Capitulo tres.

4.6K 423 41
                                    

12 de septiembre del 2016.

Hoy te volví a ver. Llegabas con una remera rosada, unos jeans algo sueltos celestes, unos converses rojas, una gorra amarilla y una sudadera blanca con rayas celestes. Todos te iban dejando el paso libre para que siguieras de largo. Todos te admiraban y enmudecían cuando estabas cerca, y no por miedo, si no por admiración. No tan lejos de la entrada, entro Chloe con sus amigos enojados y se acercaron a ti. Te intentaron golpearon, y tu no hiciste nada,solo esquivabas los golpes. Apareció el profesor Aaron, con una sonrisa maliciosa y los llevo con el director a los dos. No supe mas de ti en la mañana.

Él profesor de historia quería hacer una obra de teatro. No entiendo porque. Tampoco me interesa. Nadie quería participar, tal vez por miedo. Tal vez porque no les gustaba. Pero tu alzaste tu mano y apoyaste la idea, comentando que participarías siendo actor, a escribir el libreto, la escenografía y la música. Todos nos quedamos viéndote. El profesor estaba que rebosaba de alegría, y no dudo en agradecerte todo, después nos pregunto quienes participarían ademas de ti. Casi todos se apuntaron. Incluyéndome.

Durante el receso estuviste pasando con una bandeja de comida. Traías mucha comida en ella. Ignorabas todas las miradas alrededor tuyo. El profesor Aaron te miro y quiso burlarse de ti por la cantidad de comida que llevabas. Tu solo lo miraste curiosa y respondiste con una indirecta. Solo lo pusiste furioso y te fuiste de nuevo al patio. Todos estábamos mudos. Nadie supo que ocurrió en la dirección después de que te llevaron junto a Chloe y sus amigos, pero algo debió ocurrir porque nadie los volvió a ver. No fueron a ninguna clase. Ademas el profesor Aaron estuvo molesto todo el día después que salio de allí.

Ibas caminando mientras leías un libros. Maravilloso desastre alcance a leer en la portada. Sin ver el camino chocamos. Me miraste apenada y te disculpaste mientras me ayudabas a recoger mis cosas. Yo intentaba contestar normal, me intimidaba tu presencia. Me dedicaste una sonrisa, y te presentaste. Supe que te llamabas Marinette, y pude notar que poseías un asentó raro. No pude saber bien de donde, pero definitivamente no de era de Francia. Me miraste una ultima vez devolviendome los últimos libros. Nuestras manos se rozaron y una corriente eléctrica me invadió por completo. Me sonreíste por ultima vez y te fuiste por aquella enorme puerta. Todas las miradas habían estado sobre nosotros expectantes a algún sucedo. Pero no ocurrió nada.

Aun siento esa descarga en mi mano. Se siente bien. No se que es lo que ocurre. Ojala pudiéramos chocar nuevamente.

La chica nueva. [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora