Aquí encontraras pequeñas historias de diversas series como: The walking dead, por trece razones, Drake y Josh, Inuyasah, Dragon ball. De doramas coreanos y hasta crepypastas...
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Las paredes del santuario me sofocaban, cada día aquí era una tortura, Negan el simplemente cambio, no era el mismo hombre que conocí cuando todo esto inicio. Esos hermosos ojos que un día me conquistaron ahora reflejan demencia. Luego estaba ese recuerdo, ese espantoso bate al cual nunca le haría competencia.
- Aquí estas preciosa- me dijo mientras se acercaba a mí con esa sonrisa tan característica de el- vamos, se acerca la hora, por fin- continuaba mientras en sus ojos se reflejaba un brillo inusual- te involucraras en uno de mis trabajos- tomo mi mentón y deposito un beso fugaz en mis labios.
Odiaba lo que era, odiaba en lo que nos habíamos convertido, como tratábamos a los demás, todo por "el nuevo orden mundial". Nunca participe en ninguno de sus tratos odiaba su método, hasta ahora solo le había ayudado a mantener este lugar en pie, desde el inicio era su sostén, más que su mano derecha. Todo lo que hacía era idear métodos, estrategias mis métodos y estrategias, desde abastecernos de una manera ideal para con la comida y las cosas necesarias, hasta que lugares atacar primero, ayudaba indirectamente y hasta ahí me quedaba en los mapas, no quería saber nada acerca de toda esa gente.
Él no me quería afuera, en el fondo sé que no quería que viera de primera mano en lo que se había convertido. Y ahora las cosas estaban cambiando desde que esos malditos se habían encargado de atacar una de nuestras bases mientras todos dormían. Muy cobarde y traicionero a mi forma de pensar.
Así que aquí estoy nuevamente como hace muchos años, debatiéndome sobre abandonar a alguien para no involucrarme más en su mundo, como la cobarde que soy.
Para no hacerlo esperar me levante y amarre mi pelo castaño y ondulado, "como lo tenía el" pensé con nostalgia, me asome al espejo y pude ver la cicatriz que surcaba desde mi ojo izquierdo hasta la barbilla, producto del accidente que el hermano de mi ex provoco una de las tantas veces que se drogo, pensar en él hace que mi corazón sienta un fuerte dolor creo que en realidad nunca lo deje de amar. Pero, digamos que no soy buena eligiendo pareja. Menos aun manteniéndolas a mi lado porque vaya que amaba a mi ex, mucho más de lo que alguna vez quise a este demente...
- Kendra, si no sales ahora- comenzó a tocar la puerta- entrare por ti y pondré a simetría tu maldita cara- dijo Negan impaciente apresurándome para salir del cuarto
Abrí la puerta con fuerza y le grite
- Jodete, cabron- me acerque amenazante con toda la rabia y confusión que me atormentaban
- Tranquila princesa- dijo levantando las manos en señal de paz- te daré la grandiosa oportunidad de matar a la gente que mato a Edan mientras el cabron dormía- mi rostro se ensombreció rápidamente y por un instante, pude sentir que había adoptado la mirada de Negan, él lo noto y acaricio mi cicatriz- así es querida te daré la oportunidad de que entiendas- acerco su rostro a mi oído- los tienen a todos rodeados- diciendo esto último volvió a besar mis labios, mientras se encaminaba a la salida conmigo detrás de él.
Edan no se merecía lo que le hicieron esos hijos de puta, le había costado sobrevivir, era mi mejor amigo, el único en esta mierda de mundo, por fin estaba comprendiendo todo. Ese maldito grupo, fueran quienes fueran, ellos, me conocerían hoy y definitivamente sabrían lo que es vivir en el mismísimo infierno, porque así es, tocaron a los míos y yo no me tocare el corazón, esta noche cambiaria, esta noche lo demostraría.
Esta noche es malditos serán los primeros en notar mi cambio, este cambio que por primera vez me parece el correcto, cambio que en adelante viviría, no dejaría que tocaran a los míos de nuevo.
- Kendra sube- me dijo tomando mi mano y ayudándome a subir al vehículo- lo vas a disfrutar mucho nena- sonrió, de una forma aterradora, en ese instante quise hacerme para atrás- por Eidan nena, el cabron era duro no se lo merecía, era leal, era tu amigo-
Todavía con un poco de dudas acerque mi rostro al suyo y lo bese, como nunca antes, era alguien nuevo; subí al vehículo, con una nueva idea. Esto parece ser lo correcto ahora por el momento esos hijos de perra sin suerte serán los primeros en conocer a la nueva Kendra Grimes.
