —le respondió Jorge a la azabache, logrando que ella lo mirara de forma curiosa, queriendo saber más sobre aquel grupo que acababa de invadir su cuartel—. Ya les informé a todos de que dejemos dormir en paz a nuestros intrusos, mañana les daremos una bienvenida a nuestro estilo.