06. THE PRINCE AND THE MAIDEN.

1.9K 189 7
                                    

06.

06

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.


EL PRÍNCIPE Y LA DONCELLA

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

EL PRÍNCIPE Y LA DONCELLA.


        El príncipe y el profesor Cornelius, bajaron por las escaleras secretas hasta la armería y allí Caspian tomo una pechera y una espada mientras que el profesor Cornelius lo esperaba atento a cualquier movimiento extraño.

Cuando Caspian se iba a dirigir a las caballerizas, Cornelius lo detuvo.

- Antes tienes que ir por ella –le dijo obligándolo a retroceder en sus pasos.

- ¿Quien? –pregunto confuso Caspian.

- La chica, la chica que Miraz arresto, es una narniana que representa una amenaza para tu tío... Miraz quiere darle de baja.

Los ojos de Caspian se abrieron con sorpresa y miro a todos lados comprendiendo lo que pasaba. La misma chica que le había predicho su muerte era la misma de la que hablaba el profesor Cornelius, a eso no había que darle más vueltas.

Sin pensarlo dos veces corrió directo a los calabozos buscando en cada una de las celdas. Al sentir una presencia extraña en una de ellas, se detuvo en seco y se giro sobre sus tobillos volviendo a sentir el mismo cosquilleo que en la pesadilla o sueño. No había mucha iluminación así que tuvo que entrecerrar los ojos para poder reconocer que era lo que había adentro.

- ¿Me buscabas? –la dulce voz de la doncella, le hizo erizar los bellos del cuerpo.

Era real.

La chica realmente era real.

Salió de la oscuridad luciendo como Caspian la había visto en su pesadilla. Sus ojos la recorrieron a de arriba abajo, luciendo sorprendido por la presencia de la doncella.

- Te voy a sacar de aquí...

Caspian busco las llaves y abrió rápidamente la puerta de la celda. Cuando la doncella puso un pie fuera, no perdieron tiempo y recorrieron el camino de vuelta donde Cornelius.

- ¿Cómo lo sabías? –le pregunto la chica al profesor.

- Un caballo parlante no me dejo volver al castillo después de mi recorrido diario por el bosque.

- Charlisse –murmuro la doncella sonriendo y negando a la vez por las ocurrencias de la potra que siempre la acompañaba.

- Señorita Draconis, deben huir ahora.

Cornelius no quería perder más tiempo así que le paso su capa a Caspian mientras la chica agarraba una espada.

Corrieron a la caballeriza encontrándose con dos caballos con sillas de montura y la doncella no dudo en correr directo a su fiel compañera.

- Te dije que huyeras –le dijo a Charlisse.

- Nunca me iría sin ti –se disculpó la potra.

Los dos hombres se vieron con sorpresa al escuchar la potra hablar. El príncipe Caspian se subió a su cabello al igual que la doncella y ambos esperaron que Cornelius le diera indicaciones al príncipe.

- Debes ocultarte en el bosque, ve siempre con ella –ordeno Cornelius al príncipe.

- ¿Al bosque? Y ¿Por qué con ella? –pregunto Caspian sintiéndose intimidado por la mirada que la doncella le había dado al cuestionarse sobre su compañía.

- A ella le temen de una forma extraña y no los seguirán estando alli –respondió Cornelius.

Busco algo entre su ropaje y cuando lo obtuvo se lo paso al príncipe.

- Encontrar esto me ha llevado muchos años –Caspian lo tomo entre sus manos y lo guardo en su bolso sin mucha importancia.

- No lo uses, a menos que sea necesario.

Kassia llamo la atención de ambos hombres carraspeando.

- Debemos irnos, los odiosos telmarinos no nos dejaran salir sin dar pelea –aviso adelantándose un poco dejando que se despidieran.

Miro el cielo despejado y la enorme luna que lo decoraba. Ya no había nada que la detuviera porque sabía que de ahora en adelante, Narnia tomaría un nuevo rumbo y ella como protectora de las tierras de Aslan no descansaría hasta que los Narnianos volvieran a andar por lo que antes había sido suyo por derecho.

No le agradaba, no le agradaba para nada la idea de tener que huir con un telmarino pero debía darle tiempo al tiempo, Aslan sabía lo que hacía al permitir que la arrestaran los telmarinos.

Cuando el príncipe se paró junto a la doncella ambos se dieron una mirada de aprobación y empezaron a cabalgar por la plaza del castillo. Algunos telmarinos que estaban junto a la salida se interpusieron en sus caminos pero ellos rápidamente se deshicieron de ellos, bandeando sus espadas.

Corrieron el largo puente del castillo, uno al lado del otro sin mirar atrás.

El príncipe y la doncella, huyeron juntos directo al bosque, donde la vida que este antes tenía volvería a resurgir lentamente.

El príncipe y la doncella, huyeron juntos directo al bosque, donde la vida que este antes tenía volvería a resurgir lentamente

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
NIGHTMARE | P. PEVENSIEWhere stories live. Discover now