ROCK NIGHTS AND METAL DREAMS #PHAWARDS

CAPÍTULO IV

Bueno, bueno... ¿cómo va éso? Siento estar tardando tanto en publicar, pero me han surgido algunas cosas. Intento publicar casi todas las semanas más o menos, así que, por aquí os dejo los temas que corresponden a éste capítulo y el susodicho. ¡Espero que os guste! Por cierto, estoy de celebración, como la que hace hoy Finlandia, mi adorado país, que cumple su Primer Siglo de Independencia, estreno portada (esta vez la definitiva) os la dejo al final y ya me diréis lo que os parece!! Ahora si... ¡a disfrutar! 

PD: me gustaría dar gracias a Whittier por corregirme los anteriores capítulos y a todos los que me leéis!! Nos seguimos!! ^.^

PD2: tengo pendiente publicar una lista con recomendaciones de algunas de vuestras historias y de historias que más me han gustado. 

  DONT STOP BELIEVING- JOURNEY   

WHEN LOVE AND HATE COLLIDE- DEF LEPPARD en el título, creo que es la que más sentido tiene en ésta parte. 

LOST HIGHWAY- BON JOVI 

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El miércoles por la mañana amaneció lluvioso y gris, algo habitual en aquellas latitudes, pero que contrastaba con el calor agotador y pegajoso que parecía haberse impuesto en los meses anteriores.

Tomó su desayuno habitual: dos tostadas con mantequilla y mermelada de arándanos, un zumo de naranja y un café bien cargado, frente a la ventana que daba al jardín trasero, en donde cada mañana contemplaba a su vecino de 22 años jugar al baloncesto, como de costumbre, sin camiseta. Parecía que no tenía ningún reparo en exhibirse, así que, ella tampoco lo había tenido en adoptarlo como su ritual mañanero. Tras esto se despidió de Kala, la perra de su compañera de piso, se subió al coche, comprobó que tenía buen aspecto y se dirigió hacia la sede que la Universal tenía en la capital.

El camino desde Espoo, la ciudad en la que vivía, y Helsinki, distaba unos 20 minutos y durante el trayecto se atravesaba por pequeñas zonas boscosas desde las que se podían divisar varios lagos. Por el aspecto actual del paisaje pocos podrían adivinar lo diferente que era todo en invierno, cuando la nieve reclamaba su reino, creando un confuso desierto blanco, algo que pudo experimentar en persona al poco de mudarse, cuando se perdió y había estado dando vueltas durante una hora a menos quince bajo cero, mientras se congelaba y una sensación de ansiedad la embargaba, menos mal que Julie, su compañera de piso, había ido a salvarla, sino se habría acabado convirtiendo en un palito de hielo.

En Helsinki tuvo suerte y consiguió aparcar a la primera en la antigua estación de tren, desde donde iría caminando hasta la sede de la discográfica. Si algo le gustaba de aquella ciudad es que se podía ir caminado prácticamente a cualquier sitio, por no hablar que era un auténtico lujo hacerlo rodeada por todos aquellos edificios neoclásicos que adornaban la ciudad. Además la capital era tan pequeña que pensaba que algún día tropezaría y acabaría dando de bruces en Suecia, sonrió internamente y comenzó a preguntarse qué le tendría preparado el sello en aquella ocasión. La última vez que había pasado por las oficinas había sido para presentar a un nuevo grupo y había acudido allí con otros periodistas, había sido durante una conferencia, pero aquello ya se lo habían explicado anteriormente, ahora no tenía la menor idea y se preguntaba a qué vendría tanto misterio. Fuera lo que fuera, lo sabría en breve y seguro que era algo grande, no se lo explicaba de otro modo. O igual se estaba llenando la cabeza de ideas tontas y cuando llegara, se encontraba allí con más periodistas. Todo era posible.