Adoraba tu inexpresivo cuerpo,
Amaba cada parte de ti,
contemplaba tu hablar,
tu lejanía me acercaba a ti.
¡Por favor amado! No me sueltes.
¡No me sueltes! te suplica mi alma,
¡No me dejes! mi ser grita por ti.
Solloza por tu puro sentimiento,
muerto en mi nostalgia,
muerto al sentir tu vacío.
Se acercaba tu mano cálida,
se aproximaba a mí,
Sentí tu amor, ¡cuán mágico amor!
Tan irreal que desaparecía en pensamientos.
¿Qué necesitas de mi?
¿Que quieres al tocar mi puerta?
quizá no leas estos versos,
quizá pienses que te olvidé.
Vives aún en mis recuerdos
Recuerdos de una mirada
aquella que siempre amé y vivirá
¡Y sí!, Es más que un recuerdo.
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Laberinto de poemas
PoésieEscribir es un respiro, creo lo que deseo sin mirar alrededor, ni esperar una fortuna, ¿acaso es un engaño nada más? quién sabe... y si así fuera, ¡Oh por Dios! ¡Que buen engaño! -David Montiel