Cap 1: ¿Cómo decías que se llamaba? ¿Hogwarts? Parte I

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Esta historia es... un poco extraña, te lo digo en serio, es la historia de mi vida así que ve preparándote amig@.
Mi nombre es Alai, Alai Morales Romero, pero prefiero Alai Romero. Morales es el apellido de mi padrastro, al cual yo creí mi padre biológico hasta que cumplí los 11 y mi vida se fue al diablo. Sí, el mundo se me puso de cabeza cuando me dijeron que mi padre no era mi verdadero padre, que mi verdadero padre era un dios griego, y por ende, yo era una semidiosa.

Al principio creí que era una broma, luego me di cuenta que hablaban en serio, por la forma en que mi madre lo admitió. Yo nunca había dado signos de ser especial, entendía un poco el latín y el griego (más el griego) y cuando lo entendía sentía un cosquilleo dentro mío; no tenía dislexia, no me habían expulsado de ningún colegio (¡Incluso tenía buenas notas!) y tampoco me había pasado nada 'extraño'. A diferencia de mis muchos otros compañeros semidioses, yo llevaba una vida prácticamente normal y decente hasta ese momento. Pero cuando el rayo color celeste brillante apareció sobre mi cabeza, no hubo duda alguna (He de decir que dejo un olor a Ozono... ¡Terrible!) , era una semidiosa.

Aquella noche, bueno, aquella madrugada me comenzaron a picar los ojos. Mis ojos eran café oscuro (Sí, dije ERAN) como...los granos de café. Luego de la picazón me comenzaron a arder, más y más. Abrí los ojos, no distinguí nada diferente en mi visión (Aparte de las típicas luces de colores que aparecen cuando te frotas los ojos)...Hasta que me vi en el espejo.

Estoy segura de que me escucharon gritar hasta Japón.

Mis ojos, que hasta unas horas antes habían estado en su color habitual, estaban ahora de un azul eléctrico, un azul muy bonito, he de admitir.

Mi madre, aunque trató de calmarme, no pudo ocultar su sorpresa y luego me dijo que, naturalmente, mis ojos debieron ser azules pero Zeus hizo un... ¿Cómo llamarlo? ¿Hechizo? ¿Conjuro? Bueno...Ustedes me entienden, algo por el estilo, para que mis ojos no adquieran su apariencia natural hasta que cumpla los 11, a esa edad me reconocería. Pero al parecer, el color de mis ojos no fue lo único que el hechizo mantuvo a raya.

Tratando de dejar atrás el hecho de que mis ojos cambiaron de color (lo cual me tomo tiempo) empecé a leer, siempre me encantó leer mucho, pero apenas abrí el libro las letras comenzaron a dar vueltas por la página (No técnicamente, claro), así que me di por vencida luego de intentar leer una hora mas o menos.

Llegó el tipo que me había dado la excelente noticia (notese el sarcasmo) de que era una semidiosa, él me dijo que probablemente iba a haber más cambios. Yo usaba lentes...pero luego me di cuenta de que, no los llevaba puestos y, ¡veía a la perfección!

El tipo, que luego descubrí que se llamaba Grover, me dijo que empacara mis cosas, que nos íbamos a un campamento. Yo lo miré con desconfianza y luego miré a mis padres, quienes asintieron. Grover estuvo en mi cumpleaños y luego volvió el 30 de Diciembre, 3 días después, a recogerme.

Luego de una emotiva despedida de parte de mis padres, fuimos a la estación y tomamos un bus hacia Long Island Sound**

-¿Me quieres explicar bien lo que esta pasando?-

-Lo siento, Alai. Pero no soy la persona adecuada para contártelo todo-

Me crucé de brazos, frustrada, y decidí concentrarme en el paisaje para evitar pensar en todo lo que este pequeño cambio traería como consecuencia.

Llegamos a la estación de Long Island Sound y tomamos un taxi hasta una colina en la que había un campo de cultivo de fresas, el taxista pareció tan confundido como yo, pero no dijo nada. Cuando bajamos y subimos la colina vi una de las cosas más impresionantes de mi vida, si hubiera sido posible que la mandíbula se me cayera al piso, lo habría hecho, créanme.
Un campamento en medio de la nada.

Dado que mi primito querido tiene su propia saga, deben saber como es el campamento, hay solamente 12 cabañas para los 12 dioses Olímpicos.

Bien, esa podría ser la introducción.
Vamos al punto, a lo que pasó ese fatídico día.

Yo estaba caminando tranquilamente en dirección al ruedo de arena, como decía en mi horario. Esquivé unas cuantas flechas de los aprendices de la cabaña de Apolo, los cuales se disculparon; y luego tuve que rodear un poco la cabaña de Ares ya que al parecer estaban resolviendo un par de... conflictos internos en su jardín frontal.
Pasé por el lago y luego sentí un par de manos que me tapaban los ojos.

-¿Quién soy?-

-¿Travis?

-Nop

-¿Connor?

-¿Cómo es que la gente lo sabe?

-Es que... si no es uno, es el otro, hermano

Connor se encogió de hombros

-Bueno chicos... ¿Qué se les ofrece?-

- Quirón nos ha dicho que te digamos que vayas a verlo a la Casa Grande- dijo Travis

-Ahora-Completó Connor

-Ok- Me di media vuelta y empecé a caminar hacia la Casa Grande

-¡Ah! ¡Y que vayas con Percy! -Gritó Travis

-¡Lo hubieras dicho antes!- Dije, mientras daba una vuelta para dirigirme a buscar a mi primo.

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Holuuu! EL PRIMER CAP! Espero que les haya gustado!

*Créditos por el nombre a Cris Morena Group

Editado

Living the impossible (Harry Potter/Percy Jackson crossover) [EDITANDO]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora